Capítulo XXI: Karaoke

36 13 61
                                    


Me encontraba recostada sobre el sofá de nuestro apartamento mientras Renata hablaba sobre su día en el trabajo, donde había tenido que lidiar con dos modelos egocéntricas que se pelearon por quien caminaría por la pasarela en primer lugar, a golpes. Comencé a reír de la anécdota mientras ella me observaba como si quisiera matarme.

—Oye no me mires así, es divertido una pelea de divas, admítelo —expresé riendo.

—Si, fue divertido en realidad —comenzó a reír también—. ¡Hubieras visto la cara de una de ellas cuando la otra le arranco las extensiones de cabello!

Estallé en carcajas, hubiese dado lo que sea por ver ese épico momento...

No lograba para de reír, incluso lloraba para ese momento. Hasta que mi móvil sonó anunciando una nueva llamada, lo tomé observando el nombre de "sexi corredor" y atendí.

—Hola preciosa, ¿estás libre? — preguntó Jerónimo. 

—Hola guapo —sonreí mientras Renata me observaba—. En este momento me encuentro con Renata, ¿por qué preguntas?

—Excelente, es noche de karaoke, ¿se unen?

—¿Karaoke? —arrugué mi entrecejo—. No sabía que había un karaoke aquí.

Si me hubiese enterado de su existencia, ya estaría instalada allí, siempre me habían gustado los karaokes.

—Es nuevo el lugar.

—Un momento, preguntaré a Renata —alejé el móvil un  momento para hablar con mi amiga.
 
—Rena, Jerónimo acaba de invitarme a una noche de karaoke, ¿te apetece ir?

—¿Karaoke? —cuestionó—. Claro, me encantaría —respondió alegre.

—De acuerdo —sonreí y volví a hablar con Jerónimo—, iremos.

—Excelente, paso por un ustedes en una hora.

—Claro, te veo pronto.

—Besos preciosa.

Colgó la llamada y sonreí a Renata. 

—Bien hoy conocerás a Jerónimo amiga.

—¡Fantastico! —se puso de pie—. Podré avisarle lo que le sucederá a sus bolas si te lastima.

—Estás loca, ve a arreglarte que vendrá por nosotras en una hora —expresé.

Abrió los ojos de una manera muy exagerada al oír mis palabras.

—¡Pero, eso es poco tiempo! —vociferó.

—Yo sé que puedes hacerlo —la tomé de sus hombros y comencé a empujarla hacia su habitación —. Anda date prisa.

❀❀❀

Había pasado una hora exactamente desde la llamada de Jerónimo, estaba a punto de ir por Renata cuando ella salió a toda prisa de su habitación, ya preparada. Realmente era un logro para ella haberlo hecho en poco tiempo.
 
—¿Pretendes matar a alguien así? —expresé observando su vestimenta. 

Llevaba un leggins de cuero negro que marcaba su figura acompañado de un top con transparencia blanco que no dejaba mucho para la imaginación, junto a un abrigo negro y para finalizar su look, llevaba unos zapatos de tacón extremadamente altos.

Si, se veía sexi, tanto que si jugara para el equipo de mujeres podría lanzarme sobre ella.
 
—Claro que no, ¿ me veo bien? — expresó dando un giro en su lugar. 

—Excelente, super sexi —respondí con una sonrisa en mi rostro—. Bien, Jerónimo está esperando abajo.

—De acuerdo, vamos —expresó tomando su bolso— . Por cierto... ¿tu también pretendes matar a alguien?

Una parte de Mi (Libro 1)Where stories live. Discover now