Solo un juego más - VHOPE {terminado}

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Estuvieron un total de dos horas en el despacho del director del campus. El Sr. Kang era un hombre de edad quien evitaba a toda costa los escándalos que pudieran costarle el prestigio de su rectoría. Si bien Hoseok había querido mantenerse para sí el acoso sexual por parte de Eunwoo, no tuvo más alternativa que contarlo todo con tal de favorecer la situación de Tae;  amenazó con hacer público el abuso que había vivido en medio del campus a vista y paciencia de los estudiantes de la institución, para así evitar la posible expulsión del menor.

Luego de unos llamados telefónicos, interrogatorios y tomas de testimonio, el director Kang acordó que mantendrían la situación en privado a pesar de los alegatos y amenazas de los padres de Eunwoo, quienes no tuvieron más alternativa que callarse ante la acusación que Hoseok y Jimin hicieron de su hijo.

Minho por su parte había terminado solamente con la nariz quebrada, negó levantar algún cargo contra Taehyung y para salvar su trasero, y no perder la capitanía del equipo, le echó culpa de todo a Eunwoo alegando completa y total inocencia. 

Pero Kang les dio una noticia que ambos se negaron a creer. Algo debía hacerse con la agresión de Taehyung —les dijo— y ese algo cayó donde más le dolía: su expulsión del equipo de rugby y posterior incapacidad de unirse a cualquier equipo/club dentro de la institución.

—Fácilmente podrían haber levantado cargos penales Taehyung, dejaste al tipo inconsciente, lo golpeaste enfrente de toda la universidad y amenazaste con matarlo... —Jimin soltó un sonoro suspiro.

—Por favor, solo quiero irme a casa a dormir y no ver a nadie—le pidió — no quiero hablar más de esto ¿de acuerdo?

Se puso de pie para retirarse cuando sus ojos irremediablemente conectaron con los del chico que había desencadenado todo eso. Taehyung había estado cabizbajo evitando a toda costa quedarse a solas con Hoseok porque sentía una opresión extraña en el pecho cada vez que cruzaban miradas.

—Vamos, te llevo a casa — Jungkook palmeó suavemente su omóplato infundiéndole tranquilidad.

Siguieron días oscuros para Taehyung. Sus padres le obligaron a ir con el psiquiatra de la familia y solicitar fármacos, esto bajo la amenaza  de dejar de pagar sus estudios si no lo hacía. La pareja no concebía la reacción de su hijo e hicieron caso omiso cuando este alegó que solo defendía a un amigo.

—Eres un adulto Taehyung —gritoneó el Sr. Kim en su despacho — además eres un Kim, jamás en toda la historia de esta familia alguien había ensuciado nuestro apellido de esta forma.

Su padre era un hombre conservador quien manejaba los negocios de su firma con mucha diligencia haciendo todo lo que estaba a su alcance por mantener la integridad de su legado e influencia financiera.

—Papá, yo sólo-

—Basta, no tengo paciencia con esto. Tu madre se encargará de ti a partir de ahora — se puso de pie y le abrió la puerta del despacho — ahora, vete que tengo mucho trabajo atrasado por tu culpa.

 Taehyung apretó los puños y salió sin decir una sola palabra. Su madre lo esperaba en el jardín junto a Yeontan, la mujer de 50 años era la típica dueña de casa que ocupaba su tiempo libre en fiestas de té y reuniones sociales.

—Tu padre está muy decepcionado de ti, espero que lo sepas —zanjó la mujer en cuanto lo oyó acercarse — Ya todas mis amigas saben del espectáculo que montaste, por dios. Deberías agradecer que te costeamos la totalidad de esa insulsa cerrara que escogiste.

—Lo siento.

—Y las cosas que dice la gente Taehyung — una mueca de desprecio cruzó su rostro — es desconcertante.