Los tres iban por la calle, la película había acabado con un hermoso final como todas las películas animadas, no un castigo feo para los villanos, sino justo, eso era lo que más le agradaba de las películas infantiles, que la maldad no era tan fea, y que los malos siempre fallaban con lo que intentaban hacer, muy distinto todo a como era en la vida real.
Entrelazo la mano con la de Camila cuando esta se acerco a ella, la tranquilidad, felicidad y alegría brotaban en su interior, tal vez Samuel había tenido razón al decir que eso era lo que ella necesitaba para dejar de pensar un poco en Armando.
No sabia el porque pero desde que le llamo aquella tarde no había dejado de pensar en él.
Camila: ¿Podemos beber café? Quiero uno!-grito jalando la mano de Andrea y esta sonrió mirando a Samuel.
Andrea: ¿Podemos ir?
Samuel: Por mi no hay problema. Vamos.-dijo sonriendo y ambos entraron a la cafetería.
Andrea inhalo al entrar al lugar, olía a café, fuerte y caliente, paso la lengua por sus labios, casi podría saborear su consistencia fuerte y profunda, se sentaron en una de las mesas que había disponible y una mesera llego a atenderlos, cada quien pidió uno distinto, descafeinado, clásico e irlandés. Pasaron unas galletas a la mesa y Andrea agarro una mientras miraba a Camila quien batallaba por abrocharse el suéter.
Andrea: Haber, déjame intentarlo.-dijo sonriendo y la ayudo a subir el cierre.
Camila: Gracias, ¿Qué te pareció la película Andrea?
Andrea: Me gusto mucho, la parte que me agrado de todo es el final, cuando la muchacha recupera a su periquito.
Camila: Sii! Esa también fue mi parte favorita! Aunque es una guacamaya Andrea, no un perico.-dijo y Andrea comenzó a reír alzándose de hombros.
Andrea: Lo siento, la verdad no se mucho de aves, pero si dices que es una guacamaya te creo.
Camila: ¿Y la tuya papi? Cual fue tu parte favorita?-pregunto mientras Samuel estaba concentrado en su móvil.-¡papá!
Samuel: ¿Eh? A..la mía fue.. el final, todos felices para siempre.-dijo y Andrea comenzó a reír.
Camila: No es cierto! Ni siquiera viste la película porque estuviste viendo a Andrea.
Samuel: ¿Que? Eso no es cierto.
Camila: A que si! Yo te vi.-dijo comenzando a reír y Andrea miro a Samuel ligeramente sonrojada.-No le despegabas la mirada y mira que yo te hable dos veces.
Samuel: ¡Bueno, bueno ya! Cállese señorita que nadie le esta preguntando eso.-dijo apretando ligeramente la nariz de Camila.-Mejor hay que comer en lo que nos traen los cafés, ya después si les parece podemos ir a un restaurante o comer en casa.
Andrea: Yo prefiero comer en casa, es más cómodo ¿si? Además podemos comer con más tranquilidad, cenar en restaurantes no se, siento que a veces te abruman tantas personas.-dijo y Samuel comenzó a reír.
Camila: Si, yo quiero comer en casa también.
Samuel: Esta bien...
Los tres terminaron de beber sus cafés y después decidieron seguir caminando hasta llegar a la casa, pasaron por el puente el cual dividía un gran rio en donde Samuel cargo a la pequeña para que pudiera ver la gran corriente que tenia, y lo grande que era, pasaron por diferentes casas y diferentes calles, al principio Samuel no dejaba de pensar que se les estaba haciendo tarde, pero después se relajo y estaba disfrutando de paseo, al llegar a un parque, Camila insistió en subirse a los juegos que estaban en una esquina y a mucha insistencia Andrea cedió en acompañarla para que se subiera.
Samuel se sentó en una de las bancas mirando con ternura y admiración, el como Andrea ayudaba a su hija, para que ella pudiera subirse a la resbaladilla, después paso por los aros, pasamanos y por ultimo la rueda giratoria y los columpios.
Samuel: Ya? Podemos continuar o la señorita quiere algo más?-pregunto con una ligera sonrisa cuando llegaron a él y Camila comenzó a reír.
Camila: No papi, ya podemos irnos, pero cárgame.-dijo estirando sus manitas para que Samuel la alzara en brazos y este sonrió cargándola.
Cuando llegaron a la casa, Camila ya se había dormido, por lo que Samuel la fue a dejar a su cuarto y le beso la frente para después salir y bajar a cenar al lado de Andrea, la cual ya estaba sentada esperándolo.
Andrea: Pensé que iba aguantar hasta la cena, se durmió muy pronto no te parece?
Samuel: Si, pero no me sorprende ya se había despertado desde muy temprano, y era lógico que a estar hora y después de todo lo que corrió y jugó sus energías se agotaran.
Andrea: Menos mal se divirtió.-dijo mirando a Samuel.-Bueno, se divirtieron porque tu también no la pasaste nada mal, yo te vi.
Samuel: ¿Y tu? Como la pasaste?
Andrea: Muy bien, para mi también fue algo muy lindo.
Samuel: ¿Muy bien del significado deseo volver a salir con ustedes, o del significado gracias por invitarme pero ya no quiero nada con ustedes dos?.-pregunto mirándola con sus ojos profundos y ella sonrió de una forma dulce.
Andrea: Muy bien, del significado deseo salir con ustedes de nuevo.-dijo tomando su mano y el sonrió.
Samuel: Eso me alegra, porque no será la única vez que te invitaremos a salir. Ahora a cenar.-dijo cuando las empleadas les pasaron los platos y Andrea asintió comenzando a comer.
Cuando por fin acabaron Samuel se despidió de Andrea y se dirigió al despacho para terminar el trabajo que tenia pendiente y ella subió a su habitación para comenzar a quitarse la ropa y ponerse algo más cómodo para dormir. Amaba estar con samuel y la forma en la que él la trataba.
La hacia sentir, única, especial, la hacia sentir como si ella fuera el más grande tesoro que un hombre podría obtener y cada vez se sentía más enamorada de él, tanto que ya ni siquiera le importaba lo que pudiera pasar con Armando.
Samuel por su parte estaba en el despacho, terminando de revisar y corregir el ultimo documento que Nancy le había enviado, se recargo sobre el respaldo de su asiento cuando por fin termino y se fijo en la hora, las 11:30 de la noche. Suspiro de cansancio y cerro sus ojos, mientras su cuerpo comenzaba a relajarse.
Andrea: ¿Samuel? Puedo pasar?-pregunto tocando la puerta y el se incorporo acomodándose en el asiento.
Samuel: Si, adelante.-dijo y ella abrió la puerta entrando.-¿Que se te ofrece?
Andrea: ¿Estas muy ocupado?
Samuel: No, de echo ya he terminado, te pasa algo?-pregunto levantándose y acercándose a ella, pero esta negó.
Andrea: No, es solo que como tenias cosas que hacer y te vi algo apurado ya no te pude platicar, y por más que lo intente no me puedo dormir, no puedo esperar hasta mañana para decirte la decisión que acabo de tomar.-dijo y Samuel frunció el ceño.-Samuel creo que tienes razón, no puedo estar con miedo toda mi vida y aunque me cuesta esto, estoy preparada para levantar cargos contra Armando, ahora que mis golpes aun no han desaparecido.
Samuel: Estas segura?-pregunto esbozando una sonrisa y tomándole el mentón para que ella lo mirara.
Andrea: Si estoy segura.
Samuel: Me da mucho gusto que hayas tomado esa decisión, ya veras que no te vas arrepentir, y te prometo que no te dejare sola.-dijo besando las manos de Andrea.
Andrea: A mi también me da gusto, y creo que ya es momento de comenzar una nueva vida, al lado de un hombre que verdaderamente me valore.-dijo mirando a Samuel y vio como su mirada cambio a una más profunda.-Samuel no se si lo que haces es solo por lastima o hay algo más pero te quiero, no me preguntes desde cuando pero así es.-le aseguro y lo tomo del cuello para besarlo con pasión...
