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—¿Qué dices, vamos a una fiesta? —bromea Calum.

—Claro que no.

Seguimos caminando por el pasillo.

—Uy. Sólo bromeaba, grosera.

Río y no le respondo. Llegamos a la mesa donde se encontraban nuestros amigos charlando de forma animada. Lo que me sorprende es ver a Michael allí, hablando y sonriendo. Me siento y trato de no mirarlo demasiado para no ponerlo incómodo.

—Hey, hoy vamos a ir a cenar todos, ¿vienen?—se dirige Luke a Cal y a mí.

—¿Planearon todo y al final nos invitan?—Calum se hace el ofendido.

—Uuuuuh.

—Tú cállate—Luke le dice a Ashton.—. Aún no llegaban. ¿Van a ir sí o no?

—Sí.

—Depende—hablo ésta vez yo.—, si es después de mi trabajo sí puedo, antes no creo.

—Es a las 8:30—aclara Ashton.

—Ah, entonces sí.

—¿Irá Alex?—pregunta Michael. Por fin se anima a hablar desde que llegué.

Hace tiempo no veo a Alex.

—No—hace una mueca.—. Dijo que le surgió algo familiar. Al parecer no estará libre éstos días.

Michael hace una mueca y asiente.

—Tal vez la próxima vez que él esté libre nos juntemos de nuevo.

Después nos ponemos de acuerdo, cada uno va a su siguiente clase. Cuando mi horario termina por el día de hoy, aprovecho y antes de irme a casa opto por ir a la biblioteca. Necesitaba terminar un ensayo que había dejado uno de los profesores, lo peor es que era investigación en libros. Me gustaba leer pero no investigar en libros, aunque era entretenido.

Lo bueno es que la biblioteca es cómoda, silenciosa y con un olor lindo. No me gustaba hacer tareas en completo silencio por lo que me coloqué mis audífonos y puse la música en un volumen bajo.

El tiempo se le fue muy rápido y cuando observé la hora me quedaba una hora para ir a casa y prepararme para ir al trabajo. Tomé mis cosas y las guardé rápidamente, miré los libros sobre la mesa y decidí que sería mejor llevarlos a casa.

Me coloco la mochila sólo en un hombro, tomó mi celular y los libros para comenzar a caminar hacia donde se encuentra la bibliotecaria.

—Buenas tardes. —sonrío y ella me devuelve el saludo.—¿Podría llevarme éstos libros?

—Claro. ¿Tienes credencial?—niego con la cabeza.—No importa, aquí puedes sacarla.

Me hace un ademán de que me acerque a una computadora y allí toma mis datos, me toma una foto y después tengo la credencial entre mis dedos.

—Muchas gracias.

—No es nada. Cuídalos.

—Claro. Adiós.

Salgo de la biblioteca y camino hasta salir de la universidad. Allí paro y subo mi pie a una banca, tomo mi mochila y meto los libros junto con la credencial, me la vuelvo a colocar y sigo mi camino. Aumento mi velocidad para llegar cuanto antes a mi casa, tenía hambre y faltaba poco para que mi horario de trabajo comenzara.

Cuando veo mi casa corro y al entrar arrojo la mochila al sofá. Me dirijo al baño y me doy una rápida ducha, al salir, mientras cepillo mi aún mojado cabello, voy a la cocina para ver qué podría comer. Comienzo a sacar lo que usaría cuando escucho la puerta ser tocada. ¿Quién podría ser?

Crush II » Calum HoodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora