DOS

8K 621 207
                                    

2

Oops! Questa immagine non segue le nostre linee guida sui contenuti. Per continuare la pubblicazione, provare a rimuoverlo o caricare un altro.

2. Ethan. 

Bajé las escaleras de dos en dos, en busca de algo de desayunar. El día de hoy estaba soleado, despejado, indicando que sería una bonita mañana, tarde y noche. Me fui felizmente hacia el comedor de nuestra casa, uno que ya estaba ocupado por mis dos hermanos.

Mi madre tarareaba una canción en la cocina con su cabello rubio recogido, mientras que no había señales de mi padre por ninguna esquina.

Supongo que por eso había paz.

Me adentré a la estancia, con una sonrisa de alegría en mis labios. Algo que se borró cuando fui consciente de que mis hermanos no estaban divirtiéndose, sino todo lo contrario a eso.

—¿No sabes que vaca es con v? ¿Es enserio?

—¡Fue un descuido! De todas formas, ya te gané.

—¿Estás loco? Yo nunca pierdo. Y tú eres un bobo.

—Acepta que perdiste, Jonas, de eso se trata.

—¡Que no! —se enfureció

Me adentré, acercándome.

Cuando ellos fueron conscientes de mi presencia entonces detuvieron su jueguito. Me incliné ligeramente hacia la mesa donde encontré que cada uno tenía una hoja e iban tachando las palabras que escogieron.

—Uh, yo quiero —tomé asiento, sacando una hoja del centro

—Tu no juegas —renegó el pequeño

—¿Qué? ¿Por qué?

—Porque siempre ganas —me respondió el rubio, negando

Eso me hizo reír

—A ver, no es mi culpa que tú Mike no tengas ortografía, y que tú Jonas no sepas escribir rápido.

—¡Claro que escribo rápido! —se alteró—. Deben tener consideración conmigo, voy en segundo primaria, ¿cómo quieren que sea el mejor? Les estoy dando ventaja.

Lis istiy dindi vintiji —imitó él

Jonas le dio un golpe en la cabeza

—Ahora si confirmo que tienes cinco años.

—¿Y tú cuántos tienes, enano?

—Tengo siete —le gruñó con enfado—. Y podré ser un enano, pero mi coeficiente intelectual te dejaría en pañales.

—A mí no me interesa tu coefitience intelectual —bufó—. Ni siquiera sé qué significa.

Él lo miró seriamente

—Tarado.

Se miraron el uno al otro por unos cuantos segundos, como si estuvieran teniendo una lucha que mi hermanito menor terminó ganando. Mike se lanzó a él y tomó su hoja, arrugándola en un puño.

Invierno de coloresDove le storie prendono vita. Scoprilo ora