El fénix y la rosa

Hay más...

Unas semanas después de la boda Ace, Irimi y yo seguimos en nuestra cacería contra Kurohige, claro que esta vez, era diferente, no habrían más distracciones.

Irimi se había tatuado la marca de los Piratas Shirohige en la nuca, después de que le explicó a padre que ella era una vieja amiga mía y de que demostró que podía confiar en ella, finalmente Irimi se convirtió en una pirata.

Un día, mientras estábamos relajados en la cubierta del barco, recibimos el perdiódico con una noticia algo extraña, el titular decía: "Extraña criatura de un ojo ataca cuartel de la marina, mata a varios Marines y escapa ilesa".

Irimi y yo miramos la foto detenidamente y palidecimos al instante —¡Esa es-!—Dijo Irimi sorprendida mientras Ace se acercó a nosotras y vio la foto del periódico.

Yo dije —No hay duda... es ella—Irimi y yo mirábamos la foto impactadas sin decir una palabra y Ace preguntó señalando la foto —¿Amigo suyo?—Pero ninguna de nosotras dijo nada, hasta que finalmente yo pude decir —Es... el Búho de un Ojo... Yoshimura Eto—Ace seguía sin entender, pero Irimi y yo lo sabíamos: ella era peligrosa.

—En Tokio habían ghouls con los que nadie quería toparse: Jason, el Glotón, El Gourmet, los Payasos, Ojo Parchado y... El Búho de un Ojo—Dije, aún más pálida que antes.

Irimi y yo dejamos el periódico y le dije —Si ella está aquí, habrá problemas seguros, no sabe medirse, es igual o peor que Rize—Pero Irimi tenía un brillo particular en sus ojos, y con duda me dijo —Pero si ella está aquí ¿Es posible que el jefe y Koma...?—.

Entendí lo que quería decir, y cuando lo mencionó también me llegó la esperanza de que ellos estuvieran aquí, vivos y a espera de encontrar a alguien más de su raza, así que sólo podíamos hacer una cosa...

Miré a Irimi y a Ace y dije —Sólo hay una forma de saberlo...—Irimi me miró con interés mientras Ace lo hizo con curiosidad —Hay una manera de que nos encuentren—.

Entonces les conté mi plan a Irimi y a Ace —... y de paso, conseguiríamos información de Kurohige—Ambos se miraron y luego asintieron —Bien, es alocado y arriesgado, pero hay que hacerlo—Me dijo Irimi.

Ace simplemente me dio un beso en la frente y me dijo —Espero que vuelvas a verlos, quiero conocerlos y saber más de tus épocas como trabajadora de una cafetería en Tokio... me encantaría saber cómo te ves con uniforme—Lo último me lo susurró coqueto.

Yo sonreí por su comentario y por las esperanzas y miré de nuevo esa foto de Eto atacando con su forma de Búho de un ojo pensando sólo una cosa "Espero que estén aquí".

Unos días después nos detuvimos en una isla vigilada de cerca por la marina a propósito, bajamos y Ace se fue a buscar información mientras Irimi y yo buscamos a los marines y al comandante Smoker, ambas llevábamos nuestros viejos trajes y las máscaras puestas, la intención era clara para nosotras.

—Hoy finalmente volverás a aparecer en las noticias, sempai~—Le dije con cierta burla y ella se rió por lo bajo, aunque no podía ver si sonreía debido a la máscara —Nunca pensé que volvería a estar en las noticias—Me dijo burlándose.

Ambas nos detuvimos cuando Smoker se paró frente a nosotras, ya llevaba un rato siguiéndonos, pero lo ignoramos a propósito —Un-ojo y... ¿Quién eres tú? ¿Otra pirata?—Dijo mirando a Irimi con el ceño fruncido y a punto de sacar su arma.

Irimi sacó su kagune y le dijo —Sí... soy el Perro Negro, marine, un miembro de la Segunda División de los Piratas de Shirohige y te pido por favor que no intervengas, estamos buscando a alguien y no podemos perder el tiempo contigo—.

Smoker, obviamente, no hizo caso a lo que le pidió Irimi, pero eso no hizo más que seguir el plan, porque sabíamos que atacaría con tal de capturarnos y llevarnos ante la "justicia".

Hicimos un verdadero escándalo al enfrentarnos a él, lo suficientemente grande como para que apareciera en los periódicos del mundo y se repartiera la noticia, además de que usamos nuestros kagunes, máscaras y trajes para esto, no había forma de que se confundieran si estaban aquí.

El escándalo que armamos salió en primera plana al día siguiente, un titular llamado: "La-de-un-ojo y el Perro Negro causan desastre en la isla x" y al poco tiempo de eso, recibimos una respuesta de parte de Eto, pues había atacado una central marine y había dejado escrito en sangre: "Aquí estoy" en uno de los muros, que fue lo que más llamó la atención del mundo.

Nosotras no sabíamos si confiar en ella era buena idea o no, pero igualmente nos alegramos de que supiera que no estaba sola.

Sólo un día después se escucharon rumores de que Kurohige había sido atacado por un enorme monstruo con brazos largos y afilados como espadas que iba acompañado por un pequeño demonio gris peludo con cara roja.

Eso nos dio esperanzas y alegrías, tanta alegría que no pudimos dejar de llorar por veinte minutos ¡Estaban aquí! ¡Realmente estaban aquí! ¡No podía creerlo!

Ace me abrazaba para calmarme, pero yo no podía dejar de llorar por la alegría del momento y de la noticia —Están aquí ¡Realmente son ellos! ¡No puedo creerlo!—Dije entre lágrimas y sonriendo como una idiota.

Irimi y yo sonreímos y luego miré a Ace y le planté un beso en los labios por la emoción, eso lo tomó por sorpresa —Lamento preocuparte pero... ¡Es que no puedo creérmelo! ¡Están aquí, Ace! ¡Están aquí realmente!—Le dije entre lágrimas de alegría.

Después de unos minutos mis ojos se llenaron de lágrimas de nuevo, pero no podíamos olvidar qué estábamos buscando —Bien, suficientes lágrimas... ahora que sabemos que están aquí, debemos seguir con nuestra búsqueda—Dije.

—Espero que logremos encontrarlos de camino allá—Dijo Irimi, a lo que yo asentí mientras nos dirigimos a otra isla para cazar a Kurohige, ahora con esperanzas y energías renovadas.