DIARIO DE UN PECADOR

Capítulo 4

Todos estábamos sentados en el comedor a excepción de mi hermano menor, estaba mi mamá, mi papá y claro cómo no va a faltar mi hermana mayor, ella siempre tan servicial en los problemas familiares, yo creo que esto lo debería hablar solo con mis padres pero como hace dos años ella egreso de la universidad con título en psicología, mamá la llama desde entonces para que le ayude a tomar "buenas decisiones" odiaba que se crea la mejor hija, siempre tan perfecta, nunca les dio problemas a mis padres y siempre fue una excelente alumna o bueno eso es lo que todos creen pero yo se algunos secretos muy sucios acerca de ella, es una perra mojigata.

—y bien en que te has metido ahora—dijo, yo no le respondí, quien se cree que es.

—tu hermana te está hablando—dijo mamá mientras me miraba.

—yo no tengo por qué explicarle nada a ella—dije desbordando ira en cada palabra.

—si te supieras comportar no estaríamos aquí reunidos—dijo mi padre con un tono muy calmado.

—solo porque no llegue a dormir, no se va a acabar el mundo—dije.

—pero haces preocupar a mamá, eres un inconsciente—dijo mi querida hermana.

—nadie pidió tu opinión—escupí, es una maldita.

—estamos aquí para ayudarte—dijo mamá tomándome de la mano, yo le solté inmediatamente.

—ayudarme!!! En qué? soy joven tengo que vivir y ustedes me quieren mantener encerrado—no aguantaba estas reuniones para apuntar todos mis errores.

—sabes bien que lo hacemos porque te queremos—dijo mi mamá a punto de llorar—no es nada agradable preocuparme por ti y que tu ni siquiera llames!, que no entiendes los peligros que hay allá afuera, se te da la confianza de que salgas con tus amigos y te diviertas pero tu llevas todo a los extremos—termino de decir esto y se fue en llanto, mi hermana la abrazo para consolarla.

—si ves lo que haces—me dijo.

—tendremos que tomar medidas más drásticas—dijo mi papá mirándome.

—deberían quitarle el auto—dijo ella.

¿Que acaba de decir esa estúpida? Rayos la odio!

—queeee, no ese es mi auto!—grite levantándome alterado.

—realmente no es tuyo, no salió de tu bolsillo si no del de papá y mamá—dijo esa estúpida.

—tu no opines que no es tu problema—grite.

—creo que será el mejor castigo—dijo papá apoyando la idea de esa perra.

—queeeee, no no NO, como voy a ir al instituto!— dije buscando alguna excusa para que no me quiten el auto.

—no metas al instituto, entras en un mes—iba a matar a esa perra, por qué se mete, la odio la odio LA ODIO!!!

—CALLATE!!!—grite y me abalance donde estaba ella, pero mi papa me detuvo antes de que le pueda hacer algo, ella rio, maldita perra.

—te comportas como un imbécil, papá lo mejor es que le quites el auto si no se puede comportar con su familia quien te asegura que no te llamaran para decirte que tuvo un accidente—dijo mirándome a los ojos en forma de burla.

—ustedes bien saben que no conduzco ebrio—dije, sabía que mentía porque suelo manejar con algunas copas de más, pero cuando me siento muy mal me quedo en la casa de algún amigo para no conducir.