Epílogo.

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Escuché un insistente zumbido en mi oreja, luego otro más y otro, fruncí el ceño ¿en el cielo había insectos? ¿En serio? Volví a escucharlo y solté un bufido, malditos bichos, ¿no podían dejarme en paz?

—Noah. —Me sacudieron por los hombros—. Noah, despierta.

Intenté abrir los ojos pero mi cuerpo no reaccionaba ante mis órdenes, los párpados me pesaban, me hallaba sumida en un extraño trance en el que tan solo veía oscuridad. Esa voz tan suave me resultaba familiar y quise despertar solamente para saber de quién se trataba.

—¡Noah! —me sacudieron con más fuerza, luché por despertar y oí el sonido de una cascada—. Por favor, cariño.

—Mamá —gimoteé reconociéndola.

Sin pensarlo más veces, saqué fuerzas de mi interior y vi como poco a poco las sombras se disipaban a mí alrededor. Abrí los ojos y rápidamente tuve que cerrarlos de nuevo, ¿por qué había tanta luz? Volví a abrirlos y dejé que mis ojos se acostumbraran a la iluminación.

Me incorporé y vi a mi madre, Hannah Brown, de rodillas frente a mí abrazándome con cuidado.

Estaba muy cambiada, seguía siendo la misma. Su estatura era mediana, su cabello era castaño pero con el paso del tiempo parecía que se le había aclarado, me observaba con sus ojos ambarinos llenos de lágrimas.

—Lo siento mucho, cariño, lo siento —susurró besándome en lo alto de la cabellera.

—Mamá —lloré abrazándola con fuerza—. ¿Cómo estás? ¿Te han tratado bien? ¿Estamos en el cielo?

—Estoy bien ahora que sé que tú también lo estás —respondió acunando mis mejillas—. Podría decirse, pero cariño este no es el cielo que estás imaginando.

Le miré extrañada, si no estábamos en el cielo ¿dónde estábamos?

Mi mirada recorrió el lugar, todo se hallaba cubierto de nieve, los árboles nos rodeaban, pequeñas casas se distinguían a lo lejos y el sonido del agua siguiendo su cauce se escuchaba a nuestro alrededor.

¿Qué era este lugar?

Mis ojos divisaron una figura que se acercaba hacia nosotras, inmediatamente le reconocí y corrí hacia él.

Estampé contra su pecho y dejé que sus brazos me rodearan.

—Christian —susurré inhalando su aroma, cogí su rostro entre mis manos y mis ojos se inundaron de lágrimas—. Tú no deberías estar aquí, tú no... no puedes estar muerto.

—No lo estoy, Noah, al igual que tú tampoco —sonrió.

Me giré y vi a mi madre observándonos con una sonrisa en los labios.

Aún no podía creer que estuviera junto a ella.

—¿Si no estamos en el cielo, dónde estamos? —pregunté viendo los copos de nieve caer sobre nosotros.

Giramos y señaló un palacio que resaltaba sobre las demás viviendas.

—Bienvenida a Hienun, Noah.

Sonreí sin poder evitarlo, si estaba en Hienun eso solo significaba una cosa. Estaba viva y el latido de mi corazón así me lo confirmaba, la vida me había dado una segunda oportunidad y pensaba aprovecharla.

Ese día hice una promesa.

No obstante, mi corazón sangraba por la pérdida sin embargo, había llegado el momento de levantarse y lamerse las heridas.

Me vengaría del hombre que se atrevió a destruirme.

Aunque para ello tuviera que dejar mis sentimientos a un lado.

Dicen que la venganza es un plato que se sirve frío, yo lo serviría helado.

Lo juro.



¡YA HEMOS LLEGADO AL FINAL!

Con este epílogo nos despedimos de esta historia llena de sentimiento y cariño que he creado para vosotros/as.
Porque sois vosotros los que le dais vida a esta historia y os agradezco mucho que hayáis llegado hasta el final conmigo.

Solamente quería deciros que muchísimas gracias, tanto a los que habéis estado siguiendo esta historia desde el principio como a los que os llamó la atención a última hora, simplemente gracias.

Gracias por vuestros comentarios, votos, lecturas etc, gracias por todo.💜

Lo último que quiero deciros es que habrá segundo libro. Antes de que os pongáis a saltar de alegría, dejadme deciros que no sé cuando lo subiré a Wattpad pero cuando lo haga os avisaré.


Y ya lo último de todo, dejadme en los comentarios vuestra opinión, algo que queráis decirme sobre la historia, alguna crítica, algún consejo a la hora de escribir, algo que debería modificar, lo que sea.💖

¡Un abrazo muy fuerte y hasta la próxima!❤️






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