Vainilla

529 58 3
                                    



Los dos se miraron fijamente por quién sabe cuántos segundos sin decir una palabra y sin mover un solo musculo. Hasta que Zhan dio el primer paso y se acercó, haciendo temblar un poco el corazón del castaño, el cual no demostró nada y se mantuvo serio. Con los ojos fijos en aquel hombre, que a pesar de tener ojeras y una pequeña barba, seguía siendo igual de hermoso que siempre.

- Yibo.

- Xiao Zhan.

Otro silencio.

Sus ojos se perdieron un poco en los de la persona frente a él, pero no dijo nada. Yibo se mantuvo firme, aunque su nuez de Adán lo delató al mecerse suavemente cuando tragó saliva. Sus ojos se movieron por el rostro de aquel hombre que había tratado de olvidar durante un año completo. Por el que había llorado, al que le debía varias noches en vela.

- Felicidades.

- ¿Mm?

- Por tú gran debut.

Yibo controló un pequeño palpitar agridulce. Había deseado tanto escuchar esas palabras hace doce meses atrás. Podría haber sido el hombre más feliz del mundo con solo esas cinco palabras, pero ahora no tenia idea de cómo sentirse.

- Mn, gracias.

Después de otro incomodo silencio, Zhan preguntó - ¿Eres amigo del artista?

- A-Ying. Ella me invitó o más bien me arrastró - rascó su nuca y mantuvo su otra mano dentro del bolsillo de su traje - Dijo que la popularidad del artista sería aún mayor si nos mostrábamos los dos.

Zhan sonrió suavemente - Tiene una gran mente de negocios.

- ¿Y tú?

- A-Cheng me dijo que vendrías.

Yibo se sorprendió por esa sincera respuesta e inconscientemente apretó la mano dentro de su bolsillo.

- ¿Por qué?

- Porque quería verte.

Yibo arqueó una ceja. Sin mala intención dijo - Hiciste todo lo posible por alejarme, ¿Por qué ahora querrías verme?

Los ojos de Zhan se llenaron de una capa de tristeza, sorprendiendo un poco más al castaño. Nunca había visto esa mirada y tampoco supo cómo reaccionar a ella. Ni mucho menos a ese hombre. Así que solo suspiró.

- No te entiendo, Xiao Zhan.

- Yibo, yo... - calló un poco, aclarando su garganta y su expresión - Me gustaría hablar contigo. ¿Puedes aceptar cenar conmigo?

- ¿Cenar?

- Mn, solo... - mordió su labio inferior - Dame una oportunidad, por favor.

Yibo volvió a sorprenderse por aquella petición. Xiao Zhan nunca había pedido un favor. Nunca con ese rostro ni con esa angustia y ruego en su voz. 

Recordó un par de veces, entre las sábanas rojas del cuarto de juegos en donde pedía "Por favor" pero de una manera muy diferente. Con sentimientos casi inexistentes y a punto de venirse. Pero está vez, había algo.

¿Desesperación? ¿Angustia? ¿Anhelo?

No.

Yibo no se atrevió a seguir ese tren de pensamientos para volver a ilusionarse como un estúpido. Él sabía que en el corazón de Xiao Zhan no había espacio para él. Y quizás, para nadie externo a su familia adoptiva.

- Yibo... - se acercó y tocó su mano libre suavemente, como el toque de una mariposa asustada de la reacción de su contra parte si se posaba completamente - Cena conmigo. En serio quiero... Decirte muchas cosas.

Behind the ShadowWhere stories live. Discover now