Behind the Shadow

Engaño.

[ Capítulo 22 ]

Cuando Xiao Zhan despertó a la mañana siguiente, estaba solo en la cama. Lo cual encontró extraño, ya que Yibo solía ser muy perezoso en las mañanas. Se levantó y miró el reloj de su celular, marcaba las seis por lo que se levantó, ya que debía irse temprano este día también para reuniones en la oficina. Tomó un baño y se vistió, bajando directo a la cocina en donde al fin encontró a su esposo, bebiendo un café en la isla ya vestido.

Sonrió y caminó hasta él, besándole la mejilla - ¿Te caíste de la cama, Zai Zai?

- Mn - lo miró de forma seria - ¿También debes ir temprano a la oficina hoy?

- Sí, pero será la última vez, mañana podré desayunar contigo.- sonrió mientras acariciaba sus castaños cabellos.

- No creo que se pueda, mañana comienzan mis grabaciones de nuevo, así que me tendré que ir antes de las seis.

- Entiendo. ¿A qué hora llegarás hoy?

- No lo sé.

- Intenta venir temprano - tomó la mandíbula de Yibo y se acercó a sus labios - Voy a cocinar para ti y podemos meternos en las burbujas de la tina, ¿No te apetece? - lo besó suavemente y Yibo no reaccionó. Solo miró en silencio, con seriedad. Confundiendo más a Zhan, el cual dejó de besarlo y se quedó cerca - ¿Qué pasa? ¿Por qué luces así?

Yibo no habló, pero movió su mano, tomando el sobre amarillo que había dejado cerca y lo empujó hacia Xiao Zhan, el cual lo miró aún sacado de onda.

- ¿Qué es esto?

- Ábrelo y velo por ti mismo.

Zhan lo miró y tomó el sobre, sacando el contenido y mirándolo. Sus ojos se abrieron más grandes y sus cejas se fruncieron. Miró a Yibo que no había dejado de analizar su expresión.

- ¿Quién envió esto?

- ¿Eso importa? - se puso de pie y dejó la taza en el lavadero, dándole una mirada a Zhan y yendo hacia la puerta.

- Espera, Yibo - dejó las fotos sobre la isla y lo siguió, tomándolo de la muñeca - No es lo que estás pensando, solo compartimos un café.

- ¿Solos? ¿Siendo que lo que más te pedí fue que no lo hicieras?

- Yibo...

El nombrado se soltó de su mano y tomó su chaqueta - Haz lo que quieras, ya no me importa.

- No - lo tomó de nuevo y lo miró - No digas que no importa, no digas que yo no te importo.

Yibo lo miró con seriedad - Zhan-Ge, tu siempre vuelves a él, siempre. ¿Entonces, qué saco yo con que me importe? - se soltó nuevamente de su agarre y tomó su bolso - Desayunaré con Hai-Kuan y me iré al trabajo, no me esperes a cenar.

Se subió al ascensor y bajó sin darle una mirada a su esposo. Zhan se quedó de pie sin saber qué hacer ni qué decir. Sabia que había actuado mal y que Yibo debería estar decepcionado de él, lo entendía. De todos modos, Yibo solo le había pedido dos cosas, una era que mejorara y otra que se alejara de Xuan Hao, pero honestamente, no estaba haciendo ni la una ni la otra.

Suspiró y se quedó de pie en la entrada, diciéndose a si mismo que lo mejor era darle tiempo para que se calmara y pudieran hablar de manera tranquila. Si algo había aprendido de su cachorro, era que nada bueno salía de hablar con las emociones revueltas y al dente. Imaginaba que le haría bien hablar con su amigo y desahogarse, mientras él descubría quién se había interpuesto entre ellos y había enviado esas fotos. Porque claro que no lo olvidaría. Había alguien siguiéndolo y no descansaría hasta deshacerse de aquella persona que estaba intentando dañar su relación.