Aseveración

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Justo después de que Osomatsu terminara de hacer la tarea, sus hermanos y él optaron por meterse a bañar. Y ahora que era de noche, la mayoría comenzaba a sentir sueño, con excepción de Todomatsu. El sexto se dio cuenta de su inhabilidad para dormir en cuanto acomodaron los futones y éste intentó conciliar el sueño.

Todomatsu se preocupó al pensar en que si no lograba dormir... no habría oportunidad de ver si podía encontrar a Karamatsu de nuevo. Miró al resto de sus hermanos por unos momentos y casi enseguida inspeccionó la habitación..., encontrando algo que le llamó la atención.

Se trataba de un kit médico que estaba encima de la mesa que normalmente adornaba la habitación, excepto cuando tenían que acomodar el futón para dormir. El menor se acercó a la cajita y la cargó para llevarla consigo a la cocina, donde prendió la luz para examinar su contenido. Dentro de ella encontró varios botecitos, dos de ellos siendo los productos que habían tratado de promocionar para una empresa mientras competía el equipo de su madre contra el de su padre. El sexto examinó las etiquetas, las cuales respectivamente decían: 'Buenas noches' y 'Buenos días'. Se quedó contemplando la idea de tomarlas; no obstante, conocía el efecto de estas y sabía que eran inmediatas. No creía que fuera necesario tomarse algo así de fuerte, por lo que dejó los botes en su lugar y siguió buscando por una alternativa.

Todomatsu sacó otro botecito momentos después, el cual parecía ser un frasco de píldoras para dormir. Este se veía bien, ya que no actuaba inmediatamente, lo cual lo hacía creer que era mucho más seguro de tomar. El sexto se sirvió un vaso de agua y se tomó la píldora inmediatamente, ya entonces cerró el frasco.

Todomatsu regresó a la habitación, donde puso la cajita en su lugar sobre la mesa. Se acercó a su mochila, donde guardó el frasco de píldoras para dormir y regresó a su lugar a lado de Osomatsu, cerró los ojos e intento dormir.

"Dices que no podrías dormirte en su futón, pero... ¿Qué no sería como dormir con él si haces eso?" preguntó Osomatsu. "Tienes todo el derecho de usar su futón, Ichimatsu"

"Yo..." Ichimatsu se veía en conflicto por esto. "No... Osomatsu, no puedo, siento mucho entristecerte, pero... no puedo, al menos todavía no..." añadió Ichimatsu al ver cómo se giraba para darle la espalda al primogénito.

"Lo lamento, Ichimatsu... no quise presionarte, tomate el tiempo que necesites..." contestó Osomatsu al igualmente girarse para el otro lado.

Todomatsu abrió los ojos con lentitud y se quedó mirando al techo mientras escuchaba los débiles sollozos de Osomatsu, quien parecía estar haciendo su mejor esfuerzo porque no lo fueran a escuchar. El sexto frunció el ceño al encontrar un poco irritante lo que estaba pasando; se sentía muy mal por escuchar a su hermano gimiendo muy dolido por el rechazo de Ichimatsu. Todomatsu se sentía molesto por la conducta de Ichimatsu, no es que no entendiera la razón, pero... ¿Rechazar a Osomatsu? ¿Cuando sabía que Osomatsu no lo obligaría a hacer lo que quería...?

Que pudiera herir de esa manera inconsciente a su hermano... no le gustaba. No quería ver sufrir a Osomatsu más, no podía soportar que Ichimatsu lo hiciera llorar. Todomatsu se acercó a Ichimatsu al pasarse al futón de Karamatsu, movimiento que hizo que el cuarto mirara a Todomatsu intentando ver lo que estaba pasando.

"Ichimatsu, sé que te duele, pero... a mi me duele más estar a lado de Osomatsu y escucharlo llorar" dijo Todomatsu en forma de susurro, ya que no quería que Osomatsu se enterara y tratara de detenerlo. "Sé que tal vez sea egoísta pedirte que le hagas caso Osomatsu sin tomar en cuenta como te sientes, pero... yo no creo que la responsabilidad de mantener a Osomatsu feliz sea sólo de Karamatsu o de nosotros sin incluirte a ti"

"Todomatsu... yo..."

"Ya te dejamos en paz por un buen rato, te dormiste en la orilla como quisiste... entiendo que unas cuantas palabras no sirvan de mucho, pero... al menos haz esto por él" dijo Todomatsu al mirar a Osomatsu, el sexto le indicó a Ichimatsu con la mirada que viera lo que había hecho... y efectivamente, Ichimatsu sintió una sensación de caída en el estómago al ver las pequeñas convulsiones de Osomatsu mientras éste sollozaba. Sabía que Osomatsu estaba sensible, pero... verlo llorando era demasiado para él.

Relatos de un Futuro InciertoWhere stories live. Discover now