YOU BELONG WITH ME | BILLY HARGROVE

001

J | JAMES BYERS.

| OCTUBRE 1984.
Hawkins Indiana.

Mi vida no era perfecta, pero tampoco la odiaba. Amaba pasar el tiempo con mis hermanos y mamá, prefería estar en casa con ellos antes que salir de fiesta. Prefería usar Jeans y suéter con capucha antes que usar Vestidos. Si los usaba, pero no esos vestidos extravagantes y costosos cómo los que usaban las demás chicas de el pueblo. No es que odiará mi físico, de hecho tenía una buena autoestima, pero... era cómodo vestir así.

El año pasado (1983) viví la peor experiencia de mi vida... por un momento creí que perdería a mi pequeño hermano Will. Mi mellizo Jonathan y yo nos distanciamos a causa de la depresión que eso nos ocasionó, pero ahora estamos mucho mejor.

Soy la melliza rara de el chico raro de la preparatoria Hawkins. "La Virgen James" No hay día que no me repitan eso cuando me ven. No los odio, no soy de las personas que odia. Al final de todo, no saben realmente quién o cómo soy.

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—¡Jimmy, hora de desayunar!-grito mi pequeño hermano, Will.

—¡Ya voy!-me pare de la cama y caminé hacia la cocina.—Buenos días.-Salude a mi madre dándole un beso en la mejilla.

—¿Que tal dormiste, cielo?-pregunto.

—Bien, termine a tiempo mis trabajos.-me serví un vaso de zumo de naranja.—Hablando de trabajo, conseguí un pequeño trabajo en un Seven-Eleven.-me senté en la silla del comedor.

—Jimmy, que te he dicho.-mi madre me miró con cierto enojo.

—Mamá, quiero ayudarte.

—Me ayudas si te va bien en tus clases.

—¿Ya podrás darme dinero para el Arcade?-pregunto Will.

—No, tonto.-Sacudí su cabello.

—¿Quien te llevará a el trabajo?-pregunto mi Mellizo, Jonathan.

—Uhm, iré en bicicleta.-Le di un sorbo a mi jugo.—Está a unas cuadras de aquí.

—No me parece, James.-Dijo mi madre con tono preocupado.

—"Jimmy".-le corregí.—Estaré bien.-Le reste importancia a su preocupación.-Lo prometo.-Tomé una manzana y la lleve a mi habitación y después salí hacia el baño.

—¡El desayuno, James!-grito mi madre al ver que solo bebí el zumo de naranja.

—¡Se me hará tarde!-grite desde el baño.

Abrí el agua caliente, y un poco la fría. Me quite la ropa y la lancé a el canasto de ropa sucia. Me duché, tardando aproximadamente de nueve a diez minutos. Una vez lista, salí de la tina, tomé una toalla limpia y cubrí mi cuerpo con ella. Con otra seque mi cabello y lo cepille antes de que se secara.

—¡Jimmy, te dejare si no te apresuras!-grito Jonathan desde el otro lado de la puerta.

—¡Ya voy!-me apresure a lavarme los dientes.

Salí hasta mi habitación y busqué para ponerme unos Jeans celestes, una blusa de tirantes blanca y encima un cárdigan café. Busque mis tenis blancos pero no los encontré así que me puse unos botines negros.

—¡Jimmy, cielo!-mi madre tocó la puerta de mi habitación.—Llevaré a tu hermano a la escuela, de ahí me iré a el trabajo.-dijo desde el otro lado de la puerta.