El Mar del Cielo [KHR]

Próximamente

—Entonces... ¿Finalmente nos abandonaras?—

—Mi muerte debió suceder en mi cumpleaños número 20, ese día Kawahira vino a por mí, pero negué irme porque quería verte triunfar...—

—¿Porque nadie esta deteniéndola?—

—Debemos respetar su decisión...—

—Todo volverá a como estaba...—

—¿Usaras tus llamas para retroceder el tiempo?—

—Tsuna no se merecía eso... Aunque tenga que desaparecer, le daré la vida que él merecia. No me recordará, pero  haré que todos tengan las memorias de los actuales.—

—Así no cometerán el mismo error... —

—Lo siento por Dakari pero... Su madre morirá después de darla a luz cuando retroceda el tiempo. Así, Tsuna y Den crecerán como hermanos...—

—Este mundo no merece personas como tú, ni a personas como él...—

—Por supuesto... Lo que hizo Tsuna no sera en vano, las primeras generaciones estarán en el mundo de nuevo, le devolveré a Emma y a Uni—

—¿Qué harás con el Tri-ni-set?—

—Yo protegeré todo de ahora en adelante, así nadie necesitara heredar los pacificadores—

—Te deseo suerte Ena...—

—Gracias... Kawahira—

—Es tu deseo cambiar todo... Lo que significa que también cambiaras tú —

—Estoy segura de que Tsuna lograra cambiar a la mafia por completó, sin necesidad de matar personas—

—Lo hará... Pero necesitas estar tú para verlo—

—No, no necesito verlo para saber que lo logrará —

—Fue un gusto estar contigo por años Ena—

—Tambien fue un gusto Kura, cuida de Erina por mí —

—Sera un placer—

La pelinegra tomó una daga colocándose frente al Tri-ni-set, detrás de ella, la madre de su guardiana. El filo del arma cortó la piel tierna de sus muñecas, bañando del liquido rojizo la piedra con los 21 objetos, estos comenzaron a brillar cubriendo de su luz todo a su paso.

Toda su historia comenzara de nuevo.

Ese fue el deseo de la décima Aaron, ahora inerte en el suelo.