Capítulo 24

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"Tengo que ir a verlo"

Alyssa quita las cobijas que la cubren y se mueve hasta el filo de la cama. Una punzada de dolor, repentina y fugaz, la hace detenerse un instante.

"Necesita descansar," Alys se ha puesto de pie y coloca su mano suavemente contra su hombro intentando empujarla de nuevo hacia la cama, "Perdió mucha sangre y está muy débil"

"Aemond ha estado inconsciente por semanas, Alys, debo ir a verlo. Lo más probable es que se esté sintiendo desorientado y seguro me está buscando," la joven se sacude la mano de Alys, "Además, ¿qué sentido tiene que descanse? No revertirá ni empeorará mi situación"

"Es demasiado dura consigo misma, princesa"

Soy demasiado tonta, eso sí, piensa con amargura mientras se pone de pie. Todo esto es su culpa. Había estado tomando ese maldito té sin siquiera prestar atención a las señales de su cuerpo, ¿Cómo es que no se había planteado antes que sus malestares empezaron con esa bebida? Su buena voluntad para con la madre de Aemond y su intento por mantener una apariencia de paz solo habían conseguido enfermarla. Y arrancar de raíz sus posibilidades de ser madre.

"Ven conmigo, quiero que examines al príncipe," le dice a la mujer una vez que está vestida, "¿Dónde está mi hermano?" pregunta volviéndose hacia la criada

"En las cocinas junto a su niñera." Cuando nota la expresión confundida de Alyssa, añade, "La cocinera preparó tartas de durazno"

"Ah," ella suspira, "Que la niñera lo mantenga entretenido por un rato, hablaré luego con él"

La criada hace una reverencia antes de salir. Alys le ofrece a Alyssa el brazo para que caminen juntas en dirección a la habitación de Aemond.

"Confío en que cuento con tu discreción sobre lo que acaba de suceder"

"Sabe que sí"

Alyssa asiente, "Gracias, Alys"

"¿Piensa contárselo en algún momento?" pregunta cuando están frente a la puerta de la habitación del príncipe.

"Hoy no," responde, "Pronto, tal vez"

Alyssa empuja la puerta y sus ojos van inmediatamente hacia la cama.

"Ahí estás" Aemond se encuentra semi recostado contra el cabezal del lecho, seguramente las criadas lo han ayudado a acomodar un par de almohadas tras él. Su voz suena ronca y las ojeras bajo sus ojos son notables, pero una sonrisa se forma en sus labios.

"¡Aemond!" a pesar de su dolor casi corre hacia su cama, sentándose en el filo mientras toma sus manos "¿Cómo te sientes? ¿Te duele algo? ¿Puedes respirar bien?"

Su sonrisa de lado se amplia y toma las manos de Alyssa, llevándolas a sus labios, "Extrañamente, no tengo demasiado dolor"

"Eso es porque estuvo dormido durante lo peor," dice Alys acercándose a la cama también y empezando a examinarlo, "No tiene fiebre y sus costillas han sanado apropiadamente"

Alyssa suelta un profundo suspiro y su cuerpo parece liberarse de un enorme peso. Aemond luce bien. Cansado, débil, pero bien.

"¿Cuánto tiempo ha pasado? ¿Dónde está Vhagar?"

"Has dormido por casi tres semanas," responde la chica, "Y Vhagar está protegida. Seguramente sanando"

"¿Protegida?" su ojo azul cielo la mira con suspicacia

"Muchas cosas han pasado mientras te recuperabas," Alyssa cierra los ojos brevemente ante una nueva punzada de dolor, "Mucho ha cambiado en el reino, pero no importa ahora," se apresura a decir antes de que él la interrumpa, "Debes descansar y fortalecerte"

Deseo y Pecado [COMPLETA]Where stories live. Discover now