Capítulo 14

2.3K 191 29
                                    

Todos los personajes pertenecen a Suzanne Collins

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Capítulo 14

Acaso escuche mal, no puedo creer que Gale me dijo que me quiere o quizás se refiere a que me quiera como un amigo, aunque no lo creo después de todo me acaba de besar y ese beso no era de un amigo.

Me separo de Gale porque mi cabeza da muchas vueltas, esto ya es demasiado tengo muchas cosas en la cabeza y muchos sentimientos que me confunden para que Gale me diga esto, no sé, que responder o más bien no tengo ganas de responder.

-- Catnipp no tienes que responder. Entiendo que las cosas no son fáciles-me dice.

-- Mejor me voy.

-- Escucha, buscare la manera para sacarte de esto y de ayudarte con Prim.

-- Gale, tu tienes bastante con tu familia.

-- Eso no importa, los sacare a todos adelante solo tengo que buscar la manera. Y en cuanto la encuentre tú te libraras del viejo.

Observo a Gale noto que tiene esa misma expresión que tenia cuando su padre murió. Aún recuerdo que era espantoso estar ahí parada en el cementerio. No entendía en ese momento lo difícil que era perder un Padre, pero recuerdo el rostro de Gale, ya que no lloraba. Ese chico de 12 años sostenía con fuerza a su Madre la cual parecía a punto de derrumbarse, supongo que en ese instante él ya había tomado una decisión que yo comprendería unos años más tarde. Era esa misma expresión la tenía en estos momentos.

Sin decir nada me marche para dirigirme a mi casa. Amor ¿qué era el amor? tenia a dos chicos que me hablaban del amor, pero yo parecía no comprenderlo. La expresión de Gale me hizo recordar el funeral de su padre en ese sentimiento de querer correr mientras veía a Hazell llorar con desespero aferrándose al ataúd del hombre que había sido su amor. En mi mente de niña, inclusive ahora aun no entendía que pudo haber sentido, ni siquiera comprendí a mi Madre cuando perdió a mi Padre, a la persona que había amado por casi 20 años, ¿acaso era más duro para ella que para nosotras?, quizás era algo que nunca sabría.

Al llegar a mi casa vi a Peeta bajándose de un auto, pensé esconderme, pero fue tarde cuando me vio, me acerque a él, podía ver sus ojos brillando en la oscuridad.

-- Hola- me saluda- ¿Y esa ropa?

-- ¿Acaso esta ropa tiene algo de malo?- pregunto molesta.

-- No. Es solo que no era lo que traías puesto en la tarde, por eso me parece curioso-dice- Sabes me gusta como se te ve esta camisa-dice mientras la toca.

-- ¿De verdad te gusta?

-- Sí. Recuerda que ya te observaba desde que era tu cliente en el restaurante. Siempre me gusto como se te veía, todo en ti me gusta incluso tu trenza- al decir eso me da un beso el cual llena todo mi cuerpo de calidez- Aunque tengo que ser franco me gusta como se te ven esos vestidos, ya que me gustan mucho tus piernas.

Ese comentario provoco que me avergonzó totalmente y ver su sonrojo supe que él se había dado cuenta de su comentario, así que intento cambiar de tema.

-- ¿Ya cenaste?

-- No- le conteste sin verlo a los ojos.

-- Ven vamos a ver que preparo y de paso vemos algo de tele

Me tomo de la mano dirigiéndome a su casa donde al final del día termine pasándola muy bien.

Por primera vez en toda su vida Effie no llego a la hora que dijo, me había dejado un mensaje en mi contestadota diciendo que pasaría por mí en la tarde para ver a Cinna pero esta llego una hora después.

Todo por dineroWhere stories live. Discover now