DECIMO TERCERO

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–Feliz navidad, señorita Zoe–.

–Feliz navidad, señor Cho–.

Estoy de vuelta. Con las energías recargadas. Pase una navidad y los mejores cumpleaños de mi vida. Yei me dio la sorpresa de llegar con su familia y completo a la perfección el regalo de cumpleaños. Llore viéndole en mi cumpleaños y nos abrazamos por mucho tiempo. Nuestra familia se reunió y todos celebramos a gusto una fecha especial. ¡Volví con miles de regalos! Por eso mi papá contrato un carro para que me trajeran al edificio, sentí algo de culpa por dejar mi Spark y darle un gasto extra a papá, pero él siempre sonríe y dice que soy su princesa.

Subo al sexto piso por el ascensor y mi corazón parece desenfrenado, late muy fuerte contra mi pecho, estoy nerviosa. Después de una semana podré ver a Joon. Hable con mamá y tal vez logré  declararme para año nuevo, quizás sea cierto y él sienta lo mismo que yo. Las puertas se abren, muerdo mi labio inferior, salgo y veo primero a la derecha, está la puerta de su apartamento y en segundos estoy caminando en esa dirección, me detengo frente a su puerta y ya el corazón late en mi garganta.

Trago grueso y respiro profundo llenándome de valor. No sé porque me está costando levantar la mano y tocar a su puerta. Somos amigos, vecinos y es normal que le llame a la puerta para hacer una visita ¿no?

Mi puño cerrado se posa en la madera y con los nudillos doy tres toques a la puerta. Mis piernas se mueven desesperadas porque no se escuchan pasos adentro. Toco de nuevo y acerco un poco el oído para escuchar, pero nada viene a mí. Miro la hora en mi reloj y puede que ya se haya ido a trabajar o no haya regresado de donde sus padres. Una parte de mí esta triste y la otra aliviada, dándole prioridad a la segunda, me doy vuelta y voy directo a mi apartamento.

Dentro hago una barrera para acordonar el pensamiento de Nam Joon y relajarme en el apartamento. Dejo todas las cosas sobre el sofá y enciendo el estéreo, voy a mi cuarto y busco algo ligero para hacer limpieza, no tengo trabajo hasta mañana gracias a Jimin y sus excelentes habilidades en el manejo de las tareas en la agencia, así que limpiare hasta el último espacio del apartamento. Me gusta verlo reluciente y una semana sin mi, acumula mucho polvo que daña los muebles. En la noche iré a ver a Soong, le daré una sorpresa y puede que consiga un par de regalos adicionales.

Consigo una blusa purpura de cuello ancho que deja ver mis hombros, me da hasta la media pierna y uso unos shorts de lino negro, las pantuflas, el cabello recogido en un rollo y un par de mechones de cada lado, lista para dejar impecable mi apartamento.

***

Tres horas intensas de lavar, restregar, fregar, secar, sacudir, y aromatizar; fueron la mejor rutina de gimnasio que una persona pudiese tener. He sudado hasta la última gota, pero al ver como reluce el apartamento sé que valió la pena.

Llame a Soong fingiendo que aún seguía con mis padres y resulta que ella está visitando la casa de sus suegros, no volverá hasta mañana. Sabiendo que puede usar de excusa para escaparse que quiere verme; omito la parte de que regrese y quería visitarla para que no haya problemas con la familia, a ella no le gustan sus suegros y solo asiste por decencia y amor a Jong.

Con los planes cancelados, reinvento otra cosa que hacer en la noche. Será noche de películas. Estuve ocupada con la limpieza y la imagen de Nam Joon se mantuvo a raya, pensé que vendría a buscarme, pero parece ser que no ha llegado, estará hasta mañana y no pienso salir y tantear si realmente está o no esta.

Antes de entrar a ducharme y relajarme bajo la espuma y los tratamientos para la piel, pido un domicilio en el restaurante de omelet, en las noches venden comida chatarra y pido omelet y pizza para acompañar las películas. Estará en una hora golpeando a la puerta y estaré lista para entonces.

I-legal ~ RM (BTS)✔Where stories live. Discover now