11.- Penny

28 1 0
                                    

Miraculous, les aventures de Ladybug et Chat Noir y sus personajes son propiedad de Thomas Astruc y Zag Entertainment.

11.- Penny

No iba bien. Durante la reunión de Kitty Section la conversación había fluido bien, incluso se había atrevido a rescatar el antiguo gesto de pasarle un mechón tras la oreja, pero, una vez a solas, la incomodidad había regresado. Necesitaba hablar de eso con alguien, no podía hacerlo de nuevo con Luka porque volvería a decirle que tuviera paciencia, tampoco con sus amigas que divagarían durante horas sobre recuerdos de la infancia, no quería hacerlo con su madre porque sabía que sería incómodo. ¿Con quién podía hacerlo? Sólo una persona acudió a su mente: Penny Rolling.

Durante los dos años que habían estado corriendo arriba y abajo, de escenario en escenario, de plató en plató, Penny se había convertido en un gran apoyo para ella. Se pasaba horas escuchándola hablar de sus inseguridades y problemas, se quedó a su lado cuando la ruptura con Rose le destrozó y sólo podía llorar. Penny había permanecido a su lado cuando más necesitaba a alguien. Por edad, desde el principio, creyó que congeniaría mejor con Vivicia, por eso la sorprendió tanto hacerlo con la mánager de su padre. Cuando su padre y ella habían oficializado su relación no pudo más que alegrarse de que aquella mujer pasase a formar parte de su familia.

Hablaría con Penny. Cerró la puerta de la vivienda y usó el mando a distancia para levar la pasarela al salir. Revisó la nueva dirección de Jagged y Penny en el móvil y tomó el metro. Ahora que eran pareja ambos creían que era mejor no continuar en el hotel para evitar tener a la prensa siempre apostaba en la entrada a la espera de una exclusiva, también porque querían darle un hogar de verdad al bebé.

Salió del metro, recorrió las dos calles que la separaban del edificio y usó su copia de las llaves para entrar en el portal. Subió en el ascensor hasta la tercera planta y tocó el timbre porque no le parecía correcto abrir por sí misma. Penny le abrió la puerta y le sonrió con afecto.

—Juleka. Jagged está en el estudio de grabación.

—He venido a hablar contigo si tienes un poco de tiempo.

—Claro, pasa. Dame un minuto, tengo que hacer una llamada muy urgente —dijo cerrando la puerta—. Estás en tu casa, si quieres tomar algo tú misma, está en tu casa. Vendré en seguida.

Asintió. Debía de estar cancelando parte de la agenda de Jagged, porque no quería separarse de ella en la recta final del embarazo ni los primeros meses de vida del bebé. Sacó una lata de limonada de la nevera y se sentó en el sofá a esperar a que Penny acabase de hablar por teléfono.

—Perdona por la espera, la agenda de Jagged me está volviendo loca.

—No pasa nada.

Penny se sentó a su lado con una infusión humeando en una taza de porcelana negra. Para una adicta al café como ella debía de ser difícil el cambio.

—¿Qué necesitas?

—Consejo —susurró nerviosa a pesar de saber que no la juzgaría—. Sobre Rose.

—Muy bien, te escucho, cariño.

—Nos hemos visto. Cuando volvimos quedé con ella y todo fue... un desastre. Fue muy incómodo, como si fuésemos dos desconocidas. Hemos vuelto a vernos en dos reuniones que hemos hecho de Kitty Section, ahí todo parecía normal, pero al quedarnos solas...

»No sé qué hacer, Penny. Quiero a Rose, pero no sé cómo llegar a ella.

—Han pasado dos años. Es normal que todo sea diferente —musitó apartándole el pelo de la cara—. Cariño, has cambiado mucho en estos dos años, pero Rose también lo ha hecho. El tiempo ha pasado para las dos. Ya no sois las dos chiquillas que se separaron, sois dos personas nuevas.

Era más o menos lo que le había dicho Luka.

—Deja que te cuente un secreto. Cuando empecé a trabajar para tu padre sólo conocía al personaje, eso era lo único que me dejó conocer de él. Esa persona con un ego desmesurado, caprichoso, egoísta y fanfarrón. Le apreciaba, pero me sacaba de quicio.

»Un día, después de casi tres años, me abrió la puerta vestido de persona normal, con el pelo lacio y sin rastro de maquillaje. Ese día conocí a la persona real, al hombre bueno, humilde, miedoso y calmado. Fue todo un shock. Me había acostumbrado tanto a Jagged Stone que tener delante a una persona normal me hacía sentir muy incómoda.

Juleka la miró con curiosidad. Siempre había dado por hecho que Penny conocía sus dos lados desde el principio. Penny era la única persona del mundo en la que Jagged confiaba plenamente.

—Cada vez que intentaba hablar con él me quedaba bloqueada, porque estaba acostumbrada a su personaje. Jared Stone era un desconocido a pesar de llevar casi tres años pasando juntos prácticamente el día entero.

»No fue nada fácil. Tuvimos que volver a conocernos, como si fuésemos dos desconocidos que acababan de verse por primera vez.

»Lo que quiero decir, es que tenéis que tomaros el tiempo de volver a conoceros, de acostumbraros a vuestros cambios.

—Lo entiendo —susurró reconfortada—. Necesitamos tiempo.

Penny asintió.

—Vuestra esencia es la misma, sólo necesitáis adaptaros.

Adaptarse. Podía hacerlo. Sería paciente, buscaría la manera de que pudieran conocerse de nuevo y adaptarse a sus nuevos yo sin que eso supusiera un impedimento.

—Me siento mucho mejor, gracias Penny.

—Sabes que me tienes aquí para lo que necesites.

—¿Quieres que te ayude con lo de la agenda? No tengo nada que hacer esta tarde.

—Me harías un gran favor.

Era justo, Penny siempre la había ayudado, ahora le tocaba a ella echarle una mano. No le convenía trabajar tanto ni estresarse.

Continuará

Notas de la autora:
¡Hola! Hoy tenemos a Penny como invitada especial, dándole algunos consejos a Juleka.
Mañana más.


Seulement des chansons d'amourWhere stories live. Discover now