Liar © (CN #1)

Prólogo.

Estaba ordenando papeles nerviosamente mientras oía la puerta. Maldita sea, quién quiera que esté ahí fuera saltándose las clases para molestarme las pagaría.

Corrí con los papeles en la mano y abrí la puerta como pude, para encontrarme unos ojos grises y un cabello rojo detrás de ésta.

-¿Qué quieres, Castiel? -Pregunté mientras dejaba los papeles en la mesa para atender al pelirrojo.

Él no respondió, tan sólo se limitó a cerrar la puerta y dar lentos pasos hacia mí.

-Corren los rumores de que... -Castiel se detuvo justo frente a mí y me miró con una media sonrisa- ... la rubia está detrás de mí, ¿Es cierto?

Tragué saliva y lo miré. ¿Quién sería el estúpido que anda contando ese tipo de cosas?

-¿Yo detrás de ti? -Cuestioné para después soltar una risita.

Fruncí el ceño y lo miré invitándolo a que se callara. Él dio unos cuantos pasos más hacia mí, quedando ya bastante cerca de mi rostro. Yo mantuve mi compostura y lo miré esperando que dijera algo más.

-Vamos, es más fácil admitirlo, delegado. No te hagas el difícil -dijo, aproximando sus labios a mi oído. Su voz tembló de nuevo a mi alrededor- ... sólo quiero saber la verdad.

-Tengo mucho trabajo como para estas tonterías, Castiel -dije un poco más nervioso, él puso su mano en mi hombro provocándome un pequeño espasmo.

-Venga, si hasta te pone que te toque el hombro -dijo mientras reía, yo fruncí el ceño y lo empujé levemente haciendo que se echara hacia atrás.

-¿Podrías hacer el favor de dejar de decir estupideces? -Dije un poco más alterado, pero él soltó una pequeña risa y abrió la boca dispuesto a soltar otra tontería justo cuando la campana de las clases lo interrumpió.

Castiel cerró la boca frustrado y salió de la sala dando fuertes pisotones, yo suspiré aliviado y revisé mi trabajo mientras reía pensando en yo y el pelirrojo juntos; sería toda una locura.