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—A veces pienso qué habría sido de mí si no hubiera estado con Emily.—dice Calum rompiendo el silencio.

Estábamos aún arriba de su auto mirando el cielo. Ahora estaba más oscuro y lleno de estrellas. Era hermoso.

—No habrías sido ilusionado.

—Bueno, gracias. Tienes razón.

Río y volteo a mirarlo.—Pues sí. Es verdad, no mates las últimas dos neuronas que te quedan.

—Últimamente andas muy directa, señorita.—me encogo de hombros en respuesta y devuelvo mi vista hacia el cielo.—Si soy sincero desearía no haber estado con ella si todo era falso. Sólo perdí tiempo valioso de mi vida con quién no lo merecía.

Una sonrisa sarcástica se posa en mis labios y no puedo evitar decir lo siguiente:

—No pensaste eso cuando yo perdía tiempo valioso de mi vida contigo.—río.

—Ya.., lamento eso.

—Yo no me arrepiento del tiempo que pasé con Michael.—confieso.

—Apuesto que no.—ríe.—Es obvio. Eran una de las mejores parejas. Aún no creo del todo que terminó.

—Bueno...pasó.

—Sí...

—A veces creo que Michael me odia y luego hace cosas que demuestran lo contrario.

—Michael definitivamente no te odia. —ríe y sus ojos se hacen más pequeños.

—A veces pienso que alguna vez desde que terminamos, él debió arrepentirse de haber estado conmigo.—Calum suelta una carcajada haciendo que lo mire confundida—¿Qué?

—Eres tan graciosa.

—No estoy bromeando.

—Brook—se sienta apoyando su peso en su brazo derecho, mirándome—, Michael jamás sería capaz de tan siquiera pensar algo malo de ti. Te ama, te adora. Creéme, lo conozco desde hace años y él jamás nunca de los nuncas hablaría mal de alguna mujer. Menos de sus ex novias. Bueno, las pocas que ha tenido.—ríe.

—Pero estoy segura que con sus antiguas novias no tuvo la misma historia que cómo conmigo.

—Exactamente, Brook. La de ustedes fue mejor.

—No creo eso.—niego y me siento llevando mi vista hacia las luces de la ciudad.—Lo he herido.

—¿Tú? ¿Por qué?

Guardo silencio pensando en la respuesta.

—Nunca hiciste nada para herirlo—habla de nuevo—, sólo las cosas no se dieron. Él fue quién tuvo la gran idea de terminar aunque todos le dijimos que no era buena idea.

—Siento que todo es mi culpa.

—Pues no lo es. ¿Qué vida piensas llevar si siempre te culparás de todo? Tú también mereces ser feliz.

—Ya...

—Algún día encontrarás a alguien a quién realmente ames y que a esa persona realmente le gustes, espero que sea Michael u otra persona y no yo; pues aunque me gustes y eso, terminaría arruinando todo, de nuevo.

—Bueno, por suerte no te gusto.—río.

—Uhm..., realmente eres estúpida Brook.—ríe negando con la cabeza mientras se recuesta de nuevo.—¿No es justo lo contrario lo que acabo de decir?

Me quedo unos segundos procesándolo hasta que me doy cuenta de lo que dijo.

Volteo sorprendida a verlo y él me mira serio.—Ya entendí. —es lo que digo haciéndolo reír.

—De todos modos no te preocupes. No intentaré nada, creo que los dos sabemos muy muy bien que simplemente no funcionaría ni intentándolo mil veces. Y antes de que comiences a intentar decidir sobre mis sentimientos, tú ni sabes cómo me siento.—me señala con su dedo.

Suspiro y dejo de mirarlo.

—Si las cosas hubieran sido diferentes podría ser que hubiera pasado algo entre los dos y me habría ahorrado tanto sufrimiento.—digo en broma.

—Si yo hubiera sido menos idiota, querrás decir.

—Da igual. Ya es pasado.

Ambos nos quedamos en silencio. Mi mente comenzó a imaginar un pasado dónde se veía cómo hubiera sido todo si nada de lo que pasó habría pasado. No era tan malo.

—Bueno, aquí te va un consejo por parte del fabuloso Calum Hood: si tienes que elegir entre Calum y Michael..., elige a Mike, él es mejor. Fin.

Río y niego con la cabeza. Perdió otra neurona.

Y realmente no me esperaba esa confesión.

Y realmente no me esperaba esa confesión

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Crush II » Calum HoodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora