»20. Sorpresa«

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La cara de Michael era puro asombro y preocupación. Los tres nos quedamos mirándonos entre sí y muy quietos. Podía sentirse el ambiente tenso e incómodo. No sabía que iba a decirle a él, Mike es una persona en la que puedo confiar y sé que puede apoyarme, pero eso significa ocultarle mi mayor secreto a quien es como su hermano, Agustín.

Pero tenía que decirle, postrarme de rodillas y rogarle que no le contará nada.

Le vendo a Valentina si es necesario.

-Tú... Tú eres... Eres Lina... -La voz tartamudeante de Mike casi me hace reír, pero era serio. ¿Acaso no podría ser más cuidadosa? A este paso, Agustín lo va a saber a más tardar mañana.

-Valu cierra la puerta. -Valentina por fin de movió y cerro la puerta, esta vez, con seguro. Mike aún seguía viéndome sorprendido, y un poco ¿molesto?

-Agustín no lo sabe. -No era pregunta, era afirmación. Suspiré resignada y negué con la cabeza.- Son novios, Carolina, ¿por qué no se lo has dicho?

-Bueno, apenas hoy empezamos la relación -Él me miró con ironía.- Nadie lo sabe aparte de Valentina, Mike; bueno si, Jorge también.

Murmuré despacio lo último y pude ver como su rostro se tornaba más molesto. Valentina también me miraba asombrada.

-¿Lo sabe el imbécil de López y no Agustín? ¿Qué carajo, Carolina? -La rubia se sujetó a su brazo para calmarle. Luego volvieron a dirigir su atención a mí.

-¡Fue un accidente! Él me vio entrar por la puerta trasera y se cayó mi peluca. Tuve que decirle y rogarle por que no le digiera a nadie más. Él aceptó y es todo. No planeaba que estos sucediera. -Él se llevó sus manos a su cabello y bufo estresado.

-¿Por esto lo dejaste? -Asentí mordiéndome el labio inferior.- Le mentiste y aparte le ocultas quien eres. Va a estar furioso cuando le diga sobre esto.

-¡No, Mike, por favor! No puedes decirle. -Él me fulminó con su mirada castaña.

-¿Planeas que sea parte de tus mentiras y secretos, Carolina? Agustín es mi mejor amigo. -Una opresión se instaló en mi pecho y las lágrimas querían salir a flote.

-Lo sé, Mike. -Bajé la mirada.- Solo quiero que me des tiempo para armarme de valor y decirle por mí misma. -Volví a mirarle y él desvío la mirada hacia su novia. Ella asintió.

-Esto es sobre ella y Agus, no puedes interferir tú, Mikey. -Le susurró con voz suave. Durante unos segundos él no dijo, nada, pero luego suspiró y asintió.

-Esto no puede durar tanto, Carolina. Si una relación inicia mal, termina peor. -Asentí efusivamente.

-No será mucho, lo prometo. -Mike sujetó de la mano a Valentina.

-Yo solía venía a buscarla y mira con tremendo caos que me voy a llevar. -Ambas reímos.- ¿No piensas verlo ahora? Esta decaído, Caro, ni siquiera quiso ir a la fiesta.

Tomé una respiración profunda y asentí.

-Díganle que le tienen una sorpresa por la puerta trasera del bar, que él vaya sólo. Yo estaré ahí, en 10 minutos.

Los dos asintieron, Valentina tomó mi bolsa donde venia el maquillaje, los zapatos y salieron, pero antes llamé a Mike.

-¡Michael! -Él se giró para verme.- Gracias, en serio.

Hizo una sonrisa con la boca cerrada y salió.

Me senté en la silla de mi peinador y golpeé la mesa. Eres una mentirosa, lo vas a perder. La conciencia me estaba matando, tenía que hacer esto lo antes posible.

No quiero perderlo, no ahora que por fin lo tengo.

Me quité el vestido y limpié mi rostro. Me quité los pupilentes y me coloqué mis lentes. Me cambie rápidamente y salí hacia la puerta trasera.

Justo cuando salí escuche la voz de Agustín y solo con eso, sentí los nervios comerme. Estaba muy emocionada.

Agustín dio la vuelta y se detuvo abruptamente cuando mis ojos y los suyos se encontraron. Llevé mis manos a los bolsillos traseros de mi pantalón de mezclilla, claro está, que aún traía la blusa rosa con su número y apellido, sólo que traía una chaqueta negra sobre esta.

Él iba con un pantalón negro, camisa azul marino y una chaqueta negra de cuero. Guapo, como siempre.

-Hola, Agustín. -Murmuré un poco tímida. Tontos nervios.

-Hola, Kope.

Él sonrió y extendió sus brazos, invitándome a abrazarle. Mi sonrisa creció y corrí hacia él, lanzándome a sus brazos para abrazarle fuertemente.

-Te necesitaba aquí conmigo. -Murmuró en mi oído. Me separé de él para ver esos ojos castaños que tanto me encantaban.

-Y yo a ti. -Junté mis labios con los de él, besándole suavemente, haciéndole saber que lo quería.

-¿Y mi suegra? -Preguntó al separarnos. Upss, olvide eso. Me reí nerviosamente y miré hacia otro lado.

-Se quedó dormida y pues... Vine aquí para verte y decirte, -Cambiándole ek tema, esta vez lo miré a sus ojos, él mantenía sus manos en mi cintura.- Muchas felicidades, cariño, has jugado muy bien y me encantó verte en ese uniforme.

Su sonrisa se amplió y me besó de nuevo.

-Lo hice por ti, quería darte orgullo, bonita. -Su mano derecha acarició suavemente mi mejilla.

-Apesar de que no hubieras ganado yo estaría orgullosa de ti. -Llevé mis manos a su pecho, acariciándole.

-No sabes cuanta felicidad me da que seas mi novia, me encantas.

-Me encantas más. -Le besé cortamente y luego, tomados de la mano nos dirigimos hacia mi coche.- ¿No viniste en tu moto?

-Venimos en la camioneta de Oriana, creo que se han dirigido hacia la fiesta, no quisieron dejarme solo y me acompañaron al bar. -Se rascó la nuca nerviosamente. Me detuve, haciendo que él también se detuviera.

-¿Por qué viniste aquí? Creí que irías a la fiesta para festejar junto a tu equipo. -Él se mordió su labio.

-Bueno, quería ir allá y divertirme contigo, quería estar contigo celebrando. -Su mirada denotaba tristeza.- Cuando me dijiste que no ibas a ir, no le ví el caso, así que quise venir a escuchar a Lina, ella me tranquiliza. -Valu tenía razón. Merezco su odio por ser tan cruel con él, sobretodo por su sinceridad. Sonreí coqueta.

-¿Debería ponerme celosa? -Intenté aligerar su nerviosismo, él sonrió.

-Tal vez... -Colocó sus manos en mi cintura para acercarnos. Reí.- No, no deberías, tú eres la única a la que quiero.

Le besé fugazmente.

-¿Quieres ir a la fiesta aún?

-¿Tú quieres? -Asentí, sé que él quería ir.-Entonces vamos, bonita.

Y así, con la conciencia gritándome que le dijera la verdad, nos dirigimos hacia mi coche para ir a la fiesta.

Pero yo no me atreví a decirle.

- Anhel.🌻

Lina • Aguslina.Where stories live. Discover now