Ruin (Jack Avery)

81.

Narra Jack.

Me desperté, vi el techo blanco de mi habitación y me quede pensando.
No había podido dormir bien, los nervios me comían vivo, talle mis ojos y me senté en la cama.

Pues se llegó el día.

Baje a la cocina y me preparé un desayuno rápido. Calenté waffles y me hice una malteada. Me sentía extraño, pero no lo puedo describir.
Después de desayunar subí nuevamente y me metí a la ducha.
Me deshice de mi ropa y abrí la regadera, toque el agua y entre hasta que estaba tibia.
Permanecí ahí por un gran rato, trate de relajarme lo más que pude. Hoy es un día muy especial.

Cuando salí, me enrrolle una toalla en la cintura y fui a mirarme al espejo. Hoy tenía que verme mejor que nunca.

Me puse unos boxers y me acosté en mi cama. Me estaba imaginando lo que estaba por venir, cerré mis ojos y comencé a imaginar cómo sería mi vida de ahora en adelante, despertar todos los días y ver al amor de mi vida descansando en mi pecho, las tardes de películas que haríamos en nuestros días libres, el chocolate caliente que beberíamos mientras lloviera, y todas las noches en las que estaríamos juntos.
Es increíble cómo conoces a una persona y te das cuenta que están hechos para estar juntos.
Ya quería verla.

Con una gran sonrisa y ansioso por las siguientes horas agarre mi traje y me lo puse. Un traje negro, con una camisa blanca y un moño negro. Todo muy clásico.
Me puse perfume y solté un gran suspiro antes de salir de mi habitación. Estaba solo porque mi madre se había ido un poco antes para arreglar unas cosas.

Salí de la puerta de mi casa, y la sonrisa permanecía, se supone que a Lisa se la había llevado Jonah a Corbyn, Corbyn a Zach y Zach a Daniel, o al menos ese era el plan que tenían, de seguro ella estaba con alguno de ellos esperando.
Subí a la camioneta y me dediqué a conducir. La verdad es que fue una eternidad, y cada vez que me acercaba más los nervios iban surgiendo dentro de mi.

Maldición.- pensé.

Llegué al lugar donde sería todo y subí a una de las habitaciones donde se encontraba Jonah esperándome.

- Hey.- dijo cuando entré a la habitación, camino hasta mi y me palmeó la espalda.- Todo bien?
- Si claro, solo, los nervios.- le confesé y el negó.
- Tranquilo Avery.- me sonrió y yo volví a hacerlo.
- Sabes si ya llegó?.- le pregunté refiriéndome a mi novia.
- No, Corbyn la acaba de dejar con Zach.- me respondió y yo asentí.
- No puedo creer que porfin este pasando, en serio no puedo. Estoy tan feliz, quiero estar con ella siempre.- le dije y él me prestaba toda la atención del mundo.- Tengo en mi mente cada momento especial con ella, cuando le pedí que fuéramos novios en su jardín, cuando le propuse matrimonio en mi jardín.
- Creo que tienes una obsesión con los jardines Jack.- ambos reímos por su comentario.
- Sea lo que sea, no tienes una idea de cuánto la amo.

Nos tardamos un momento y llegó Corbyn con nosotros, primero asomo su cabeza por la puerta y luego entró.

- Que hay?.- dijo y se sentó frente a nosotros.
- No mucho, hoy me caso.- les dije y reímos.
- Como está?.- le pregunto Jonah a Corbyn, refiriéndose a Alisa.
- Preciosísima le queda corto.- dijo con seguridad.
- Dios, voy a morir.- dije dejándome caer en la cama.
- Si tú te mueres yo me caso con ella.- menciono Marais y yo me levanté rápido.
- Hey.- le dije con el ceño fruncido.
- Solo digo, para no desaprovechar.- yo lo mire con desaprobación y Corbyn soltó una carcajada, Jonah solo se encogió de hombros.

Se nos fue el tiempo charlando, hasta que escuchamos unos toques en la puerta y luego vimos a Zach entrar.

- Listo, está con Daniel.- nos avisó y mi corazón comenzó a latir más rápido que nunca.
- Creo que ya tenemos que bajar.- me palmeó la espalda Jonah y yo asentí.

Nos paramos de nuestros lugares, Corbyn se puso frente a mi y me tomo por los hombros.

- Jack, solo relájate, todo va a salir bien.- me dijo despacio y me dio tranquilidad.
- Okay, vamos.- nos dijo Zach y nos abrió la puerta.

Caminamos al piso de abajo y allí vimos las grandes puertas de cristal, por las que entramos y yo me puse al pie del altar, mientras los chicos se acomodaban enseguida de mi.

Pasaron quizá quince minutos en los cuales yo no podía dejar de pensar en un millón de cosas.
Alisa Seavey era la persona más importante que tenía en mi vida, ella era sencillamente perfecta, y lo mejor de todo es que es mía.

Hundido en mis pensamientos me sobresalte un poco al escuchar la música que anunciaba su entrada. Y entonces la ví.
La chica más hermosa del mundo.

Oh por Dios, me encanta.

Su vestido blanco no era muy esponjado, pero si tenía volumen, tenía unas delgadas mangas que lo hacían clásico y tenía unos bonitos adornos en la parte del pecho.
Su rostro estaba impecable, tenía un maquillaje nada exagerado y su cabello estaba un poco recogido.
Al verla caminar así, toda mi alma se removió y me cubrí la cara con mis manos, evitando llorar.
Estaba tan preciosa, yo no podía, ella era demasiado para mí.

Una mano en mi hombro me hizo reaccionar, era Zach.

- Ella está caminando para estar contigo Jack, para pasar toda su vida contigo amigo, no te pierdas la mejor escena de tu vida.

Tenía razón, faltaba poco para que llegara conmigo, su sonrisa aumentaba cada vez que daba un paso.
Alisa me hacía feliz con tan solo estar cerca de mí.
Una vez que llegó le dio a Daniel un abrazo y el se pudo junto a los chicos.

La vi frente a frente, y me enamoré más de lo que estaba, si tal cosa se puede.

Toda la ceremonia estaba yendo de maravilla. Y llegó el momento de decir lo más importante, luego de decir el sí, que era más que obvio que ambos lo diríamos, escuché el tan esperado "Puede besar a la novia".
Con toda la emoción del mundo me incline hasta ella y la tome por la cintura, me acerque hasta que junte mis labios con los de ella.

Que sensación.

Luego de eso y de escuchar los silbidos de todos, la tome de la mano y caminamos por el pasillo. Todos nos felicitaban y yo estaba completamente feliz.

Por fin está sucediendo.- me dije a mi mismo.

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Espero que les haya gustado este capítulo chicas, muchas gracias por leer, comenten que les pareció 💜