24. El final de una parte

2.3K 416 30
                                    

Capítulo 24: El final de una parte

PAOLA STALONE

Mi padre no podía creerlo, ver su corazón roto, rompió el mío, pero era necesario, de esto, me encargué de que llevaran el caso a servicios infantiles y mi padre pidió la custodia para hacerse cargo de mi sobrino Eddy, lo más alegre para mí fue ver que mi hermana fue encarcelada.

La justicia tardaba, pero llegaba, y ahora estaba feliz de que un capítulo de mi vida —el más oscuro— por fin cerrara.

Ahora creo que podía continuar en paz... por una parte, porque mi vida seguía siendo una mierda.

Sentía que nada me estaba saliendo bien.

La semana pasó muy rápido y más aun cuando comencé a sentirme extraña de salud, le había comentado a mi padre lo que habían visto del tumor y los medicamentos, pero me dijo que mis síntomas parecían ser de otra cosa, así que me refirió con el ginecólogo y en efecto, lo que sospeché, pero no lo creía que pudiera ser cierto...

Un bebé.

No entendía como era posible si tenía un método anticonceptivo, un implante, pero al parecer era de las chicas de 1 en un millón que no les funcionaba; yo fui ese 1.

Un bebé.

Y de Ramson, el hombre con el que pensaba divorciarme.

«Es tu esposo».

Vaya, si quería la cereza del pastel definitivamente era esta.

De todas formas prefería no aguar la fiesta, hoy era el cumpleaños de mi padre, él había invitado a varios amigos y a una chica con la que al parecer mi padre estaba saliendo, me encargué de ayudarlo en los aperitivos, bebidas y todo lo demás, cuando entonces, tocaron el timbre y fui a abrir la puerta metiéndome un pan con mucha crema a la boca mientras abría la puerta y me quedé completamente paralizada al ver quien era.

Ramson Stone.

Lucía un lindo suéter negro que le había regalado en su cumpleaños y se le acoplaba perfectamente a su musculatura, unos jeans y deportivos, aun no me acostumbraba a que mi esposo fuera tan guapo, bueno sí, pero seguía molesta con él y por eso se me hacia impactante aun, porque no quería verlo así.

—Ramson —dije con la boca llena, tragué rápidamente—, ¿Qué haces aquí?

Él metió las manos dentro de sus bolsillos.

—Como siempre —suspiró—, vine a buscarte.

¿Cómo siempre?

—No te pedí que vinieras por mí. —refuté.

—Necesitaba venir por ti, Paola —dijo—, no estes a la defensiva... no puedo vivir sin ti ¿bien?

Sus palabras hicieron que mis ojos se cristalizaran y negué con la cabeza sorprendida, iba a decir algo, pero había mucho ruido aquí.

—Okey, pero —dije acercándome un poco para hacerme escuchar sobre el ruido— ¿ahora sí me dirás lo que está pasando?

—¿Podemos hablar acá afuera? —dijo Ramson también por el ruido que hacían todos dentro.

Afirmé con la cabeza y salí con él, la noche estaba fría., nos sentamos en la acera de afuera mirando a los niños correr de un lado a otro por la calle.

—Vaya, tenia mucho tiempo que no veía esta calle —dijo Ramson— Muchos recuerdos atascados aquí, ¿eh?

Demasiados diría yo.

—Si —dije—, como la vez que llovía y no me diste el aventón en tu camioneta.

Él se rio un poco, podía recordar que en ese momento él se comportaba como todo un idiota conmigo y yo como una masoquista solo hacia que me gustara más.

—O la vez que me veías a una hora especifica desde el balcón. —dijo Ramson.

Sonreí mirándolo, claro que recordaba eso, tenía un fuerte crush por él y si no hubiera sido por él, no hubiera escrito ningún libro, creo que desde siempre mi corazón le pertenecería; así no estuviéramos juntos sería el amor de mi vida.

Extrañaba esto, solo ser... nosotros dos, sin discusiones.

Sus ojos verdes estaban levemente brillosos y relamió sus labios, sabía que quería decirme algo

—Fea, yo... —dijo— hice cosas terribles dentro de las instalaciones del CECMO, cosas que solo lo sabe Antonietta porque estuvo ahí y es lo que está usando para chantajearme.

Oh.

Entonces iba a hablar de eso.

—Dime —dije al ver que se quedó callado, parecía ser un tema fuerte para él—, sabes que no voy a juzgarte.

Ramson tomó una profunda respiración y dijo:

—Yo... conseguía drogas, las pasaba, las vendía, las distribuía dentro del CECMO, hasta que uno de los pacientes murió de sobredosis y dejé de hacerlo, si esto se sabe, puedo ir preso... es algo que cargo en mi conciencia.

Oh.

Bueno sí era más grave de lo que pensé.

—Pero ¿por qué le decías te amo? —dije buscando explicaciones, él la defendió muchas veces, le decía esa palabra también.

—Al principio lo hacía de corazón —dijo Ramson—, quería ayudarla, pero cuando quise alejarme, me amenazó con eso, con denunciarme.

Apreté la quijada.

Como no, lo peor de casarte con el amor de tu vida era que tuviera una ex loca.

—¿Por qué no me dijiste? —dije.

—No quería que te decepcionaras de mí. —dijo Ramson— No quería que vieras esta parte criminal, ya era suficiente con saber que estuve dañado de la mente.

Tragué pesadamente saliva negando con la cabeza.

—Más me decepcionaba pensar que estabas con otra mujer, Ramson. —dije.

Él apartó un mechón de mi rostro a un lado, sus ojos fijos en mí.

—Nunca podría dejarte —dijo—, eres la mujer perfecta para mí, perdón por creer que ocultándote todo esto solucionaría mejor las cosas, fue la peor decisión.

Tragué pesadamente saliva, al menos habíamos aclarado parte de todo este enredo y Antonietta podría irse por fin de nuestras vidas.

Tomé su mano y lo miré para decir:

—Estoy embarazada.

Ramson se quedó por un momento muy quieto como si no me hubiera escuchado.

—¿Qué? —dijo.

—Que estoy... —comencé a repetir, pero él me interrumpió diciendo:

—Te escuché, pero ¿desde hace cuánto lo sabes?

—Desde esta mañana. —dije.

—Pero... es tan random, me lo dijiste de repente.

Me encogí de hombros como única respuesta.

—Quiero decirte que nada le va a faltar a ese bebé ¿vale? —dijo Ramson apretando mi mano.

Sonreí levemente, no esperaba nada menos de él, sabia que este era el Ramson con el que me había casado, no con el que ocultaba cosas de mí.

«Tú también le ocultas cosas».

Apreté los labios.

«Ahora no, consciencia».

—Pero quiero que vayamos poco a poco. —dije, después de todo lo que había pasado, creo que era lo mejor hasta volver a lo que éramos.

—Iré a tu paso —dijo Ramson—, pero por favor, vuelve a casa, conmigo.

—Está bien. —respondí con una sonrisa.

Saber que no le había dicho algo que literalmente estaba matándome como lo era el tumor me entristecía.

¡Él se metió a mi Wattpad! (Libro 1y2) [Completo]Where stories live. Discover now