»35. Sorpresa, sorpresa...«

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MARATÓN 2/3


Carolina.

Después de que la puerta se cierra me vuelvo hacia Jorge, quien mira hacia la puerta de manera recelosa. Suspiro.

-No debiste golpearlo, Jorge. -Me crucé de brazos, respirando el olor masculino de Agustín en su chaqueta de manera despistada. Jorge soltó un suspiro.

-No voy a disculparme por eso, Carolina, se lo merecía.

-Claro, entonces golpéame a mí también que me lo merezco. -Me encamino hacia mi habitación. Necesito cambiarme, me siento incómoda con esta ropa frente a él.

-Carolina... -Me sujeta del brazo cuando paso junto a él. -No te merece, lo sabes.

Mi corazón se estruja.

-Te equivocas, yo tampoco lo merezco, pero ambos nos queremos, Jorge y eso lo puede todo. -Me zafo suavemente de su agarre, al llegar a mi habitación suelto un suspiro.

Demasiadas emociones por un día. Me quito la chaqueta de Agustín y la pongo sobre mi cama. Me quito la blusa de tirantes que Agus rompió y me pongo un suéter amarillo suelto, también me quito el pequeño short y me pongo un pantalón de mezclilla. Me arreglo en cabello en otra coleta y antes de salir, pienso en volver a ponerme la chaqueta de Agustín, pero no lo hago. Solo la huelo una vez más y sonriente, salgo hacia donde Jorge, quien ya recogió las bolsas y comenzó a sacar las cosas y ponerlas en el mesón de mi cocina.

- ¿Quieres ver alguna película? Traje varias. -Asiento y él me pasa algunas en cd. Comienzo a verlas y me pincha el pecho cuando me topo con la película "El origen del planeta de los simios".

Mis ojos se llenan de lágrimas al recordar que es la película favorita mía y de mis mejores amigas, o bueno, tal vez ya no mejores amigas. La vimos un día que estábamos haciendo pijamada y no encontrábamos nada bueno en la televisión. Quedamos fascinadas por la valentía y tenacidad de Cesar, siempre que quedábamos en pijamadas poníamos cada una de las películas que circulaba a esta. Llorábamos y nos abrazábamos. Cierro mis ojos y dejo aquella película a un lado.

- ¿Qué sucede, Caro? -Jorge me saca de mis pensamientos y solo niego con la cabeza.

Le muestro la película. Él deja de picar la fruta.

-Es nuestra favorita... -Susurro.

- ¿Tuya y de Agustín? -Frunce el ceño y lo dice de mala gana.

-No, de Valentina, Oriana y mía. -De tan solo pronunciar sus nombres, me provocan un vacío en el pecho. -Las extraño tanto...

Mi voz se corta al final y Jorge deja el cuchillo se le da vuelta al mesón para llegar hasta mí y abrazarme. Dejo que algunas lágrimas corran y mojen su camiseta, él solo se dedica a darle caricias a mi espalda.

-Ya hablaras con ellas. -Asiento y sorbo algunos mocos. -Venga, vamos a relajarnos y ver muchas películas.

Se separa de mí y limpia algunas lágrimas, Sus manos se quedan en mis mejillas, yo coloco sus manos en sus muñecas y ambos nos miramos a los ojos por unos segundos, hasta que baja su cabeza hacia la mía, me separo de él por la incómodo que empieza a tornarse. Me aclaro la garganta y agarro algunos platos con frituras y un vaso de refresco para dirigirme hacia el sillón y colocar cualquier película. Necesito distraerme de lo que estaba a punto de suceder.

-Hay que ver la de 12 horas para sobrevivir. -Me siento en el sillón individual y pongo las cosas en la mesita de la sala. Miro hacia Jorge y él solo asiente perdido en sus pensamientos.

Agarra el tazón de la fruta y su vaso con refresco y se sienta en el sillón para tres. Coloca la película y comenzamos a verla en silencio, solo llegamos a comentar algunas cosas sobre la película.




Cuando la película termina, ambos hemos olvidado el acontecimiento anterior a la película, hasta nos sentamos juntos y disfrutamos de otras tres películas de terror, comedia y ciencia y ficción. Decidimos preparar la cena y luego comentamos acerca de lo que nos parece o no sobre las películas y es agradable coincidir en algunas cosas que nos parecen o no. Lo voy conociendo aún más y él a mí.

De pronto es hora de que Jorge se vaya. Y de que Agustín, aún no me mande un mensaje. Así que tomo la iniciativa yo, y le escribo un mensaje por whatsapp:

"¿Si vas a venir esta noche? Ya te extraño"

El mensaje le llega pronto, así que me salgo y me acerco a Jorge que está en la puerta preparándose para irse. Él me sonríe y yo le devuelvo el gesto, justo en ese momento mi celular vibra en mi bolsillo del pantalón. Lo sacó y leo el mensaje que me ha llegado, de Agustín.

"Lo siento, preciosa, no podré ir hoy. Nos vemos mañana, te amo"

Hago un puchero y contesto.

"Vale, te amo también."

Veo a Jorge y él distingue la decepción en mis ojos, se acerca a mí coloca una mano en mi mejilla, acariciándola.

-Eres tan hermosa para llorar, Carolina. -Me quedo quieta y lo miro a los ojos. -Pareces un pequeño angelito y quisiera meterte en una caja para que nadie más te lastimara porque no lo mereces, mereces el mundo entero y no te das cuenta. -Contengo la respiración. -Quisiera ser todo tu mundo, así como tú lo eres para mí.

Quiero separarme porque me estoy sintiendo incómoda, sé lo que está a punto de hacer y no quiero herirlo por falsas ilusiones. Sin embargo, él no me deja alejarme, me sujeta de la cintura y su otra mano va a mi nuca.

-Estoy muy enamorado de ti, Carolina...

Y sus labios chocan con los míos en un suave beso, mis ojos se abren ante la sorpresa de su confesión y su acción. No le respondo al beso, pero tampoco me alejo debido a que estoy atónita. Él se aleja de mí lentamente y lame sus labios, su boca se abre para decir algo, pero otra voz que me pone los pelos de punta, lo interrumpe.

-Que buena imagen dan.

Ambos giramos la cabeza para ver a Agustín, con un ramo de rosas blancas y rojas, mirándonos.

¡NO ME ODIEN!:(

No podré subir hoy el tercer capítulo del maratón, lo siento, pero mañana sin falta lo hago. ES UNA PROMESA.💛💛

LAS AMOOOOOO MUCHÍSIMO. Espero el amor sea mutuo.🐥💕

Buen día.

- Anhel.🌻

Lina • Aguslina.Where stories live. Discover now