Andrea tenia entre las manos una taza de café caliente, soplaba suavemente mientras miraba por la ventana, estaba a punto de amanecer, lo que quedaba de luna se iba metiendo y con ello daba comienzo a un nuevo día. Recordó la conversación que había tenido con la psicóloga días antes y pensó que tenia razón en muchas cosas que le había dicho.
Ella no había tenido la culpa, y ya su pasado había quedado atrás cuando encerraron a Armando en la prisión, ahora era tiempo de cambiar y ver para su futuro, tenia que ver por ella y en su bienestar, ella se sentía a gusto con Samuel, lo quería mucho pero no sabia si el pensaba lo mismo con respeto a ella, ni si la había ayudado solo porque le daba lastima, tenia que arreglar eso pero antes tenia que arreglarse ella misma.
Samuel: Has madrugado.-dijo mientras bajaba las escaleras.
Andrea se volvió al escuchar la voz profunda que tanto le gustaba y sonrió desde la ventana mirando como el llegaba a ella y la saludaba de beso en la mejilla, le sorprendió que él fuera vestido de una manera informal, con unos vaqueros y una playera roja.
Andrea: Quería ver salir el sol, también tenia frio y fui por café, ya esta echo por si quieres pasar a la cocina.-dijo y dibujo una ligera sonrisa cuando el se sentó junto a ella.-Te veo diferente ¿Porque no llevas tu traje?
Samuel: Tengo que llevar a mi hija al puerto, va a tener una excursión, la maestra y algunos padres nos organizamos para que ellos viajaran por mar, claro, tomando nuestras precauciones.
Andrea: ¿Iras con ella?-pregunto bebiendo un trago de café.
Samuel: No, pero si irán padres que los vigilaran, Camila no quiso que la acompañara, se siente...grande.-dijo con fastidio y Andrea sonrió.
Andrea: Es normal tiene 11 años, todos a esa edad piensan que ya pueden con todo, pero es mejor que la dejes que vaya sola desde ahora, eso le dará mayor seguridad en un futuro, tampoco es bueno que este pegada a ti todo el tiempo. ¿Además solo serán dos días no?
Samuel: Si, pero supongo que la voy a extrañar y...esto no es nada fácil para mi, nunca me había separado de ella.-dijo serio y Andrea le tomo la mano.
Andrea: Lo se, pero tampoco es como si te separas de ella para siempre.
Camila: Papá ya estoy lista...Andrea!-dijo sonriendo cuando la vio y dejo la maleta que llevaba para correr a sus brazos.-¿Que crees? Voy a salir de viaje, y mi papá me llevara al puerto, viajare en barco!-grito emocionada y Andrea sonrió.
Andrea: Me alegra mucho Camila, trata de disfrutar pero no te separes de tu maestra o de los padres que los cuidan esta bien?
Camila: Si.
Andrea: Pórtate bien.
Camila: Te lo prometo.
Andrea: Mejor júramelo.-dijo y Camila comenzó a reír.
Camila: Esta bien Andrea, te lo juro.-dijo y beso su mejilla para después bajar de sus brazos.-Ya vámonos papá, que la maestra dijo que nos quería temprano y ya salió el sol.
Samuel: Esta bien.-dijo sonriendo y tomo la maleta de Camila.-Adiós Andrea, luego regreso.
Andrea: Adiós! Diviértete Camila!-grito cuando ellos salían después dejo la taza de café para subir a su cuarto.
Samuel venia de camino, le había dolido tanto ver partir a su hija, sabia que estaba siendo un exagerado, que solo se iba por dos días, pero le pesaba no tener a su chiquita con él, no saber si estaba bien, si tenia hambre, lo que le esperaba en el viaje, no dejaba de preguntarse que pasaría si ella lo extrañaba durante el viaje. Pero también tenia que hacerse a la idea que en cualquier momento ella crecería y a él no le quedaría de otra más que dejarla ir.
Samuel: Pero para eso aun faltan muchos...muchos años.
Por otra parte también pensaba en Andrea, le daba mucho gusto que ella también estuviera superándose poco a poco, aunque aun era algo tímida y reservada, como que no se sentía en confianza aun, pero confiaba en que eso pasaría tarde o temprano.
Andrea parecía tener ciento de capas y el no podía resistir la tentación de ir desprendiéndole una por una hasta haber lo que había debajo, recordó su boca sensual junto a la suya, la piel ardiente bajo la suya y sus manos rudas y salvajes acariciando todo su cuerpo, esa noche había descubierto a una Andrea diferente, una Andrea que le encanto de pies a cabeza, una Andrea con la que le gustaría pasar el resto de su vida. Su rudeza y ternura era algo que no muy a menudo se encontraba en una mujer.
Andrea: ¿Cómo estuvo todo?-pregunto mientras revisaba un periódico y el se acerco a ella.
Samuel: Bien, aunque no fue fácil ver como se subía al barco y se iba despidiéndose de mi. Dirás que soy el padre más patético sobre la tierra pero sentí horrible.
Andrea: Me imagino, pero piensa en ella, seguro se la pasara muy bien y si no es así por lo menos ya sabrá lo que es estar sola en un viaje, tal vez para la próxima pida que te acompañe de nuevo.-dijo y Samuel asintió.
Samuel: ¿Qué haces?
Andrea: Eh....yo estoy buscando departamentos, y trabajo, no quiero ser un estorbo, y también me da pena seguir en tu casa sin mover un solo dedo, no es mi estilo.
Samuel: ¿Que? No te estoy echando.-dijo con el ceño fruncido.
Andrea: Lo se pero...
Samuel: Y tampoco me importa que no hagas nada, de verdad Andrea, no me molesta que estés aquí, al contrario, disfruto de tu compañía.
Andrea: Gracias pero quiero comenzar volviéndome independiente, comprendí que necesito un tiempo para mi y para aclarar mis ideas, hacer algo por mi cuenta, necesito comenzar a sentirme útil me entiendes.-dijo y sintió como su corazón se detenía al ver la cara de Samuel.-Tampoco quiero ser malagradecida, me ayudaste mucho y jamás olvidare lo que hiciste por eso te digo esto desde ahora, Samuel...
Samuel: Esta bien, creo que tienes razón, esto te ayudara, y lo hice desinteresadamente así que no tienes que darme las gracias.-dijo dibujando una ligera sonrisa y ella hizo un esfuerzo por esbozar una aunque fuera ligera.-¿Cuando se supone que te iras?
Andrea: No se, cuando encuentre algo, pero aun nada.-dijo y el la miro como analizándola, no sabia el motivo pero se sentía molesto por ello.
Samuel: Espero tengas mejor suerte y que encuentres algo que te agrade, también espero que nos visites cuando te vayas.-dijo levantándose.
Andrea: Así lo hare.-dijo y el comenzó a caminar.-Samuel de verdad no te molesta, mira...
Samuel: Andrea, si vas a empezar por cambiar trata de hacer lo que mejor te parezca, no pienses en mi o en los demás, sino en lo que tu decidas, para serte sincero, también me ayudara que te vayas, me ayudara a aclarar ciertos sentimientos con respecto a nosotros.
Andrea: ¿Así?-pregunto sintiendo que se le cerraba la garganta.
Samuel: Si, por ejemplo si esto que hice fue porque siento ciertas cosas hacia ti o solo por compasión.-dijo mirándola a los ojos y le dio la espalda comenzando a retirarse...
