Capítulo 12 ||DAVE||

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CAPÍTULO DOCE


- Catherine, ¿Ya estas lista? - bufo al escuchar, a Mauricio.

- Si, ahora bajo - grito, tomo mi M9 la coloco en mi cintura, tomo mi cartera y chamarra de cuero negro, me la coloco y salgo.
Bajo las escaleras, encontrando a Mauricio, con unos pantalones obscuros rotos de la rodilla, una camisa polo blanca, y una chamarra de cuero parecida a la mía, solo que en masculino.

El me sonríe, yo de igual manera le sonrió, al llegar pone su brazo encima de mi hombros.

- Por fin, ya iba a buscarte - sonrió y niego con la cabeza, busco a personas y no hay nadie lo miro al no encontrar a Amanda, miro a Mauricio en busca de respuestas este sonríe.
- Están en mi habitación, no te preocupes, vamos - me da una sonrisa de medio lado mientras me jala de el brazo, suelto un suspiro y salgo de la casa seguida de el.

Mi vista se topa con un Ferrari negro mate, con los cristales obscuros. Levanto una ceja al ver el carro, miro a Mauricio el cual sonríe - Lo compre apenas esta mañana, se que te gusta este tipo de carros así que bueno - lo veo encogerse de hombros, mientras me sonríe - Espero que haya sido de tu dinero - espeto con burla, el borra su sonrisa y me mira serio - En efecto, ese carro lo compre con mi dinero, no tomaría dinero tuyo jamas -

Pongo los ojos en blanco puesto que se que jamás tocara mi dinero a menos que yo lo pida, suelto una risa, me acerco a el dejando un casto beso en sus labios -Lo se, y me encanta - susurro en sus labios, veo como las comisuras de sus labios se elevan formando una sonrisa, mostrando sus hoyuelos.

Ambos nos montamos a el carro, es demasiado cómodo y lujoso, recuesto mi cuerpo en el asiento tomando una posición cómoda, el pone musica, Du hast de Rammstein empieza a sonar, yo grito y empiezo a cantarla al igual que Mauricio, es la banda que a ambos nos gusta.

El transcurso se hace largo, el carro retumba con la musica a todo volumen que se escucha, ambos nos reímos, el no me a querido decir a donde iremos como chicos "normales".

El coche para, minutos después, estamos en un parque de diversiones, ambos bajamos de el coche después de que se haya estacionado, llegamos a la entrada un chico se encuentra parado en la entrada mientras más nos acercamos puedo notar que el chico es alto y rubio. Al llegar el me observa de pies a cabeza, yo sonrió en su dirección.
Mauricio lo nota, veo como frunce el ceño y aprieta con fuerza los puños dejando ver como sus nudillos se ponen en blanco, se acerca a pasos amenazantes a el chico y lo estampa en la pared ahorcándolo con su brazo.

- Escucha con suma atención, amigo, esa chica a la que le haz sonreído es mía, y no me agrado ni una mierda como la as observado, a si que la vuelves a ver y te saco los ojos y te meto diez balas en el cráneo - El chico lo ve completamente aterrado, su mirada se posa en mi, yo solo sonrió y levanto mis hombros, me dirijo a ellos tomo de la mano a Mauricio para después adentrarnos a el parque de diversiones.

- Que celoso - canturreo mientras lo observo, el me observa sonriente, se encoje de hombros - Soy celoso solo, con lo que me pertenece - suelto una carcajada, mientras sigo caminando.

- Es bueno saberlo - susurro, solo para mi, seguimos caminando barios puestos de comida rápida, y de juegos, la musica que se encuentra a todo volumen, veo la montaña rusa, sonrió de oreja a oreja jalo el brazo de Mauricio asta la fila, escucho su risa, llegamos a la fila esta esta demasiado larga suelto un bufido y pongo los ojos en blanco.

Observo a Mauricio, este tiene una sonrisa malvada mirando a una pareja que se encuentra en primera fila. Mauricio me jala de el brazo asta llegar asta la pareja, una rubia, con demasiado maquillaje un top rosa que dudo tape algo de piel, unos shorts blancos con unos tacones más altos de los que uso.

LA ÚLTIMA GREEN. (EN EDICIÓN)Where stories live. Discover now