[ABO] SNASUEDDD

CAPITULO 27

Cuando lo trataron con frialdad e indiferencia, Qin Wen no pensó que algún día esta persona se disculparía con él y le diría «lo siento» con sinceridad. Todavía tenía el mismo rostro tranquilo que ha permanecido sin cambios durante miles de años, y había suaves cedros flotando en el aire. Aliento, como un Alfa superior, este es el límite que Chi Han puede alcanzar.

Incluso después de matarlo, nunca pensó que un día Chi Han se arrodillaría y suplicaría perdón.

Esto es lo mismo que un cometa golpeando la tierra. La posibilidad solo ocurrirá cuando la civilización humana sea excavada a fondo y luego se lleven a cabo cálculos precisos para continuar el frente del milenio.

Pero en este momento, Chi Han se arrodilló frente a Qin Wen, temiendo que la atmósfera no fuera lo suficientemente mortal, y dijo:

«Lo siento»

Qin Wen se presionó la frente, entrecerró los ojos hacia Chi Han y finalmente logró decir algo con la garganta: «Levantate...»

Chi Han se arrodilló derecho, con una expresión gentil sin precedentes:

«¿Puedes perdonarme? Solía ser ignorante, estaba equivocado»

Aunque los alfas como Chi Han tienen un alto coeficiente intelectual, ignoran la ética de muchas personas. Por ejemplo, para los Alfas ordinarios, ¡ni siquiera piensen en arrodillarse y admitir sus errores! ¡Lástima! ¡Sin perspectivas! Pero para Chi Han, no es tan importante como el corazón de Qin Wen.

Él no es un procrastinador. Como Qin Wen ha dejado las cosas claras, se esforzará por lograrlo en un solo paso.

«Qin Wen». Chi Han fue cauteloso: «¿Quién es el Ye Qianling que acabas de mencionar... quién es?»

Qin Wen volvió la cabeza hacia un lado, apenas atreviéndose a mirar la hermosa imagen de él arrodillado en el suelo, «Es el de la familia Ye, una Omega muy famosa en ese entonces»

Chi Han recordó vagamente un contorno, y sus rodillas se enderezaron más: «No estoy familiarizado con ella»

«Está bien, levántate primero». Qin Wen realmente no puede ver a Chi Han así, y Chi Han en su corazón no se inclinará ante nadie ni ante nada, y mucho menos arrodillarse.

Qin Wen extendió la mano y Chi Han la agarró sin planes de levantarse. Solo preguntó: «¿Puedes perdonarme?»

Qin Wen lo miró con seriedad, «Chi Han, me tratas ... al final ¿Qué estás pensando?»

«Ser dueño de los pensamientos de uno mismo»

Chi Han habló en voz alta, la posesividad en sus ojos no estaba disimulada, y la figura de Qin Wen estaba claramente grabada en ella,

«Un Alfa está lleno de amor y lástima por Omega. No puede verlo siendo agraviado en lo más mínimo, al igual que él todavía quiere pasar el resto de mi vida con él, dime, ¿en qué esta pensando?»

Después de decir una oración, la cara de Qin Wen se puso roja.

«Perdóname.» Chi Han no solo ignoró su identidad, también fue un poco pícaro:

«No me levantaré si no me perdonas»

Luego retiró la manta, dejando al descubierto el piso de madera de abajo, y fue extremadamente estricto consigo mismo:

«Sobre la manta no duele arrodillarse, no es sincero»

Qin Wen: «...»

Sin contenerse durante unos segundos, Qin Wen se rió, su expresión era completamente amable: «Parate»