41. Luces en el cielo.

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Jimin estaba sentado en su antigua cama en busan, al parecer era de noche, se levantó extrañado y se asomó por la ventana. ¿Cómo demonios llegó allí?

Escuchó el sonido de alguien llorando, se volteó espantado.

-¿Mamá?

Caminó hacia la puerta y agarró el pomo, pero no pudo pues era un tipo de fantasma, volvió a escuchar el lamento, la piel se le erizó.

-Es un sueño.

Regresó y vio que alguien estaba en su cama.

- ¿Hola?

Esa persona estaba llorando bajo su cobija, se veía una luz, de repente esa persona se destapó y dejó el teléfono en el buró.

- ¡Soy yo! - Jimin se vio a sí mismo asombrado.

Estaba llorando con mucho dolor en el rostro, se volvió a acostar llorando profundamente.

Jimin se acercó asombrado por lo que estaba imaginando, parecía tan real. Se acercó al buró, el teléfono aún estaba prendido.

- 14 de octubre - era un día después de su cumpleaños - 00:04 a.m. - No, eran cuatro minutos después de su cumpleaños.

Volteó hacia si mismo y se sentó tratando de entender el por qué de ese sueño.

¿Sueño o recuerdo?

Pero cuando despertó se dio cuenta que el estaba llorando con el mismo dolor con el que su yo antiguo lo estaba haciendo.

Jimin entró a la habitación que compartiría con Jungkook en el barco, se sentó en la orilla de la cama, apenas dos horas atrás había estado tan perdido en el dolor que le dejó ese sueño.

¿Qué había sucedido en el pasado?

No dejaba más que darle vueltas una y otra vez.

Había tratado de estar feliz por el viaje con Kook, pero ahora que estaba solo no tenía que fingir, de nuevo sus ojos se llenaron de lágrimas y no era más que por el recuerdo de ese dolor que había sentido.

¿Soledad?

Se había sentido solo y es que por más que le daba vueltas solo había una razón para llorar de esa manera.

¡El chico de sus recuerdos! ese que tomaba su mano, con el que sonreía, ese que ya no estaba más con él ¿Era él por el qué sufría?

Lo más seguro es que ellos se hubiesen separado desde antes de perder la memoria, sería lógico que él ya no lo buscara más y que no regresara.

Jimin comenzó a llorar por llegar a tal razonamiento, por eso Tae no se lo había dicho. Tae lo sabía, sabia quien era, sabia que el había sufrido.

Se levantó rápidamente, necesitaba a su soulmate, lo necesitaba, es que ahora todo empezaba a tener sentido. Pero se detuvo en la puerta limpiando sus mejillas.

- No puedo.

Se regresó y fue al baño, mojó su rostro.

No podía hacer eso, estaban en un crucero con sus novios, no podía arruinar todo. Se miró en el espejo, sus ojos estaban tan desorbitados, quería explicaciones, quería saber por qué el chico y el se había distanciado. A qué se debia ese dolor, quizás una infidelidad por parte de él o podría ser otra cosa. Y el dolor regresó a instaurarse en su pecho.

El reflejo del espejo comenzó a derramar lágrimas una vez más y no las detuvo. Joder, había sentido la soledad, el dolor y todo con tan solo ese sueño. Ahora era claro, el había estado enamorado, el se había enamorado de ese chico para sentirse de esa manera.

I miss you Donde viven las historias. Descúbrelo ahora