Capítulo 1

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...do, re, mi, le decía así, nunca te enamores si no siente na por ti. Fa, sol, la, estoy destrozá, lo que vi en sus ojos nunca se me va a olvidar.
Llama a la policía, que viá' cruzar el estrecho llenita de mercancía que cuando llegue a Tánger voy a quedarme allí en la orilla para que no me llores así, no pierdas la esperanza sé que llegará, sé que llegará...

🪐

Tres semanas habían pasado desde la última vez que escuché ruido en el piso de al lado. Permanecieron en él alrededor de cuatro días y luego desaparecieron. Agradecí la calma y la soledad, fue volver a lo de siempre, pero con esa sensación de vacío. Casi que me había acostumbrado a tener barullo al lado y aunque me incomodaba, comencé a encontrarle la gracia. Vivían tres personas, a dos no tenía el gusto de conocerlos, pero al tercero en discordia sí y aunque no lo volví a ver desde aquel día, se adueñó de todos mis sueños y de todos mis pensamientos.

- Empiezo a creer que ese tío no existe -Estela me miró alzando una ceja.

-Existe y está muy bueno, pero tiene pinta de ser insoportable. No sé tía, es alto, muy alto y grande y tiene tatuajes y no sé parecía un puto vikingo -volví a describirlo aunque cada vez su imagen se iba haciendo más borrosa.

- No sabes nada de él, ¿no?-mi hermana se interesó y yo negué con la cabeza -. Pues vaya mierda.

- En fin, para qué si tiene pinta de ser el típico imbécil de turno -apoyé las manos en la mesa y me mordí el labio inferior -. Aunque tampoco lo parecía, no sé, es como si conmigo estuviera actuando diferente.

- ¿Cuándo fue la última vez que te acostaste con un tío? -preguntó Estela mirándome fijamente a los ojos.

- ¿A qué viene esa pregunta ahora? -me moví con incomodidad en la silla y ella dejó ver sobre su rostro una sonrisa cargada de maldad-. ¿Cuatro meses? ¿Cinco? Quizás...seis.

- Estás falta de sexo por eso te pareció atractivo el tío ese. Son las hormonas.

- No digas tonterías -rodé los ojos-. El tío ese está para mojar pan, pero yo ahora mismo busco algo serio, no quiero seguir dando tumbos sin sentido. Mi época de desfase ya pasó -decidí ser honesta por primera vez.

Desde que lo dejé con mi ex entré en una fase de negación, en la cual acabé saliendo cada fin de semana y disfruté abiertamente de mi sexualidad sin privarme de nada. Hasta que llegó un punto en el que no pude más y todo estalló, aquella no era yo. Ni yo misma era capaz de reconocerme y me cerré en banda y cada vez que se me acercaba un tío huía como si de algo malo se tratase. Los traumas amorosos me perseguían todo el tiempo y ante mi negación y que no estaba mentalmente preparada para aceptar que lo mío con Eric se había terminado, decidí no tener ningún tipo de contacto con nadie y mi salud mental me lo agradeció.

Supongo que cuando llevas ocho años con una persona y de repente todo se acaba duele, pero más duele pensar que la persona que pensabas que era el amor de tu vida te acaba engañando con otra. Tenía mi vida planeada a su lado, sentía que yo ya había ganado en la vida y hasta creé un proyecto de futuro con él. Pero como si de una película se tratase, me lo encontré con otra en la cama un día. Decidí adelantar mi vuelo un día antes y poder celebrar su cumpleaños juntos, quería darle una sorpresa, pero la sorpresa me la acabé llevando yo. Desde entonces no lo volví a ver, le pedí amablemente que se marchara de mi casa y estuve tres meses sin ganas de nada. Me pregunté una y otra vez que había estado haciendo mal, pero de nada sirvió preguntar porque la respuesta que estaba buscando no era la correcta.

Me costó mucho asimilar que yo no era la culpable y que él fue el que hizo las cosas mal. Estuvo llevando una vida paralela durante un año y medio. Habíamos visto hasta la posibilidad de casarnos y mientras me prometía amor eterno, por las noches se iba a casa de la otra a decirle exactamente lo mismo que me decía a mí. Y por casualidades de la vida, me engañó a mí, pero también la engañó a ella y aunque suene extraño con el paso del tiempo gané una amiga.

Cúrame ▪︎ MISHO AMOLIWhere stories live. Discover now