✾ Capítulo 29 ✾

11K 1.3K 796
                                    

Me quedé sentado en el lugar, el silencio del apartamento me puso nervioso debido a que lo único que podía escuchar era a mí mismo diciéndome lo estúpido que era. Parecía que una ventana había sido abierta con un hallazgo que llevaba mucho tiempo ante mis ojos.

Pasé mis manos por mi cara y noté el sudor en mi frente debido a lo que había pasado, una rápida mirada a la habitación me tranquilizó porque todo se veía natural y Kook parecía estar dormido.

Me levanté con cuidado tratando de no hacer ningún ruido y me dirigí al baño para lavarme la cara y asearme. Cuando cerré la puerta y prendí la luz, me apoyé en el lavamanos mirándome en el espejo; pude ver el miedo en mis ojos y en cada una de mis facciones.

Realmente me gustaba Jungkook.

¿En qué momento pasó?

Mi desconcierto llevaba meses, pero siempre lo consideré un capricho. Al principio de mi lobo y luego no supe a quién culpar, porque no tenía ninguna prueba, sin embargo, ahora podía ver claro como el agua de que era yo. Me gustaba y joder que me encantaba. Con Jungkook vivo experiencias y sensaciones como nunca antes, como si fuera un adolescente de nuevo.

Con sueños húmedos, miradas hechizadas, sonrisas bobas y fascinación en general.

¿Y ahora? ¿Qué debía hacer?

Jungkook se quería ir. Y yo parecía ser el culpable de esta huida, pero ya no tenía que hacerlo. Podía decirle que me gustaba su sonrisa. Podía decirle que me encantaba lo terco que era. Podría caminar de la mano con él y darle cosas que lo hicieran feliz. Podría cortejarlo y seducirlo como se merecía. Le podía decir lo que sentía, podríamos empezar de nuevo... por tercera vez. Podría...

Podría acobardarme y no decirle nada porque tenía una idea de lo que mis decisiones podrían causar en otras personas.

Salí del baño con pasos pesados y nuevos pensamientos en mi cabeza. Diferentes posibilidades aparecían ante mí, las palabras que le dije anteriormente vinieron como una fuerte cachetada:

"No tienes que irte. Te podrías quedar acá, las cosas van bien ¿no? Yo te protegería, no te preocupes por ese imbécil. Hasta te podrías quedar conmigo y no tendrías que quedarte solo. Podríamos jugar con Yeontan y decidir si queremos otra mascota para mimar. También podrías dormir conmigo y así los inviernos no los sentiríamos tanto..."

Ya me había declarado y no me había dado cuenta, en ese momento las palabras salieron de mi con desesperación, pero viéndolas con cabeza fría era lo que realmente quería.

Quería que Jungkook se quedara. Quería protegerlo. Quería que pasara mucho tiempo junto a mí. Quería que viviera conmigo, porque estar con él se sentía natural y podía ser yo mismo. Podía verlo como mi mejor amigo, pero quererlo como mi omega; lo deseo con la misma intensidad al cariño que le tengo. Quería dormir con él cada noche y no sentirme mal por eso.

No culparme.

Volví al sillón y me cubrí con el edredón, pero tenía tanto en mente que el sueño no vino rápidamente. Debido a que el apartamento seguía en silencio y me encontraba espabilado, escuché como Jungkook se levantó de la cama y ando de puntillas hasta llegar a la sala de estar donde me encontraba.

Casi podía verlo en mi mente mordiéndose el labio y pensando sobre qué hacer.

— Tae... — Susurró muy suavemente, tan suave que parecía no querer ser escuchado. Antes de responderle que estaba despierto, se acercó del todo y se abrió paso entre el edredón y se pegó a un costado de mi cuerpo. Un suspiro satisfecho salió de sus labios mientras se acercaba más buscando mi calor.

✾ No serás mi Omega ✾ [Taekook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora