Capítulo 9

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Los ojos verdes de Alyssa están fijos en el ojo bueno de Aemond y, por unos largos segundos, todo parece desaparecer a su alrededor.

Eso hasta que su expresión de desconcierto da paso a una de mueca de dolor y Aemond baja su mirada hacia su vientre.

Alyssa imita su acción y es ahí cuando se percata del cuchillo. ¿Por qué están sus manos alrededor del cuchillo? ¿Por qué hay un cuchillo en el vientre de Aemond?

Los recuerdos vuelven de golpe.

Luke.

Lucerys está muerto.

Alyssa remueve el arma del vientre de Aemond y observa la hoja manchada de sangre antes de soltarla y escuchar como resuena el metal en el suelo.

Repentinamente el caos se desata.

Aemond suelta un grito ahogado mientras retrocede tambaleante con sus manos intentando cubrir la herida.

Alguien grita. Una mujer. Pero ella no tiene tiempo de saber quién es porque la reina madre la empuja con fuerza haciéndola caer en su intento de llegar hacia su hijo. La expresión de Alicent es una de completo terror mientras sostiene al príncipe herido.

"Aemond, resiste" la reina desesperada voltea hacia el maestre, quien se apresura a acercarse hacia ellos.

Alyssa intenta ponerse de pie, pero siente de pronto un agudo dolor en la cabeza cuando Aegon la toma de los cabellos y la fuerza a erguirse, "Perra traicionera" sisea con furia el falso rey, "Te haré pagar caro lo que acabas de hacer" asegura mientras su mano libre se cierra alrededor de su garganta.

"¡Aegon! ¡Suéltala!"

Las palabras son pronunciadas por un debilitado Aemond, quien intenta zafarse del agarre de su madre e intenta caminar hacia donde Alyssa sigue siendo sometida por su hermano mayor, "Aegon, te lo advier..." él consigue dar unos pasos en dirección de su princesa, pero las fuerzas lo empiezan a abandonar y no logra terminar lo que iba a decir ni avanzar más.

"Guardias, rápido, lleven al príncipe a su habitación", ordena Alicent, "¿Helaena?"

Alyssa observa a los guardias llevarse a Aemond y su estómago se hunde en su interior.

Por un breve instante la desesperación por seguirlo y asegurarse de que esté bien se apodera de ella, pero no hay mucho que pueda hacer. Principalmente porque Aegon sigue apretando su cuello mientras desfoga su ira contra su sobrina.

Él no merece tu preocupación, susurra esa voz en su cabeza. La parte racional de su cerebro se hace escuchar y Alyssa concentra sus esfuerzos en intentar respirar y golpear a Aegon sin demasiado éxito.

"¡Suéltala inmediatamente!" Otto Hightower interviene con voz cargada de autoridad, "¿Has perdido la cabeza?"

Aegon retira la mano de su cuello y Alyssa aspira una larga bocanada de aire antes de empezar a toser.

"¿Has olvidado quién es ella?" escucha decir a Otto antes de que un molesto zumbido inunde sus oídos.

Los dos parecen intercambiar unas palabras más antes de que Aegon la empuje contra uno de los guardias y salga de la sala del trono.

Alyssa todavía está intentando respirar con normalidad cuando el guardia la toma del codo y la obliga a caminar. La princesa quiere resistirse, pero las fuerzas parecen haberla abandonado, así que simplemente camina junto al hombre por pasillos de la Fortaleza que no reconoce.

No es si no hasta que el aire se vuelve más viciado que se da cuenta que la luz también parece haber disminuido. Alyssa se vuelve más conciente de su alrededor y se percata que están en los calabozos. Ella intenta reconocer a algunas de las personas que se encuentran aprisionadas pero la luz es tan tenue que no consigue distinguir sus rasgos. El guardia le da una orden al carcelero y el hombre los guía hacia una de las pocas celdas vacías, abriéndola para permitir que arroje dentro a la chica.

Deseo y Pecado [COMPLETA]Where stories live. Discover now