Capítulo 21 || ¿QUIEN SOY? ||

2.8K 183 1
                                    


[CAPÍTULO SIN EDITAR]

El capítulo se encuentra sin editar, me disculpo por cualquier error ortográfico, al terminar esta novela se encontrará editando y arreglando esos errores, si no es mucha molestia me ayudarías demasiado marcar donde están los errores. ❤



_________________________________

V.R ♐🌹

CAPÍTULO VEINTIUNO

Enojo...
Esto era lo único que sentía al ver su rostro tan malditamente tranquilo, una sonrisa se forma en sus labios, yo fingida mente se la devuelvo - ¿Ocurre algo? Hoy estas más seria de lo normal - habla llevando un bocado de comida a su boca, todos me observan sonrió sínica y niego con la cabeza. - Todo está perfectamente - hablo de una manera sínica y amenazadora, todos lo notan genuinamente.

-Mañana te toca ir por los víveres - digo secamente, mentalmente ya me imagino su respuesta - ¡¿Qué?! ¿No puedes ir tu? Tengo cosas que hacer - habla rápido mira a todos lados, su rostro se vuelve rojo, en mi mente tomo aquella cuchara y se la encajo asta en lo más profundo de su cabeza.

Azoto mis manos en la mesa haciendo que todos den un brinco en su lugar, Artemis empieza a llorar inmediatamente lo tomo y salgo de el lugar. Me dirijo a el estacionamiento privado de la casa, tomo el carro más cercano, uno completamente protegido, de alguna forma tengo que tener protegido a mi hijo.

Conduzco con cuidado, no se a donde demonios voy, pero lo menos que quiero hacer es estar con esos malditos farsantes, suelto un suspiro lleno de rencor y fastidió, escucho como el pequeño ríe mientras agita su peluche, sacando una sonrisa de mi parte, un semáforo en rojo me da tiempo de observar a el pequeño de ojos verdes en el asiento trasero de el auto en su porta bebés completamente asegurado, el semáforo cambia y atracón.

Llegamos a un pequeño parque solitario, donde algunas mujeres pasean a sus hijos tranquilamente, con Artemis en brazos camino hacia los columpios sentandome en unos de ellos junto con Artemis, empujando levemente, el niño suelta un bostezo y se talla sus ojos, se empieza a poner de una manera cómoda, niego con la cabeza pues apenas acabamos de llegar y el ya se está durmiendo, lo pongo de una manera cómoda para que pueda dormir y me empujó levemente con el en brazos en el columpio.

No se cuanto tiempo a pasado desde que estoy en los columpios pero mi trasero empieza a doler, así que simplemente me levanto y empiezo a caminar por todo el parque con Artemis en mis brazos, una brisa llega directamente hacia nosotros, enseguida con dificultades quito mi chaqueta y lo cubrí, es entonces donde veo como un flash sale disparado, me detengo en seco y empiezo a mirar hacia todos lados, asta que lo encuentro tras un árbol a unos cuantos metros lejos de nosotros, aprieto mis dientes con fuerza y camino rápidamente hacia el carro. Lo encuentro con facilidad y no dudo ni un segundo en poner a Artemis en su porta bebés cobijado su pequeño cuerpo para que no le de frío en ningún momento, apagando la calefacción arranco, no sin antes sacar mi dedo corazón y mostrárselo a el imbécil que estás tomando fotos ya sin importar que lo vea.

Doy vueltas por toda la ciudad, perdiendo el tiempo, veo como Artemis empieza a querer despertar así que simplemente y resignada me dirijo a la casa.
Al irme acercando a esta, música a todo volumen se empieza a acercar, mis puños se aprietan cada vez más que me voz acercando, pues el ruido se hace más intenso mientras me voy acercando a mi maldita casa, y efectivamente luces de colores música a todo volumen sale de mi casa, miro hacia Artemis quien ya esta despierto, su mirada curiosa hace que me relaje un poco ante esta situación, salgo de el auto tomando enseguida a Artemis quien aplaude y ríe con las luces que esta observando, al entras el olor a mariguana y alcohol se hace presente haciendo que mi mandíbula se tense al igual que todo mi cuerpo.

No resisto más y saco mi arma, la cual sin más preámbulo es disparada tres veces, todos gritan y la música calma enseguida al igual que las luces de colores son sustituidas por las normales, Mauricio llega alarmado enseguida a el lugar con el cabello alborotado al igual que sus hermanos, o sea lo que sean de el - Catherine, p-pense q-que llegarías más tarde - habla en un tartamudeo mientras me observa, mi rostro está completamente muerto sin ninguna expresión en el. - Los quiero fuera a todos de mi casa ¡AHORA! - grito fuerte y claro, algunos obedecen enseguida, saliendo de mi casa, adolescentes de mi misma edad y asta adultos mayores se encuentran acá, sobando mi cabeza Amanda se acerca a paso lento y me pide a el niño, el cual le entrego enseguida pero entonces pasa, muchos se quedan mirando aun pero no falta la chica que se quiere creer superior a todos y habla.

- ¿Y quien eres tu para echarnos de una casa que no es tuya? - Una chica de cabello rosa pastel sale de la oscuridad, mirándome desafiante con una sonrisa burlona, mi paciencia se agota.

- ¿Quien soy yo? - recalcó con enojo mientras doy un paso hacia ella, el temor ahora se nota en su mirada pero ella misma ahora sabe que ya no se puede echar para atrás de ninguna manera, jamas la dejaría yo. No espero ni un segundo, pues mi puño impacta sobre su rostro tirando su escuálido cuerpo inmediatamente a el suelo, un grito sale de su asquerosa boca, no dejó que si quiera respire pues la tomó de su teñido cabello y la arrastro asta fuera de mi casa, sus gritos ni sus rasguños hacia mis manos me detienen, la llevo asta afuera de la casa, al llegar le propinó más golpes duros y directos a su rostro, es entonces donde veo una botella de tequila vacía y sin pensarlo mi una sola vez la estrelló en el suelo a unos centímetros de ella.

Dejando el filo en su rostro, esta completamente aterrada, mi rostro apuesto que esta echando fuego por donde quiera así que acabo con las cosas y hablo de una buena vez - Soy Catherine Green, vuelve a pisar mi casa y date por muerta - susurro cerca de su oído para después alejarme y mirar a todos los espectadores.

- ¡Y LO MISMO VA PARA TODOS! ¡LARGO DE MI MALDITA CASA! - grito furiosa, todos sin excepción alguna salen corriendo, de mi casa, unos chicos se llevan a la teñida, Mauricio solo me observa, esta apunto de hablar pero mi puño se lo impide. - Vuelve a hacer algo sin mi maldita autorización y te meteré una maldita bala por la cabeza, a ti y a todo aquel que te acompañe - digo amenazante mientras entro quitándole a Amanda a el niño y subir a mi habitación.





.

°
°
°
°
°
°>>>>>

°°°°°°>>>>>

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
LA ÚLTIMA GREEN. (EN EDICIÓN)Where stories live. Discover now