Capítulo 27

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Todos los personajes pertenecen a Suzanne Collins

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Capítulo 27

-- PEETA!- grito su nombre- ábreme por favor.

Llevo un rato golpeando con desesperación la puerta sin éxito, lloro y grito como loca porque la sola idea de que Peeta me odie me pone mal. Al ver que Peeta no me abre me empiezo a sentir que estoy por vomitar. No logro hacerlo porque siento que alguien me sujeta del brazo, volteo enojada pensando que es Gale, pero a quien encuentro es a Haymitch que me mira con una expresión triste.

-- Haymitch- digo pasándole los brazos por el cuello.

-- Al fin te exploto la bomba en las manos preciosa.

-- Haymitch dile que abra la puerta. Peeta te hará caso a ti, dile que me permita hablar con él- suplico a mi vecino.

-- Ven, vamos a tu casa- me dice agarrándome del brazo.

-- No, Haymitch tengo...-alcanzo a decir ya que las palabras ya no me salen por el llanto que me ahoga.

-- Deja que se tranquilice- me aconseja.

Bajamos del porch de Peeta para dirigirnos a mi casa. Al entrar a ella me llevo una sorpresa al ver a Gale veo en su rostro arrepentimiento, sin embargo no me importa. Me suelto de Haymitch para ir y descargar toda mi enojo en mi mejor amigo.

-- ¿Que haces aun aquí?- le pregunto enojada.

-- Necesitamos hablar- dice.

-- No tengo nada que hablar contigo, quiero que te vayas.

-- Katniss.

Al decir mi nombre veo que intenta tomarme del brazo. Mi reacción le sorprende, ya que le doy un manotazo, de hecho le doy varios golpes en el pecho reclamándole.

-- ¿Quién te dijo que yo estaba enamorada de ti? ¿Quién te dijo eso?...yo solo estoy- la palabra no logra salir de mi boca lo único que puedo decir es- de él-digo señalando la casa de Peeta- solo de él- rompo en un llanto amargo.

-- Será mejor que te vayas- escucho que le dice Haymitch.

Veo que me observa, aunque no le digo nada me dirijo al sillón, ya que no me siento bien, no volteo al escuchar la puerta cerrarse tras de mi. Me apoyo de lo que puedo cuando siento como todo mi cuerpo empieza a temblar. Las ganas de vomitar se hacen presentes nuevamente, junto a una opresión en mi pecho que seguro es por la tristeza que siento de estar lejos de Peeta. Si esto no hubiera pasado, él y yo estaríamos en mi amado bosque tranquilos y felices. Siento la inestabilidad invadir mi cuerpo hasta que todo se me nubla. Abro los ojos y me decepciono al ver el rostro de Haymitch, él parece notarlo, ya que me dice.

-- Deberías agradecer que estuviera aquí, ya que evite que te pegaras contra el piso-No entiendo lo que dice ya que viene a mi mente Peeta.

-- Peeta- digo de golpe. Intento pararme, pero Haymitch no me deja.

-- No te puedes levantar- dice una vocecita molesta desde la puerta es Effie.

-- Tengo que ir a ver a Peeta- le digo sin darle importancia a lo que dice.

-- El doctor no tarda en llegar.

-- ¿Doctor?

-- Sí, en cuanto te desmayaste le hable.

-- ¿Me desmaye?- pregunto no logro entender nada.

-- Sí- contesta Haymitch.

Me siento triste al pensar que la última vez que me desmaye termine en los brazos protectores de Peeta. Me hubiera encantado que nuevamente eso pasara otra vez.

Todo por dineroWhere stories live. Discover now