HENKO [Tk/Vk] [EDITANDO]

XVII

– ¿Jungkook?     

El nombrado levantó el rostro y sonrió al ver a Taehyung de pie a un lado suyo.

– ¿Cómo entraste? Solo dejan entrar a estudiantes – dijo sin dejar de sonreír.

Había extrañado a Taehyung. No entendía a que se debía el cambio repentino de su actitud hacia él ni el porqué de repente manejaba una moto y vestía con ropa oscura pero no podía estar más feliz.

Este vez el podía esperar y sabía que Taehyung lo buscaría. No tendría que rogar por su atención.

Estaba feliz.

– Bueno, me colé – dijo con gracia, tomando asiento en la banca frente a la de Jungkook – ¿Tienes otra clase?

Jungkook asintió.

– Necesito que hagas algo cuando estés en tu casa.

– No he podido ir a nuestra casa – murmuró Jeon – ni la de mis padres.

– ¿Nuestra casa? – preguntó Taehyung, viendo a Jungkook asentir – aveces actúas extraño.

– ¿Extraño?

– Mmh – Taehyung asintió – nuestra casa, de que estas en cinta, me conoces y así... Me resulta extraño.

– Te conozco porque estamos casados – Jungkook tomó la mano de Taehyung y sonrió – tenemos un hijo.

– Oh, wow, amigo – Taehyung sacó su mano de entre las de Jungkook y rio con nerviosismo – ¿Qué cosas dices? Suena turbio.

– Pero es en serio.

– No recuerdo haberme casado con nadie – aseguró Kim – y estoy seguro de que no podrías tener hijos, eres hombre, así que no tienes utero.

– ¿Perdiste la memoria? Aunque estas raro, ya no hueles a peonias.

– Uh – Taehyung se olio y volteó a ver a Jungkook – mi perfume no huele a eso, huele a... Perfume.

Jungkook se rio.

– ¿Por qué bromeas así? ¿Mis papás te prohibieron verme? Me dijeron que en cuanto obtuvieran el dinero ya no iban a molestarte... Solo tiene que nacer mi bebé y seremos libres.

– Espera un segundo – Taehyung levantó ambas manos en el aire – ahora estoy cuestionandome mi existencia por tu culpa.

– ¿Ya no has visto a Seokjin? No hueles a él.

– ¿Seokjin? – preguntó Taehyung – ¿Quién es Seokjin?

Los ojos de Jungkook se iluminaron.

– Nadie – sonrió.

– Jungkook – Taehyung tomó una de las manos del nombrado y le miró – ¿Puedo decirte algo y prometes creerme?

Jungkook asintió.

– Creo que desde la última vez que te golpearon has tenido una idea errorea. No quiero llenarte con ilusiones vacías pero yo no estoy casado contigo y tampoco estas en cinta, no nos conocemos de antes, el hombre con el que vives es tu padre y yo jamás he tenido un olor a peonias.