Extra 1

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—Hola Sophie ¿Estás bien? —saludó Ricardo un poco nervioso.

—Hola Ricky. ¿Qué quieres?

—Verás. Es que, bueno... —tartamudeó.

—Sé directo, no tengo todo el tiempo del mundo —habló con dureza.

—Es que me gustas —confesó Ricardo rápidamente. 

—¿Y qué quieres? —preguntó alzando una ceja.

—Pues decirte cómo me sentía —sacudió un poco sus manos sudadas.

—Dime algo que no sepa Ricardo. Ya eso lo sabía —confesó.

—Si lo sabías, ¿por qué no me habías dicho nada? —alzó un poco la voz.

—¿Qué te iba a decir? De todas maneras tú a mí no me gustas —respondió Sophie fríamente.

—¿Y me lo dices así sin compasión? —preguntó con tristeza?

—Sí.

—¿Te gusta otro chico verdad? —esta vez Ricardo hizo una pregunta retórica.

—Sí. Me gusta Bastian. —Confesó Sophie.

—Y por eso no te puedes fijar en mí —afirmó.

—No seas tonto Ricardo, aunque Bastian no existiera, no me fijaría en ti.

—¿Sabes Sophie? Eres muy mala.

—Lo sé. Las chicas con dinero, poder y lindas como yo, tenemos el derecho de ser malas. —Respondió con obviedad.

—No sé por qué eres así Sophie.

—Porque puedo serlo —su voz seguía sonando más gélida que un témpano de hielo.

  En ese justo momento le entró una notificación a Sophie en su teléfono. Ella deslizó su dedo por la pantalla y abrió sus ojos asombrada pero esbozando una sonrisa malévola.

—¿Qué es? —preguntó Ricardo al ver su expresión.

—¿Qué te importa? —Sophie dirigió su mirada hacia Ricardo y lo acribilló.

  El rubio ojiverde se acercó para ver el teléfono de Sophie, pero ella intentando esquivarlo de él descuido el móvil callendo así al suelo.

  Ricardo se agachó para recogerlo y vio la foto que aparecía en la pantalla. Los rostros eran los de Ricardo y Adelyne en la clase de teatro.

—¿Para qué es esto Sophie? —preguntó aún con el teléfono en la mano.

—No es de tu incumbencia —dijo Sophie arrebatando el teléfono de las manos de Ricardo.

—¿Qué logras haciendo esto Sophie?

—Que Bastian sea mío —respondió obvia.

[...]

  A los pocos días Ricardo salió con Adelyne a cenar. Ella le enseñó lo que publicaron en en sitio de la escuela. Ricardo no no tenía idea de que algo así podía existir. Cuando vio la foto que habían puesto en el artículo se di cuenta que era la misma que le habían enviado a Sophie por teléfono.

  Descubrió que la estaba detrás del sitio era Sophie. Desde ese día empezó a investigar cómo era que funcionaba todo lo relaciono con el sitio.

Blanco. El color de mi Mundo. [En Proceso...]Where stories live. Discover now