Capitulo 14: Más que una etapa

44 19 59
                                    

Hace un tiempo que no actualizaba, así que aca les va un resumen de lo que pasó en el capítulo anterior: Ian al llegar de la fiesta de Jana, se encuentra con su padre, que le dice que deberá estudiar y entrenar más ya que no le parece suficiente el esfuerzo que Ian ya le está poniendo a la cosa.

También está que Ian va por Haether a su casa ya que quedaron en ir por un helado, Ian habla un poco con la mamá de Heather, una conversación muy pequeña, y ya al final del capítulo Haether le dice a Ian que le debe una canción y él canta Angels fly. Creo que eso es todo, no soy buena haciendo resumen.

Heather.

Creo que nos ponemos a pensar, hace una tres semanas, la idea de estar compartiendo un helado con un chico parecería muy remota, porque sinceramente yo aún no lo proceso.

¿Estare mejorado? No me refiero al hecho de que este con un chico tomando un helado, sino al estará saliendo de mi zona de confort, que es estar encerrada en mi casa, porque si es así, no lo siento precisamente así.

Tengo un sonrisa divertida en los labios, mientras me sigo balanceando en el columpio e Ian a mi lado hace lo mismo.

No hace mucho rato que canto; Angels fly, demostrándome por fin que tiene una voz muy peculiar, sueve, no se cómo describirla tiene diferente contrastes, y, aparte me demostró que no es para nada horrible, como dijo la otra noche, todo lo contrario, porque sinceramente su voz es hermosa. Y yo no he dicho nada al respecto, así que lo voy a decir ahora mismo.

—No tienes una voz horrible —murmuro mirándolo.

—Claro que sí.

—No, eres conciente que te tienes buena voz, pero prefieres hacerte el modesto.

—Y yo creo que a mí parecer está bien y nada más.

—Tenemos un pensamiento distinto sobre lo que es horrible.

—Sí, tienes razón tenemos visiones distintas, a mí mi voz me parece horrible y a ti en cambio te parece bonita.

—A ti te parece horrible porque cuando cantas a solas te escuchas solo tu, y no dejas que los demás la escuchen, por eso, y porque a veces nos saboteamos a nosotros mismos.

Se me queda venido con curiosidad, y ladea la cabeza.

—Pero tu la acabas de escuchar.

—Y te he dicho que me parece sumamente preciosa.

—Lo dices para no hacerme sentir mal.

—Ya te dije que no, porque mi voz cantando está bien, pero la tuya está tres niveles más arriba.

—Vale, te creeré, y ahora ¿Que te gusta Heather?

—¿Qué me gusta?

—Sí, tus hobbies y todo eso, no te invite solo por un helado, también quiero conocer más de ti.

Miro mis botines, vale, ¿Cuando fue la última vez que hablé de lo que me gusta hacer, con alguien? La respuesta es que hace mucho. Ni siquiera hablo de eso conmigo misma. Lo vuelvo a mirar, Ian no ha apartado la mirada de mí en todo este rato. Suspiro relamiendo mis labios.

—Me gustaba la fotografía —confieso.

—¿Te gustaba?

—Me gusta o algo así.

—Sabía que la camara en tu mochila significaba algo grande —sonríe con sus ojos grises clavados en los míos.

—Pero hace tiempo que lo deje.

Aviones de papel Where stories live. Discover now