O6 : tensión.

620 107 6
                                    

Rosé mantuvo la mirada fija en aquella preciosa omega, pero el llamado de HyeRi la interrumpió y rápidamente tomó la bandeja en sus manos para llevarla a la mesa indicada

Oops! Questa immagine non segue le nostre linee guida sui contenuti. Per continuare la pubblicazione, provare a rimuoverlo o caricare un altro.

Rosé mantuvo la mirada fija en aquella preciosa omega, pero el llamado de HyeRi la interrumpió y rápidamente tomó la bandeja en sus manos para llevarla a la mesa indicada.

"¿Qué me pasa?", sacudió levemente su cabeza y con una sonrisa amable dejó el pedido a la pareja que estaba cómodamente sentada.

Su pie golpeaba el piso con ansiedad y casi sin pensarlo mucho, se apresuró a acercarse hacia la castaña. Estuvo tan cerca de haberlas atendido sino fuera porque Somi se movió con rapidez y terminó ganando el puesto. La de cabello lila se controló para no gruñir y fingió no haberlas visto.

Volvió a la mesa de cubiertos y dejó la bandeja junto a las demás. Su mirada fue a parar inevitablemente hacia donde estaba aquella omega. Deleitándose con lo suave de sus facciones y sobre todo aquella pequeña y tímida sonrisa.

Un suspiró salió de sus labios. No pudo controlarlo.

Carraspeó tratando de concentrarse cuando notó que la rubia se acercaba a ella. Su mejor amiga le sonrió y después dejó el papelito en aquella pequeña ventana donde preparaban lo solicitado.

Somi se volteó y vio los gestos de la Australiana. Su mandíbula estaba rígida, su entrecejo medio fruncido y ahora su mirada estaba fijamente puesta en un punto en específico.

La rubia no dudó en seguir aquella dirección con sus ojos y, de pronto, un pequeño puñado de esperanza se instaló en su pecho. Somi en verdad que no quería emocionarse pero ¡Vamos! Rosé jamás se dignaba a ver a alguien por más de diez segundos y menos cuando era una omega.

Carraspeó con suavidad, intentando llamar la atención de su mejor amiga. Sin embargo, esta ni se inmutó por estar sumida o hasta quizás perdida en las acciones que aquella adorable omega castaña hacía.

Jeon sonrió con diversión, deslizando su lengua por el interior de su mejilla. Vaya que ver algo como aquello era sumamente alocado y gracioso a la vez.

"¡Lo sabía! No estarás sola toda tu vida como dijiste", pensó con un gran ánimo. Moría por ver a la de cabello lila con alguien más. ¿Y qué mejor que la chica de piel blanca y brillante?

—Somi el pedido está listo. —la mencionada asintió y rápidamente tomó la bandeja, una fugaz idea cruzó por su cabeza.

Oh, Rosé-ssi... —la llamó con dulzura y un tono melódico.

***

—Jennie, no quiero estar aquí. ¿Podemos ir a otro lugar? —se apresuró a decir mientras volteaba disimuladamente a ver a la alfa de pelo lila.

—¿Qué, qué pasó? —contestó la pelinegra, tomando las manos de la omega por sobre la mesa. Notó hacia donde veía su tierna mejor amiga, y pudo comprenderlo—. ¿Park trabajaba aquí? —cuestionó extrañada, ladeando levemente su cabeza.

la princesa y la plebeya. | chaelisaDove le storie prendono vita. Scoprilo ora