Capitulo 27

1.3K 96 1
                                    

Salgo del baño envuelta en mi albornoz y me topo con la mirada de Doménico quien se encuentra sentado en el borde de la cama, lo ignoro y continúo con mi rutina. Hoy es lunes y tengo cosas pendientes que hacer en la oficina.

-¿Me seguirás ignorando?.
Lo escucho decir detrás de mí mientras entro al vestidor para buscar que ponerme. Tomo unas bragas con encaje de color negro las cuales me pongo sin importarme si el me ve o no, total y me mantiene vigilada todo el tiempo. Continúo poniéndome el brasier a juego hasta que siento como me toma del brazo y me atrapa contra la pared.

-Maldita sea Gabriela, no sigas por ahí-. Puedo sentir en su voz la excitación, pero la ignoro.

-No se a que te refieres Doménico o debo decir Sebastián.
Veo su cara de sorpresa cuando lo llamo así.

- ¿Como me dijiste?

-  Sebastián..¿Que ese no es tu nuevo nombre?

- ¿Lo sabías?

La verdad hace mucho tiempo empecé a investigar el nombre del supuesto primo lejano que se había encargado del negocio familiar y lo hice tan bien que nadie se dió por enterado.

-Al parecer tanto tú cómo mis padres me creen idiota. Pero te recuerdo que no lo soy. Yo misma investigue por mi cuenta al no tener respuesta de parte de los fariseos que resultaron ser mis familiares.

Me suelta y alejándose de mí piensa talvez que decirme.

-No te creo tonta Gabriela, al contrario no me hubiera enamorado de ti si lo fueras, por eso me alejé de ti y de mi hijo; porque sabia que ibas a tomar partido de todo esto a mi lado por lo que tú vida estaría rodeada de peligros, además no quería perderlos y que perdieras esa aura de inocencia que aún conservas.

-Inocencia...Puff!!...No digas tonterías Doménico. Creo que ya te haces viejo.

- ¿¡Viejo!?...Te mostraré lo que hace este viejo lisiado-. Se acerca de nuevo y tomándome por la cintura me monta sobre su hombro como si fuera un costal, me lleva hasta la cama donde me tira atrapandome contra su cuerpo, empieza a besarme apasionadamente, su barba me raya la piel, pero no incómoda al contrario me excita tanto que olvidó todo dejándome llevar por la excitación del momento, le acarició sintiendo su piel bajo mis dedos me doy cuenta que aún sigue en forma a pesar de todo lo que ha pasado,aunque me encuentro con nuevas cicatrices que no hacen más que despertar preguntas en mi  ¿Cómo se las abra hecho? ¿Se abra sentid...-. Mis pensamientos son interrumpidos por su ronca voz.

- ¡Eres hermosa Gabriela!-. Siento su barba rozar mi cuello.

-Nunca deje de creer que estabas vivo, jamás me comí ese cuento-. Le confieso mientras me retuerzo entre sus brazos. Me encanta lo que hace este maldito demonio con mi cuerpo.

-Lo sé....Lo sé-. Dice mientras besa mi cuello.

Las caricias se hacen más atrevidas, los besos más apasionados y mientras nos sumimos en nuestra burbuja olvidamos lo que pasa alrededor.

-¡¡Mami!!-. Una inocente voz nos interrumpe en medio de nuestro escena no apta para él.

Nos levantamos asustados, Doménico rápidamente toma la sábana para cubrirnos. Yo levanto mi cabeza para ver la cara de asombro de mi pequeño que se encuentra parado en el umbral de la puerta, las palabras para explicarle lo que pasa se atoran en mi boca, pero Doménico habla primero.

-Hola pequeño.

-¿Que le haces a mamá?-. Contesta furioso mi pequeño.

-Nada, solo..-Se voltea para verme y contesta.-Solo le doy mi amor.
Doménico me sorprende una vez más, algunas veces puede ser un completo idiota y otras veces se comporta como el más cursi de los enamorados.

Esclava (Terminada)Where stories live. Discover now