Capítulo 8: "No seas tan hijo de..."

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El corazón se me saldrían por la boca, esto de verdad estaba pasando, Ramson estaba a punto de besarme y pudiera haber una posibilidad que yo le gustara.

¡Dios escuchó mi oración!

—¿Yo te gusto? —dije un hilo de voz apenas perceptible, sus ojos comenzaron a entrecerrarse.

CORONAMOS.

¡OH YEAH BABY!

—Eres muy... —sus labios rozaron los míos y yo me sentí volar cerrando los ojos para esperar el beso— ingenua.

Él se echó hacia atrás soltando una carcajada.

Se estaba burlando.

A mi reina interna le quitaron la corona como a la miss Colombia en el miss universo.

Apreté la quijada y lo empujé con fuerza causando que se separara de mí, él no paraba de reírse, sus ojos se estrechaban y su abdomen se contraía.

Estúpida Paola, ¿Qué creías? ¿Qué se enamoraría de ti de repente?

Ningún chico se fija en la rarita fea que nadie quiere.

—¡Eres un estúpido imbécil! —Dije—, ¿disfrutas humillándome?

Había estado dejando que acuchillara mi orgullo, por favor, era una estúpida.

—Un poco, es divertido la manera en la que pareces creer que de verdad en algún momento me enamoraré de ti —dijo—, como si fuera una de tus absurdas novelas de amor.

Tragué saliva con fuerza.

Auch.

Sentí mis mejillas sonrojarse de vergüenza, odiaba que me ofendiera, odiaba que despreciara lo que escribía y que jugara con mis sentimientos.

Por primera vez sentía que odiaba a Ramson Stone.

Intenté parecer como si sus comentarios no me hubieran afectado en lo más mínimo.

—Estoy muy segura de que te llegaré a encantar —dije—, solo es cuestión de tiempo.

Ramson comenzó a reírse, pero esta vez lucía bastante curioso por mi arrebato de confianza.

—¿Por qué lo haría? —dijo alzando una ceja con una débil sonrisa cruzando sus labios.

Me encogí de hombros intentando parecer indiferente.

—Porque soy lo que tú necesitas.

Él negó con la cabeza y giró los ojos.

—No quiero ser duro contigo —dijo—, pero cuando te digo Fea, no es un apodo cariñoso, es lo que creo de ti.

Respira Paola, que no te afecte.

Me negaba a que eso me afectara y llorar como toda una estúpida otra vez.

—Y yo creo que eres un idiota —dije—, pero igual me gustas y no podemos hacer nada al respecto.

Ramson alzó las cejas pareciendo quedarse sin palabras por mi franqueza, ya se había burlado de mí, no era como si esto hiciera la diferencia. Ramson sonrió débilmente y se levantó del suelo caminando a la puerta, creí que se iría, sin embargo se detuvo volteando la cabeza antes de salir, enfocando su mirada en mí.

—Eres muy rara —dijo—, pero me caes bien.

¿Rara? Sí, siempre había sido rara.

—Gracias —sonreí forzadamente.

Ramson luchó con una sonrisa y salió de la habitación cerrando la puerta a sus espaldas, dejándome a oscuras.

—¡Bestiasele! —expresé dejándome caer contra el suelo soltando un profundo suspiro, era la conversación más larga y profunda que había tenido con él, si antes no había podido dormir mucho menos lo lograría hacer ahora.


-†-


Me forcé a cerrar los ojos y tan solo dormí una hora antes de que sintiera una fuerte vibración en la cama, me sobresalté y me tranquilicé al darme cuenta que era mi teléfono, lo tomé y atendí al darme cuenta que era una llamada, nadie contestó y simplemente colgaron.

Perfecto, me despertaron por nada.

Solté un suspiro, aproveché para salir a mi casa y cambiarme al uniforme de la escuela, mi vida seguiría con la rutina normal, pero sabía que en las noches tendría compañía yendo a la casa de los Stone, eso lo agradecía, más que ahora mi crush parecía más amable.

Estaba lloviendo un poco cuando caminé a esperar al autobús, me cubrí con mi capucha y observé el auto de Ramson salir de su casa, él manejaba, los vidrios estaban abajo y una rara música retumbaba, le hice un gesto en saludo cuando me miró, ahora que recordaba la conversación de anoche y que prácticamente actuó como mi héroe, creí que podría llevarme, después de todo íbamos a la misma escuela y estaba lloviendo.

Pero a diferencia de mis ridículas historias de amor fantasiosas, mi héroe Ramson Stone me miró con desdén e ignoró mi saludo volviendo a enfocar su mirada al frente y acelerando el auto para desaparecer por la calle.

¿Qué le pasa a ese imbécil?

No sabía exactamente cómo sentirme, creí que por nuestra rara conversación de esta madrugada éramos amigos, que estúpida e ingenua era. Para empeorar las cosas, comenzó a llover más fuerte, debí haberle hecho caso a mi yo interna de no ir a clases hoy.

Llegué después de media hora al instituto, la lluvia se había detenido, pero las nubes seguían grises. Observé el auto de Ramson estacionado y todo el equipo de natación estaba alrededor de él, Nancy Key estaba prácticamente colgando del cuello de Ramson y no paraba de repartirle pequeños besos por el cuello frente a todos, él la exhibía como un premio tomándola de la cintura... algo que sabía jamás haría conmigo.

Ningún chico se fija en el rarita fea que nadie quiere.

El dolor en mi pecho estaba ahí otra vez.

Es su novia, ya déjalos en paz.

Tenía que superar esa enfermiza obsesión, pero era casi imposible considerando que tenía casi diez años ciega de amor por él. Tenía que madurar como había dicho Alfredo. De ahora en adelante no pensaría más en Ramson, y si lo hacía, me arrancaría una hebra de cabello.

Caminé al salón y me encontré con Alfredo cuando tomé asiento, sus ojos grises brillosos y su usual vestimenta deportiva lo hacía lucir como un chico que le gustaban las bandas de rock.

Le di un gran abrazo, no me había dado cuenta de cuanto lo extrañaba, habían sido dos días sin verlo, ni siquiera había sabido nada de mi otra amiga Stefani todo el fin de semana.

Alfredo comenzó a preguntarme lo que había ocurrido y tuve que contarle absolutamente todo, pero no pareció muy contento cuando mencioné que me quedaría en casa de los Stone.

—¿Con el idiota de Ramson? —dijo Alfredo—, por favor, debe de ser una maldita broma.

A mí también me parecía una maldita broma.

Sabía que no sonaba bien, pero estaba determinada a bajar la obsesión con Ramson Stone, y vivir con él creo que sería la mejor forma, así comenzaría a encontrar cosas para odiarlo, como que él dejara la tapa abierta del váter o que solo fuera un superficial y por eso estaba con Nancy.

Joder, dije que no pensaría más en él.

Me arranqué una hebra de cabello y la dejé caer al suelo, Ramson estaba muerto para mí.

Que estúpida era, sabía que jamás sería así.

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★†★
Hola chicas, si hay chicos me avisan que estoy soltera :v
Okno, calmante ysa.
Hoy actualizaré doble, recuerda votar, disculpa la tardanza

¡Él se metió a mi Wattpad! (Libro 1y2) [Completo]Where stories live. Discover now