Capítulo 8

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PDV Matthew

Andrew es un estúpido al igual que yo, creo que por eso somos buenos amigos, la cuestión aquí es que dijo que iba a estar a las 11:00 en punto en mi casa y el maldito no ha llegado, no soy la persona más puntual del mundo pero rayos ya ha pasado más de media hora y ni siquiera responde su celular, necesito anotar nunca hacer un plan con él.

Es el último domingo que pasaré libre así que no lo desperdiciare.

Pero bueno él se jode— miro mi celular para ver si alguien se ha acordado de mí, y como es obvio una belleza lo ha hecho.

***

Rubí— Se ve que te has olvidado de mi papi— amo que me digan papi!

Yo— Hola nena, justamente estaba pensando en ti... debes saber como

Rubí—Oh, puedo imaginármelo...de seguro que sería mucho mejor que se haga realidad, ¿no crees?

Yo—Claro amor, me encantaría, si pudieras hoy sería excelente.

Rubí— Me encantaría y lo sabes, pero están mis hermanas, o quieres hacer lo del otro día?

Yo— jajajjaja quieres que me vuelva a trepar por tu ventana, me estas convierto en Romeo amor

Rubí— Ay bebe bien que la pasaste bien, apura ven que tengo ganas.

Yo—Tendré que ir sin el carro para que no sospechen al ver un auto estacionado frente a tu casa, así que me demoraré unos 10 minutos

Rubí— Siii, me vas a alegrar el día bebe, te esperare atenta, estaré en mi ventana ya sabes cómo subir :*

Yo—Ok amor ya voy.

***

Listo, el día se arregló después de todo, como iré caminando no llevare chaqueta lo único que es indispensable llevar son los condones y como ella es muy caliente llevare unos tres o cuatro.

Salgo de mi casa dispuesto a caminar 10 minutos y con éste sol insoportable agradezco que viva cerca o si no, no me ganarían las ganas y no iría ummmm o tal vez si... que estará haciendo April en este momento, no he hablado con ella desde que salimos ese día.

Camino distraído y veo que ya casi estoy por llegar, así que voy visualizando la ventana de Rubí, Veo una silueta detrás de la cortina de seguro es ella que me está esperando.

Llego a su casa y me introduzco por el patio que es abierto y cubierto de césped, veo el árbol y salto hasta la rama más próxima y resistente, mierda si no entrenara esto sería imposible de subir, con algunos trucos logro subir hasta la parte del árbol que está justamente frente la ventana.

Aparece Rubí por la ventana y me ayuda a entrar, está con ropa interior color negro y de encaje se ve tan bien, su cabello rojo le cubre un poco los pechos, al instante la agarro de la cintura y la atraigo hacia mí antes de que diga algo.

Entre besos me logra decir que una de sus hermanas ha salido y solo está su hermana menor que de seguro no va a molestar.

La llevo hasta la cama y la sigo besando, tenía ganas de una aventura caliente como la que ella suele darme, me mira y sonríe.

—no me has dejado ni decirte que te ves completamente sexy— dice esto y le doy un beso rápido.

—no te he dejado decirlo porque ya lo sé— la aprieto hacia mí y ella abre ligera mente las piernas y me susurra al oído...

DIARIO DE UN PECADORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora