»2: ¿Novia?«

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El timbre para salir a nuestro pequeño descanso sonó. Valentina y yo nos apresuramos a salir para ganar una mesa de la cafetería. Así era siempre, si alguien ganaba cualquier mesa, ahora le pertenecía a ese pequeño grupo durante el año. A lo lejos vimos a nuestra otra mejor amiga; Oriana.

-¡Hola monstruos! -Ese era nuestro apodo cariñoso de su parte, ¿por qué? No lo sé.- ¿Cómo les fue en sus vacaciones?

La abrazamos y después nos pusimos a caminar hacia la cafetería. Aunque Oriana era de mis mejores y únicas amigas, no me atrevía a contarle acerca de Lina y desconocía la razón, tal vez tenía miedo de que ella fuera a contarle a alguien más, aunque tampoco es que Oriana fuese una chica chismosa. Algún día le contaría; o esperaba hacerlo.

-Súper, mis padres y yo viajamos durante una semana a Florida. -Comentó alegre la rubia.

-Yo no hice nada productivo. Sólo fui a las cabañas de Canadá con mis padres. -Me encogí de hombros.- ¿Y tú?

-Uy, yo no salí a ningún lado, pero estuve saliendo como en unas "citas" -Habló Oriana haciendo comillas con sus dedos en la palabra citas.- con Julián.

Se sonrojó y Valentina y yo comenzamos a reírnos de lo tierna que era Oriana.

-¿Y nada más pasó eso? -Preguntó Valentina sonriente.

-Pues hubo besos, pero solo eso. Él nunca trató de sobrepasarse conmigo y fue demasiado tierno. -Mordió su labio inferior sonriente.

Entramos a la cafetería y encontramos una mesa vacía a la mitad de ese lugar. Aunque no era la única, decidimos sentarnos las tres ahí.

-Me alegro muchísimo de que por fin puedas estar con tu chico soñado, Ori. -Comenté feliz por ella.

Las tres moríamos por el grupo de los tres chicos más guapos de la universidad; Agustín, Michael y Julián.
Y era tan cliché, pero jamás nos hicimos ver tan obvias para ellos, no, siempre tratábamos de disimularlo lo mejor que podíamos.

-Hola, chicas. -Me giré para ver a Julián Serrano sonriente. Las mejillas de Oriana estaban como un tomate, pero estaba sonriendo.- ¿Les molesta si me siento junto a mi chica?

¿Su chica? Oh, Oriana. Definitivamente iban en serio.

-Por supuesto que no, de cualquier manera nosotras íbamos por comida. -Dijo Valentina poniéndose de pie y jalándome hacia los puestos de comida.- Me da envidia que Oriana ya haya podido estar con Julián, ¿sabes?, Pero también me siento demasiado feliz.

Valentina hizo un mohín.

-Si, ella lo merece. -Dije mientras veía a Oriana y Julián hablando animadamente.- Hay que hablarles, Valu. -Seguí hablando mientras buscaba con la mirada a Agustín y a Michael que, justamente, se dirigían a una de las primeras mesas de la cafetería.- Tú a Michael y yo a... -No pude completar por que Agustín se estaba besando con Malena Ratner.

Se estaban besando en un lugar público.

Lo que significaba que...

Eran novios.

-Carolina... -Valentina me jaló del brazo para que me diera la vuelta y dejara de ver aquella imagen que jamás podría olvidar.

Una presión en mi pecho se instaló y juro que queria llorar como una niña, no, como un bebé.

-¿Valentina? -Una voz masculina nos hizo girarnos para ver de quien se trataba. Frente a nosotras estaba otro chico guapo y prohibido. Michael Ronda. Valentina soltó un pequeño jadeo.- Emm, hola. -Michael sonrió tímidamente y pude ver la risa boba de mi mejor amiga.

-Hola, Michael. -Le hice una seña a Valentina que los dejaba.- No, espera, ¿estás bien? Yo me ofrezco a matarlo.

Michael frunció el ceño y yo solo asentí y negué.

-No, dejalo. Los dejo un rato. -Sonreí y salí de la cafetería.

Llegué a la explanada de la universidad y solté un suspiro de estrés y dolor.
Me sentía realmente decepcionada por no ser ni la mínima atención de Agustín. Era estúpido vagar su amor y atención, pero sé que cuando él estaba de novio, era demasiado tierno y caballeroso. Bueno, solo lo ví una vez de novio, solo duraron tres meses; la tipa afirmaba que Agustín le había sido infiel con Malena.

Y ahora eran novios.

Seguro que Agustín realmente quería estar con ella.

Ufff, este día no iba mejorando como se supone que debía.

De pronto siento que alguien le empuja, pero antes de tocar el suelo, esa misma persona me sujeta de la cintura girándome para verle. Wow.

-Yo... Lo lamento, no te he visto. -Un chico de cabello rizado y con un raro acento, pero hermosos ojos, es el causante de mi casi abrazo al suelo.- Me llamo Jorge.

Me ayuda a ponerme recta y me tiende su mano. Yo le sonrío y tomo su mano en forma de saludo. Él también sonreí. Muy atractivo.

-Soy Carolina, ¿eres nuevo? -Preguntó luego de haber soltado su mano.

-Si, estudiaré mi último año de ingeniería aquí. -Como Agustín, pensé. Sacudí mi cabeza para sacarlo unos minutos de mi cabeza.- ¿Tú estudias aquí?

-Sí, estudio el último grado de psicología. -Él asintió y el timbre sonó finalizando el descanso.- Vale, ¿ya sabes dónde está tu salón?

-Si, de hecho venía de la oficina donde me dijeron que salón era y donde se encontraba. -Sonrió.

-Bueno, nos vemos luego, ¿te parece? -Él asintió animadamente.

-Por supuesto, Carolina, me encantó haberte conocido. -Sonreí a lo grande. Que tierno. -Hasta luego.

-Adiós.

Me quede unos segundos más parada ahí. Jorge era atractivo y se veía demasiado tierno.

Y Agustín volvió a mi mente.

¿Qué me hiciste, Agustín? Te pienso como una loca.

-¡Carolina! ¿Qué haces allí? ¡Hay que entrar ahora! -La voz de mi rubia amiga me sacó de mi pérdida entre mis pensamientos; así que pronto corrí hacia ella para irnos a el salón de nuestra próxima clase.

Pero Agustín no salió de mi mente. Como era de esperarse.

Segundo capítulo, espero les este gustando.😛
Lo hago con mucho amor💖 Baaaaai angelitos.💛

- A.A.M. -🌼

Lina • Aguslina.Where stories live. Discover now