13. Minie soy Tae ¿Me recuerdas?

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La fiesta de la graduación había llegado, su amigo no podía asistir, sin querer preocuparlo el rubio le decía siempre que todo estaba bien, pero Tae no era tonto, la debilidad en su amigo se hacía presente en todo momento, incluso su cara que antes que  se teñía constantemente ahora estaba sin color y sin brillo, el medicamente que estaba tomando era demasiado fuerte.

Tae camino entre la gente.

Se había pensado demasiado sobre si hacerlo o no. Pero la convicción le llegó justo hacia dos horas que su amigo se la había pasando todo el día durmiendo, sabía que se acercaban las vacaciones y podría descansar todo lo que quisiera , pero no solo era la debilidad fisica lo que lo hacía sentirse mal, Jimin estaba deprimido, el necesitaba a su alma gemela.

Jungkook no sabía nada aún, la madre de Jimin le había dicho que quería que no se enteraran más personas que las necesarias por que no sería fácil para Jimin después reintegrarse sin emotes o burlas. Y así lo había echo, había guardado silencio, pero verlo allí tan frágil, le hizo tomar coraje y encarar al pelinegro.

Él la había regado de la peor manera que se podía dañar a una persona, pero así mismo tambien el tenía el poder de curar las heridas en el alma de su amigo. Si tan solo el pelinegro supiera de la situación de Jimin podría ayudar a reducir su dolor por completo, no tenía dudas.

Se asomó por el balcón del salón de baile y no lo vio. Se sentó y espero que apareciera. No sabía cual sería la respuesta del mayor pero Tae no era cobarde para echarse hacia atrás.

Entonces lo vio que entró con una chica muy linda del brazo, Tae se levantó, cruzó el salón y lo tomó por el codo.

- Jungkook, podemos hablar.

El mayor lo vio con fastidio.

- ¿Ya te mando a que me rueges?

Tae lo miro asombrado, que clase de persona creía que era Minie.

- No, no eso Jungkook, quiero hablarte de Jimin ¿tienes un minuto?

- ¡No! - Se volteó y lo miro con ira - ¡Ve y dile a tu amigo que me deje en paz de una vez por todas! ¡ Al menos que quiera otro calentón!

Tae ahora mismo estaba horrorizado.

- ¡¿ como te atreviste a hacerle algo tan bajo aún sabiendo que el te amaba?!

- Mira mocoso, deja de meterte en cosas que no te incumben, ¡Largo de mi vista!

Tae comprendía a su amigo, la manera en la que el idiota esté se expresaba de el, del que fue "mejor amigo" hablaba demasiado de la calidad humano que dentro de él se encontraba, no valía la pena exponer a Jimin, en el pecho de Tae un instinto de protección se activó.

Sonrió y lo miro con altaneria.

- ¡Ojalá que la maldita Karma caiga en ti! ¡y ojala revuelques en el infierno desgraciado!

Se dio la vuelta furioso, dejando al pelinegro sorprendido por el grado de apoyo que tenía su ex-amigo del joven de pelo castaño.

Tae salió de la fiesta, tomo su camioneta y manejo exaltado, iría a casa de Jimin y dormiría con él. Ya no había otra solución, si Jungkook le había dado la espalda el nunca lo haría, nunca dejaría que él rubio se derrumbase, él se encargaría de sacarlo adelante y si para eso tendría que vivir con él durante las vacaciones lo haría, era lo mínimo que podía hacer para salvar a su amigo de la muerte por tristeza.

No le daría el gusto a Jungkook de ver a Jiminie totalmente derrotado. Sobre su cadáver.

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