Secretos Escondidos

Capítulo 21: Descubierta.

«Dos renglones más, Noah», me repetí mentalmente.

Me encontraba en la biblioteca, el lugar donde me había acostumbrado a pasar la mayoría de mi tiempo, terminando el dichoso trabajo que me habían mandado por culpa de Jessica. La señora Jones me había dejado unos cuantos libros por si la información de Internet no era suficiente para rellenar las diez hojas. Por suerte, no me habían hecho falta, la Wikipedia y otras páginas web habían sido mi salvación.

Rellené las últimas líneas y sonreí con satisfacción. ¡Lo había terminado! Miré por la ventana, ya había anochecido, me había pasado todo el día trabajando y ni me había enterado.

Fui a colocar los libros en sus correspondientes estanterías cuando Isabella me hizo señas para que me acercara.

Últimamente, pasaba más tiempo con ella y me había permitido conocerla mejor: vivía en un pueblo que se hallaba a quince minutos de la ciudad, estaba soltera y le encantaba la lectura, de ahí su deseo en ser bibliotecaria. Me había confesado también que tenía 57 años cosa que no lograba comprender ya que si no ¿cómo hacía para mantenerse tan joven? Cuando me lo contó no pude evitar mi sorpresa pero ella solo se limitó a decirme que un mago nunca revelaba sus secretos.

Era increíble lo que podían hacer algunas cremas rejuvenecedoras. Y yo que le había echado 10 años menos, ¡qué equivocada estaba!

Fui hacia donde se encontraba y me tendió las llaves como siempre solía hacer desde que decidí pasar algunas noches en la biblioteca.

—Adiós, Isabella —me despedí apilando los libros.

—Adiós, Noah, recuerda, no te quedes mucho tiempo. —Se fue y ya me permití hacer lo que había deseado desde un primer momento.

Me senté delante del ordenador mientras que mis dedos se movían rápidamente sobre el teclado.

«El Cambio», escribí y un montón de enlaces aparecieron frente a mis ojos.

Moví el cursor y pinché el primero.

¿Sientes la ira corriendo por tus venas? ¿Sientes que estás a punto de perder el control? ¿Tus iris se vuelven rojos como la sangre? Entonces estás pasando por el Cambio.

¿Pero qué es el Cambio? Es una fase que suele presentarse sobre todo en los ángeles caídos aunque también puede darse en los ángeles puros. Cuentan que fue un castigo impuesto por Dios por empezar una guerra entre ambos bandos que causaría innumerables consecuencias. El Cambio es una lucha interna entre el bien y el mal, ambas partes compitiendo por tener el control absoluto. Con el paso del tiempo, una de las dos partes gana y ese sentimiento de ira, en caso de que el bien haya inclinado la balanza desaparece.

El Cambio se presenta en momentos en los que los sentimientos son demasiado intensos, como por ejemplo en momentos ira y de enfado, de tristeza mezclados con dolor, de rabia etc.

¿Cómo sabes cuál de las dos partes ha ganado? Cuando la paz se asienta en tu interior es porque el bien ha destruido al mal pero cuando la ira se vuelve más fuerte y la rabia es más intensa es porque el mal se ha apoderado de tu alma.

Y es por eso que durante esa lucha, cuantas más veces aparezca el Cambio, cuantas más veces aparezca esa rabia descontrolada, más probable es que el mal acabe destruyendo al bien.

Miré asustada la pantalla del ordenador ¿qué me estaba pasando? ¿A qué peligro me estaba enfrentando? Me gustaría decir que esto no me afectaba ni en lo más mínimo pero si lo hiciera estaría mintiendo.

Esta situación me aterrorizaba.

Estaba aterrada.

Por lo que había leído, el bien y el mal estaban luchando en mi interior por tener el control, pero había algo que no entendía. Yo no era un ángel, no tenía alas gigantescas y no era un ser sobrenatural.