Detrás de tu Sombra Severus Snape y Melpomene Black

Capítulo 49 Prince Manor

Narrador omnisciente

Después de un agradable viaje por fin estaban frente al que sería su nuevo hogar.
Alejado de los muggles, una casa lo suficientemente grande como para llamarla mansión. Tenía un amplio jardín y la extensión de sus terrenos era como un pequeño bosque.
Debido al tiempo que pasó deshabitada tanto el jardín como el pequeño bosque vivían unas decenas de criaturas mágicas.

Ambos estaban emocionados viendo a través de las altas rejas de hierro, la hermosa casa de muros completamente blancos.

Severus abrió la puerta entrando a la par de Mel, con las maletas de ambos flotando de trás.

- Bienvenida a tu... A nuestro nuevo hogar- se corrigió mientras la abrazaba por la cintura.

- Es una casa muy hermosa Severus, espero poder ver pronto a tu madre para agradecerle apropiadamente.

- No creo que sea necesario tanta formalidad, y ten por seguro que yo ya le he agradecido por ambos.

- Estoy segura de que lo has hecho, se que ella se encuentra viajando pero en verdad me gustaría conocerla. Estará en nuestra boda verdad?

- Claro que estará ahí, aunque primero deberíamos decidir la fecha. Ya has pensado cuando?

- Han pasado tantas cosas que ni siquiera he pensado en una fecha, en cualquier otra situación haría la boda después de graduarme, sin embargo a sabiendas de todo lo que viene me gustaría casarnos el próximo año, que opinas?

- Si es lo que quieres yo estoy de acuerdo, tenemos todo el verano para planearlo.

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Ambos habían desempacando en sus respectivas habitaciones.
Después pasaron en el tiempo juntos, acomodando la casa, aunque Mel aún no pudiera usar sus manos ayudaba a Severus en lo que pudiera.

Era extraño para ella no tener un elfo doméstico a su disposición pero tampoco era una tragedia, podría acostumbrarse aunque deseaba que el regalo de bodas de los Malfoy fuera una de esas serviciales criaturas.

Iba a ser agotador limpiar la casa entera incluso con magia, irónicamente se sentía feliz de hacer todo eso con Severus.

Cenaron juntos después de arreglar un poco la casa, Severus había cocinado sorprendiendo a Mel.

- No tenía idea de que fueras exelente cocinando.

- Para tí lo que sea preciosa.

Mel se sentía en un sueño, en una historia de romance del cual no quería que terminara nunca.
Después de cenar fueron al salón a leer como acostumbraban hacer en la sala común.

- Tus manos estarán bien mañana, tendrás cicatrices pero trataré que no sean permanentes.

- Gracias Severus, has sido verdaderamente atento conmigo y mis manos.

- No me agradezcas, me esfuerzo por qué estés bien. - le beso la frente con dulzura.

Al día siguiente Mel podía al fin mover y usar sus manos, se levantó temprano para prepararse una taza de té y aprovecho para preparar la de Severus también.
Le daba satisfacción hacer ella misma las cosas en lugar de esperar ser atendida todo el tiempo por elfos.

Severus aún seguía durmiendo seguramente estaba exhausto por todo lo que había hecho ayer.
Mel cepilló su cabello y salió al terreno boscoso a leer un rato.
El clima era fresco y nublado, sentada al pie de un árbol escuchó pisadas de alguna criatura pero no lograba ver nada entre los árboles y la neblina, hasta que vió en el suelo como pequeñas ramitas parecían romperse solas como si algo invisible las estuviera aplastando.
De inmediato supo de que criatura podía tratarse.
Se acercó con cautela muy despacio, no porque fuera una criatura peligrosa si no porque era muy fácil ahuyentarlos.

Alzó la mano en espera de que la criatura se acercará para poderla tocar, no cabía en el asombro al sentir una piel muy delgada y carente de pelo sobre un cuerpo casi esquelético.
"Un Thestral" exclamó eufórica, era la primera vez que estaba tan cerca de uno, sabía que en Hogwarts había pero nunca tuvo la suerte de encontrarse con uno.

Le encantaba haber encontrado una criatura tan hermosa y justo donde iba a ser el futuro hogar de ella y el hombre que ama.
Regreso adentro para ver si Severus aún seguía durmiendo y tal vez aprovechar para hacer el desayuno.

Y así fue comenzó a preparar panqueques y fruta picada, esperando que fuese del agrado de él.

Severus estaba fatigado, un aroma apetitoso fue lo que hizo que despertara, no lucía nada bien, tenía prominentes ojeras y la piel ligeramente acartonada.
Se miró al espejo notando su mal aspecto.
"Quizá fue demasiado" se dijo a si mismo.
Se dió una ducha rápida y tomo un par de pociones para verse mejor y mantenerse con energía.

Siguió aquel delicioso aroma encontrándose con un desayuno listo y su prometida radiante .

- Severus buenos días! Espero hayas descansado bien. - lo abrazó y dejo un beso en su mejilla - espero te guste

- Cassi! Esto se ve delicioso y por supuesto que descanse de maravilla.

Mel espero a que terminarán de desayunar para contarle que, en sus terrenos vivían una pequeña familia de Thestrals, Severus no parecía muy sorprendido pues le contó que los Prince tenían a esa criatura como sello y escudo oficial de la familia.

Nuevamente se encontraban en el salón, Severus leía y firmaba algunos documentos mientras Mel escribía y corregía anotaciones de sus tareas de verano.
Él sonrió con ternura al verla así, eran aún muy jóvenes para casarse pensó.

El sonido de una campana saco a ambos de sus pensamientos, al parecer tendrían su primera visita.
Regulus junto a kreacher pasaron a la gran casa.
Abrazo a Mel en cuanto la vió, a Severus solo un apretón de manos.

Fui una visita agradable para ambos, platicaron amenamente.
Regulus le llevaba una maleta con un poco más de cosas, ropa, accesorios, libros y cassettes que mantenía escondidos de su madre .

- creí que preferirías tenerlos aquí.

- Eres el mejor hermano gracias, moría de ganas por escucharlos.

- y... Cuando será la boda?

- Regi! Aún no ponemos fecha

- Pensamos que es muy pronto aún, pero tentativamente sería a finales del próximo año.

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"Finales del próximo año" ( pensaba la chica Black cada que tenía oportunidad)

Llevaba todo el verano planeando los detalles de su boda, Regulus y Narcisa la visitaban de vez en cuando para ayudarla.

Severus participaba poco en la planeación pensaban que debido al trabajo que ahora tenía con los mortífagos le sería difícil relajarse para pensar en los preparativos.
Aún faltando un año para dicho evento trataban de que todo quedará listo desde antes pues el tiempo siempre va más rápido de lo que se aparenta.

Mel tenía poco tiempo libre para afinar su libro así que decidió pausar su proyecto hasta que regresará a clases.

Fue en general un verano único, Severus parecía realmente enamorado y Mel nunca se había visto tan feliz.