23

426 63 0
                                    

— Hmn, solo falta un pequeño detalle— Dijo Lisa admirando la hermosa creación que habia hecho con su novia.

—  Ah, tienes razón— Rosé se quitó su bufanda. Era una bufanda roja que le había prestado Lisa.— Le falta una bufanda— Dijo colocándosela al muñeco de nieve.

— Yo me referia a la nariz pero es un hermoso toque, Rosie.

Lisa río con ternura al ver al muñeco de nieve con una hermosa bufanda roja.

— Ya vengo— Lisa entró a la casa y buscó una zanahoria.

Luego volvió corriendo, por suerte habían hecho al muñeco de nieve justo frente a la casa y no mucho más lejos.

— Y...— Lisa le puso la nariz de zanahoria.— ¡Listo! Ahora es un
perfecto muñeco de nieve.

— Tiene una sonrisa muy linda— Elogió Rosé.— Deberíamos llamarle Lisa.

La pelirosa sonrió con ternura. Su novia era demasiado dulce.

— Pero está hecho de hermosa nieve... Deberíamos llamarle Rosé— Propuso Lisa.

— No tiene cara de Rosé— Dijo la Rosé original negando con la cabeza.

— Entonces Chaeyounnie.

— Está bien— Aceptó riendo.— Chaeyounnie le queda bien.

— Tú también tienes cara de Chaeyounnie— Dijo Lisa mientras apretaba una de las mejillas de su novia.

Rosé rio con ternura. Su novia.era demasiado tierna.

— Está comenzando a oscurecer... Deberíamos volver adentro— Sugirió Rosé al ver que el atardecer ya estaba por terminar.

— Te propongo algo mejor Chaeyounnie..¡Podríamos ir a ver lucecitas navideñas!— Exclamó sonriendo.— Nunca hemos ido a ver decoraciones... Seria muy lindo.

— Me agrada la idea— Rosé le dio un pequeño beso.— ¿Pero me prestas otra bufanda antes de ir? Ese muñeco de nieve se robó la que tenia.

— Está bien— Respondió Lisa riendo.— Todas mis bufandas también son tus bufandas.

Entraron a la casa por otra bufanda y cuando salieron el cielo estaba completamente oscuro. Perfecto para ver decoraciones navideñas. Todas las calles de la cuadra tenían lucecitas, se veía precioso.

Rosé y Lisa caminaron de la mano hasta el parque, donde habían muchas otras decoraciones. Ambas miraban alrededor con ojos llenos de fascinación. Las luces navideñas resplandecían de una forma mágica. Era como si estuvieran rodeadas de polvo de hadas. Era como si las estrellas hubieran bajado del cielo. Era como si cada bombillito fuera una luciérnaga danzante. Era más que hermoso. Mucho más.

— Chaeyounnie— Dijo Lisa casi como un susurro. Su novia la miró al instante.— Tus ojos brillan como las luces alrededor.

— Es porque estoy a tu lado Lili— Explicó con ternura.

Ambas se besaron entre el campo mágico de luciérnagas y
estrellas. Eran una pareja de novias demasiado dulce.




¡Gracias por leer!

La nieve ☃❆ Chaelisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora