¡Él se metió a mi Wattpad! (Libro 1y2) [Completo]

Capítulo 1: "¿Que rayos hago en su habitación?"

No podía creer que él supiera mi mayor secreto, que escribía mis fantasías sobre él en wattpad, no siempre usaba su nombre, a veces usaba otros nombres inventados, pero siempre escribía: “inspirado en Ramson Stone” en la sinopsis de cada historia y las características de mis personajes eran siempre las mismas. Debí suponer que esto podía pasar, wattpad era una red social pública de fácil acceso donde todos podía leer y escribir con libertad, jamás se me ocurrió que él pudiera tener una cuenta ahí.

—¿Cómo era que decía? —estrechó los ojos mirando a otro lado como si intentara recordar algo y luego dijo: — “Ramson me amarró a la cama y deslizó el látigo por mis piernas lentamente subiendo hasta llegar a mi ombligo...”

Mi rostro debía de estar más rojo que un tomate, negué con la cabeza e intenté defenderme pero me había quedado sin palabras.

—Ocho libros con fantasías sobre mí, cada una con casi ochenta capítulos —continuó—, debo decírtelo, eres una de las peores escritoras que he leído.

Tragué saliva fuertemente y sintiéndome completamente humillada, decidí que ya nada podía ser peor que esto, estaba descubierta.

—Pero me has leído. —me erguí dando un paso al frente, Ramson retrocedió pareciendo ligeramente confundido por mi actitud y agregué en burla: — Espero hayas votado y dejado uno que otro comentario, a mucha gente le agrada las fantasías que tengo sobre ti.

Por la forma en la que pareció perder su postura engreída, sabía que lo había tomado desprevenido.

Me encantaba haberlo dejado sin palabras.

—Para una chica que tiene apenas 16 años —dijo Ramson—, que escribas tantas cosas sucias no debe de ser sano.

No todo lo que escribía eran historias eróticas, habían historias románticas, fantasiosas y juveniles, aunque claro, siempre ponía restricción de edad o alguna advertencia porque sabía que había menores de edad leyendo... menores de edad como yo, ¡pero cumpliría los 18 dentro de tan solo 12 meses!

—Tengo 17 —refuté—. Además, lo que escriba o no, no es tu problema.

—Lo es si yo soy el protagonista —dijo—, apuesto a que no tienes un novio real, ¿cierto?

Sentí mis mejillas sonrojarse, la verdad era que solo fantaseaba con mis personajes literarios y con él, escribía erótico y era más virgen que la misma virgen María.

Intenté guardar algo de dignidad y me crucé de brazos.

—¿Vas a decirme como desperté en tu habitación?

Ramson pareció entretenido volviendo a su expresión engreída otra vez.

— ¿No recuerdas llegar a mi casa y pedirme que me quitara la camisa? —Dijo—, ¿que entraste a mi habitación y te amarraste tu misma a la cama?

No tenía recuerdo de lo ocurrido, pero sabía que nunca haría algo como eso.

—Yo no hice nada de eso —refuté.

¿O sí lo hice?

—Tienes razón —dijo con una ligera sonrisa—, en realidad, pasé en mi bicicleta por tu lado cuando tú caminabas hacia tu casa, y te desmayaste cuando tu cabezota chocó contra un poste de luz porque no paraste de verme.

Oh, eso explicaba el dolor de cabeza. Casi podía imaginarme distrayéndome mientras lo observaba manejar en su bicicleta, sin prestar atención por donde caminaba y luego caer desmayada en el suelo.

—¿Y qué hago en tu habitación?

—No había nadie en tu casa —dijo—, no encontré tus llaves, así que no tuve otra opción que traerte a mi habitación.