55.- Camino al Altar

292 32 6
                                    


Momo

Para nadie era sorpresa que Mina, Jeongyeon, Heechul, Chaeyoung y Mark regresaban a San Francisco, para hacerse cargo de la academia. Debo admitir, que esta escena se me hacía algo familiar, claro está, que con diferentes contextos.

La prensa estaba excitada por nuestra presencia, trataban a toda costa de obtener su primicia pero, para nosotras era algo más que eso. El dar este paso gigante significaba que estábamos creciendo, como personas y como artistas. Cada una de nosotras era libre de elegir lo que quisiera hacer pero, observando a estos 8 pares de ojos que tenía frente a mí, podía inferir que ninguna de nosotras quería subirse a un escenario nuevamente sin las otras. Era difícil de ver. Habíamos crecido juntas, teníamos mil y una anécdotas para contar a nuestros nietos. Era raro darse cuenta que cuando a algunas de ellas se les olvide la coreografía no podrán mirar a la que tienen al lado para recordarla.

-¿En qué piensas? – Mina se me acercó de la nada.

-¿En qué crees que estoy pensando?

-Tus ojos no saben mentir – le sonreí – será difícil para todas Momo.

-Lo sé.

-Te extrañaré, a Sana igual – las dos reímos – pero creo que sabes a cuál de las dos extrañaré más – de repente, los encantos de Mina volvieron a renacer. Sentí como mi corazón se aceleró levemente ante ellos pero, nada se comparaba a lo que me hacía sentir Nayeon sólo con mirarla.

-Han sido unos años locos ¿No crees? – pregunté mientras me lanzaba a sus brazos.

-De todas, siempre fuiste tú la que más necesitaba que la cuidáramos – sonreí en la piel expuesta de su cuello – prométeme que estarás bien, que cualquier cosa que necesites llamarás – nos alejamos algunos centímetros sólo para poder observar nuestros rostros.

-Siempre te voy a necesitar Mina, siempre – eso para mí, era un sí. Sabía que si necesitaba algo, de cualquier de ellas podría llamarla y me ayudarían.

-Gracias por todo – hubo algunos segundos de silencio – cuando digo todo, también me refiero a...

-Gracias por haber sido mi pareja – sabía que le había quitado las palabras de la boca.

-Me hiciste la mujer más feliz del mundo durante un pequeño transcurso de tiempo, espero haberte hecho feliz.

-Fui muy feliz a tu lado Mina, muy feliz. Lamento no haber sido suficiente.

-Hey – Mina colocó su dedo índice en mi boca – no digas eso, creo que las dos éramos completamente suficientes, la una para la otra. Simplemente no era nuestro momento.

-Se feliz con Jeongyeon.

-Y tú con Nayeon – las dos miramos hacía donde se encontraba el resto de las chicas, todas lloraban – me tengo que ir.

-Nos vemos en tres semanas ¿no? – ella inclinó su cabeza hacía el lado derecho y me regaló otra sonrisa.

-Si Momo, nos vemos en el casamiento de Sana – Mina comenzó a caminar hacía Jeongyeon cuando, de repente, paró. Volteo a mirarme – felicitaciones por tu compromiso con Nayeon – sonreí – no pudiste haber elegido mejor Momo.

Me quedé en un costado mirando como Jeongyeon y Mina terminaban de despedirse del resto. Heechul, Mark y Chaeyoung se acercaron a despedirse de mi también, después de ellos se acercó Nayeon.

-¿Por qué estás tan apartada? – sentí como apoyaba su cabeza en mi hombro izquierdo.

-Creo que no me gustan los aeropuertos, no me traen buenos recuerdos.

Daño ColateralDonde viven las historias. Descúbrelo ahora