Capítulo XXII.

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Luke tuvo que revisarse dos veces en el espejo antes de ir a recoger a Ellie del trabajo, sobre todo porque la primera vez que se dio una rápida mirada, se dio cuenta de que su camisa estaba desabrochada y que le faltaba el zapato izquierdo

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Luke tuvo que revisarse dos veces en el espejo antes de ir a recoger a Ellie del trabajo, sobre todo porque la primera vez que se dio una rápida mirada, se dio cuenta de que su camisa estaba desabrochada y que le faltaba el zapato izquierdo. No era una sorpresa que estuviera nervioso.

—Tranquilízate, Luke, soy yo la que debería estar haciéndose pis en sus pantalones ahora mismo —dijo la joven con una carcajada después de salir del teatro, pero entonces su rostro palideció y dejó de caminar.

—No pienses demasiado en ello, ¿sí? Estará bien.

—Sí, bien, estoy empezando a pensar que esta es tu venganza por esa noche que conociste a mi familia. No sé si lo has notado, pero cuando me pongo muy nerviosa empiezo a hablar hasta por los codos y mi voz alcanza niveles realmente rápidos de habla por segundo, así que deberíamos tener una palabra clave para cuando eso suceda, tal vez algo como «chocolate» o mejor «halcyon» porque el chocolate es demasiado fácil de aparecer como un tema de conversación con tu familia.

—Lo que sea que signifique esa palabra, está bien —se rió Luke.

—Significa que algo es pacífico, exactamente lo que necesito ser en este momento y oh mi Dios, la puerta está ahí —Ellie susurró eso como si estuviera en una película de terror, deteniendo su caminar de nuevo y haciendo que el muchacho parara también cuando ella puso su brazo en su pecho—. Está bien, está bien, sólo una última cosa: si empiezo a beber agua como si acabara de correr un maratón en el desierto, tómalo como una palabra clave silenciosa porque ese es el punto más alto de nerviosismo al que puedo llegar.

—Eso es una buena cosa a tener en cuenta... ¿Estás lista?

—Es curioso que me haya presentado delante de cientos de personas como si estuviera hablando del tiempo, pero ahora casi me estoy mordiendo las uñas a causa de tres personas. Ay, cielos, muy bien, hagamos esto. —El chico le dio una sonrisa mientras le apretaba el hombro y la condujo a través de la tienda.

La casa de los Clarkson estaba decorada por las fiestas, pero no tanto como el departamento de Ellie. A diferencia de la locura navideña en su piso, la casa tenía algunas decoraciones azules y blancas y algunas luces para celebrar la fiesta judía, luciendo no tan cálido, sino más bien sencillo y limpio. Lo que parecía bastante cálido, sin embargo, era la deliciosa comida que se podía oler de la mesa de comedor, esperando a que la invitada llegara a casa para empezar con la dichosa cena.

—¡Finalmente estás aquí! —Skeeter le saludó con un abrazo.

Luke se echó a reír. —Le estás asfixiando, prima.

La chica dejó de abrazarla con fuerza y sonrió disculpándose, pero luego la señora Clarkson mostró su rostro desde la cocina y saludó a la chica de los cabellos dorados mientras trataba de arreglar su ropa. Ella le dijo a Ellie que no se preocupara de nada cuando la chica le ofreció ayuda, pero le dijo a su sobrina, Aubrey, que trajera los vasos a la mesa y le dijera a su tío que bajara.

Halcyon.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora