Andrea: ¡¡Una lagartija!!
Samuel: ¿Que?! Pero...
Andrea: ¡¡Esa caja tenia una lagartija!!.-dijo abrazándolo con fuerza.
Samuel: Cálmate Andrea!
Andrea: ¡¡Esta horrible, Samuel mátala por favor!!
Samuel: ¡Cálmate!
Andrea: ¡No! Me va a comer!-dijo mirando hacia el suelo en busca del animal.
Samuel: Ya basta!-grito y ella volteo haciendo que sus narices se rozaran y sus labios quedaran a escasos centímetros, ambos se miraron directamente a los ojos y ella no había notado que estaba en sus brazos hasta que sintió como el la estrechaba un poco mejor.
Andrea: Lo... lo siento.-dijo mirando a Samuel por ultima vez y se bajo de sus brazos, mientras este asentía de una forma incomoda.-Es solo que el animalito me ha asustado, no estoy acostumbrada a tratar con muchas lagartijas.
Samuel: No se preocupe, pero esta bien?-pregunto al visualizar mejor lo pálida que estaba Andrea, y se acerco a ella sujetando su cara con sus manos, haciendo que su cuerpo se erizara apenas toco la suave piel. Y se separo de prisa.
Andrea: Si, bueno me pego un buen susto, pero mi corazón ya late con normalidad.-dijo poniendo una mano en su pecho..-¿Quiere escucharlo?
Samuel: No, y esa niña me va a escuchar!.-dijo algo serio pero antes de salir Andrea lo tomo del brazo.
Andrea: No, no es necesario que la regañe, esta bien me asusto y hace que casi se me mojen los pantalones, pero es niña y hace travesuras, además ella ya me odia, no alimente más ese odio por favor, lo que menos quiero es tener que lidiar con más cosas.-dijo y Samuel la miro durante unos segundos para después asentir.
Samuel: Bien, igual quiero leer como se ha portado estos días, no le he pedido los reportes que le pedi pero me imagino que los ha echo.
¡¿Los reportes?! ¿Qué reportes?! ¡Oh por Dios! Me ha dejado reportes?!
Andrea: Oh, si claro, todo esta en orden.-mintió con una sonrisa.
Samuel: Bien, ya es muy tarde y le pido que en disculpas por lo sucedido con mi hija, acepte que el chofer la lleve.-dijo mirando su reloj, al ver que Andrea iba a negar agrego.-Sino acepta me vere en la necesidad de castigar a Camila por su mal comportamiento.
Andrea: Esta bien, gracias.-dijo sonriendo y salió de la casa para dirigirse al jardín en donde se encontraba el chofer, Samuel le dio ordenes y después Andrea se fue.
Chofer: No se preocupe señorita, llegaremos más pronto de lo que se imagina.-dijo sonriendo y ella le devolvió la sonrisa.
Andrea: Eso espero, tengo que hacer reportes...
Samuel termino de bañarse y cambiarse de ropa para después dirigirse a la habitación de Camila, le había prometido a Andrea que iba a dejar las cosas así, sin embargo tenia asuntos que tratar con la pequeña y la principal era disculparse.
Samuel: ¿Puedo entrar pequeña?-pregunto desde la entrada del cuarto mientras su hija estaba ya acostada en la cama y ella hizo una mueca.
Camila: Si papi.-dijo desanimada y el frunció el ceño dibujando una ligera sonrisa.
Samuel: ¿Que tienes?-pregunto sentándose a su lado.
Camila: ¿Vienes a regañarme por lo que e hice a mi niñera verdad?-pregunto bajando la mirada y el sonrió.-Pero lo que hice fue...
Samuel: No debiste hacer eso, la asustaste mucho. Además ¿de donde sacaste esa lagartija?
Camila: Del jardín, ahí hay muchas, a veces las persigo. Fue divertido escucharla gritar.-dijo dibujando una ligera sonrisa.
Samuel: Divertido para ti, no para ella, créeme cuando te digo que se asunto demasiado. Ya no lo vuelvas hacer, ¿Si?-pregunto y Camila asintió.-Me lo prometes?
Camila: Si papá. ¿Me vas a castigar?
Samuel: No, ella me pidió que no lo hiciera.-dijo y Camila frunció el ceño.-Y dado a que ya me prometiste no volverlo hacer, no veo la necesidad.
Camila: Gracias papi.
Samuel: Nena yo quería ofrecerte una disculpa por como te hable esta mañana, y no quiero que pienses que no me gusta tenerte a mi lado, porque no es así, Camila desde que tu mami nos dejo han sido meses muy difíciles para mi, entre educarte, estar contigo, ver que te falta, que no, si estas mal, triste, mi trabajo, mis propios problemas...en este momento estoy mal por todo lo que nos esta pasando y todo mi dolor, mi amargura, mi desesperación, impotencia, la descargue sobre ti y no debi hacer eso. Tu eres lo más importante que yo tengo pequeña.-dijo acariciando su mejilla y Camila sonrió.
Camila: Te entiendo papá, porque yo también me siento así, solo que ya no quiero que estes triste y enojado.
Samuel: Te prometo que hare un esfuerzo.
Camila: Te quiero.-dijo sonriendo y lo abrazo fuertemente.-¿Duermes conmigo?
Samuel: Si hija.
Camila: ¿También me lees un cuento?-pregunto y se hizo un largo silencio.-Papaaá
Samuel: Esta bien.-dijo acostándose junto a ella, haciendo que Camila pusiera su cabeza en su pecho y garro un libro que estaba en el buro comenzando a leerlo...
"Maldición, maldición llegare tarde" pensaba Andrea mientras caminaba por as calles, su despertador no había sonado a tiempo y ahora estaba a cinco minutos de que Samuel la regañara o conociéndolo no descartaba la posibilidad de que la despidiera.
Andrea: Listo, listo ya llegue!.-grito entrando a la casa con el cabello alborotado y sus labios resecos haciendo que Camila se echara a reír y Samuel la mirara incrédulo por unos minutos.
Samuel: ¿Qué le paso?
Andrea: Bueno este pensé que se me hacia tarde y, me quede dormida por eso me vine como loca corriendo por las calles de esta ciudad para llegar a tiempo.-dijo comenzando a acomodarse el cabello.
Camila: Parece bruja papá.-susurro en su oído.
Samuel: Shsss. Bueno Andrea, yo las dejo, me voy a trabajar.
Andrea: Que le vaya bien señor.-dijo sonriendo y el la miro.
Samuel: Gracias, bueno nena, pórtate bien por favor y Andrea...asegúrate de prepararla para la escuela, entra en madia hora.-dijo y Andrea asintió.
Camila: Llegas temprano!-grito sonriendo.
Samuel: Si!-dijo y se fue dejando a Andrea desconcertada.
Andrea: ¿Por qué tu papá y tu se ven tan felices y contentos? Es que me he equivocado de casa o les ha entrado por hacerme una broma?
Camila: Hicimos un pacto, pero solo entre nosotros dos. Ahora te espero arriba, en el cuarto de mi mamá esta mi uniforme, lo planchas bien y me lo llevas, de comida para llevarme al colegio quiero un sándwich, jugo y de postre pastel de chocolate.
Andrea: Todo eso tiene que preparar la pobre cocinera.
Camila: A menos que quieras hacerlo tu, si.-dijo seria y se dirigió a su cuarto.
Andrea: Y yo no podría participar en ese pacto también?!-grito pero Camila no le contesto.-Bueno, supongo que es un no.-susurro y le dijo a la cocinera lo que quería Camila.
Después subió al cuarto de Aime, buscando el dichoso uniforme, pero entre sus cosas encontró un sobre con unos documentos que se cayeron de un baúl, se agacho para recogerlos pero al ver que eran unos estudios con el nombre de la mamá de Camila, pudo más su curiosidad y aunque sabia que estaba mal, comenzó a leerlo.
Andrea: ¿Cáncer pulmonar?...
