ㅡ¿Con quién haz estado saliendo?ㅡHyunjin elevó sus cejas para después bajarlas y hacer éso repetidas veces sin desviar su mirada de su mejor amigo.
Era un viernes por la mañana donde Félix había sido despierto a las nueve gracias a su amigo que había entrado a su casa debido a las llaves que se mantenían siempre debajo de la alfrombra de la entrada. El rubio sólo quería tirar una de sus almohadas por sobre su cabeza pero de ser así éste las evitaría para luego tirarlas aún más fuerte en contra de él.
ㅡ¡Sólo déjame dormir!ㅡgritó tapando ambas orejas con cada almohada que se encontraba en su cama. Sin embargo, no sirvió de mucho ya que Hyunjin había depositado todo su peso corporal sobre el cuerpo del menor.ㅡ¡Hyung!ㅡchilló.
ㅡ¡No saldré hasta que mi mejor amigo me cuente quién es su nuevo novio del que Emily estaba hablando en la sala!ㅡgritó de vuelta, comenzando así a hacerle cosquillas provocando que se desesperara y aceptara con contar la verdad.
Se acomodó en la cama, sentándose con su espalda apoyada en algunas almohadas detrás de ella. Frotó su cabello y talló uno de sus ojos para comenzar finalmente a contar.
ㅡSu nombre es Changbin... l-lo encontré en el funeral de mi padre. Bueno, él me encontró a míㅡsonrió nostálgico, ahí Hyunjin pensó que había metido la pata y pensó en cómo cambiar el tema más rápidamente.
ㅡ¿Harás algo a la noche?ㅡdijo lo primero que se cruzó por su mente, y esa mueca de tristeza cambió a una de suma felicidad.ㅡVeo que el señor Lee tiene planes con su novio ésta noche. ¿Acción?
ㅡ¡Hyunjin!ㅡgritó tapando su rostro con una de las suaves almohadas en color crema que se encontraban desparramadas por toda la cama.
ㅡYa, lo sientoㅡse disculpó.
ㅡTendrá una fiesta en su casa, creo que me servirá para... hacer más amigosㅡle miró de reojo esperando su reacción tras la última palabra, notó como sus labios se ponían en forma de O totalmente indignado tras ello.
ㅡMe voyㅡfingió tomando su mochila que estaba tirada en el piso de alfombra de la habitación, Félix saltó de la cama y abrazarlo desde su cuello para así lanzarlo a la cama.ㅡNo quiero ser tu novio, rubio.
El menor rápidamente lo soltó fingiendo asco, pero al final ambos acabaron riendo por el montón de estupideces que podían llegar a hacer juntos y aburridos. Eran impresionantes, la madre de Félix tenía capturado videos de ambos haciendo travesuras desde pequeños o haciendo una que otra broma a las hermanas del rubio sobretodo mientras era de noche para espantarlas hasta que lloraran.
La puerta fue tocada levemente antes de que se abriera por completo revelando a Sunhee con una bandeja de metal repleta de comida entre sus huesudas y venosas manos, Hyunjin inmediatamente se levantó a ayudarle para que no siguiera haciendo tanta fuerza por su cuenta y así mismo reposar e irse a dormir o descansar al menos unos cortos minutos.
ㅡNo debió preocuparse, mí niñoㅡsonrió pellizcando no tan fuerte sus mejillas, y éste le sonrió mientras le daba un corto abrazo por los hombros cariñosamente.
ㅡ¡Cómo no si usted nos ha cuidado desde que Félix y yo somos niños, dos pulgas que iban de aquí hacia allá!ㅡle sonrió encantado con ella, era como una abuela más para ellos dos. El cariño hacia ella era inmenso.
ㅡBueno está bien, pero bien terribles que salieron ustedes dos hehㅡexageró provocando que los jóvenes rieran y Sunhee saliera con una sonrisa plasmada en su rostro.
Los dos se sentaron más cómodamente en la cama para comenzar a deborar lo que la cocinera particular había cocinado por ambos, era un desayuno contundente y exquisito además de lo nutritivo que resultaba ser. La boca de Félix se había hecho agua tan sólo con mirar de lejos la comida, y para qué hablar de Hyunjin que era quién más comía de los dos.
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Eran las ocho con veinte y Félix en dónde se encontraba exactamente, sólo sabía que era uno de los condominios más caros descontando el en dónde el rubio vivía. Quedaba a no más de diez minutos de su casa en auto, cuando en realidad él pensaba que sería incluso más lejos.
Fue mirando los números de las casas, esperanzado de encontrar una con el número 1219 en ella pero nada aparecía. Sin embargo, supuso que estaba cerca cuando un poco más lejos pudo escuchar música bastante fuerte para su gusto así que apresuró su paso hacia allí. No quedaba tanto, al menos no más de diez casas para poder encontrarse finalmente con Changbin que no dejaba de mandarle mensajes preguntándole en dónde se encontraba.
Una vez que se encontró con todo el escándalo y tumulto de gente inclusive en el patio delantero de la casa, suspiró haciéndose paso entre cada persona que se cruzaba por su camino para dirigirse finalmente hacia el interior. Había bastante licor, cigarros y gente borracha por doquier mientras que el reloj ni siquiera marcaba las nueve de las noche todavía. No negaría que no estaba asustado, no estaba acostumbrado a ver tanta gente en aquél estado así que entre los nervios y desesperación buscó con sus ojos entre todo el público presente.
ㅡTe encontréㅡChangbin sonrió sorpresivamente frente a su ya nuevo amigo, el corazón de Félix casi se detiene del susto provocado y puso una mano en su pecho intentando calmarse.ㅡNo te mueras tú también.
Se ganó una mirada mortal por parte del rubio, y entonces Changbin notó lo estúpido que había sido mencionar ello.
ㅡNo creas que yo bebo también, ni siquiera he fumado un cigarro en toda mi vidaㅡse apresuró en decir antes de que Félix llenara su cabeza de malos entendidos y creyera que no era un chico de bien.
ㅡTampoco creí que lo hacíasㅡrió por fin mirándole cuando su corazón se calmó finalmente. Entonces se fijó en lo guapo que lucía, sobretodo con ésa chaqueta de cuero que le hacía ver tan rudo.
