Capítulo 28 🦋

73.1K 8.7K 3.1K
                                    


Alayna

Las horas pasaron volando mientras platicaba con Eloise acompañada de un café negro y panecillos. Nada de croissants, pero no estaba mal. Hizo que me sintiera cómoda y comprendida a su lado. Disfruté la plenitud de saber qué contaba con una amiga. Rogaba no equivocarme porque ya había tenido muchas decepciones y me negaba a pasar por otro. Mi corazón negro no lo soportaría. Ella me caía muy bien a pesar de que no era fan de las personas.

—Tu cabello me recuerda a alguien—comenté.

Eloise sonrió.

—¿Sí?

—Se llamaba Talya, era una gran amiga y la apreciaba mucho.

Omití la parte en que fue mi primer amor y mi primera experiencia con las chicas. La adoraba, pero como todo lo bueno de mi vida me la arrebataron. Su muerte aún dolía.

—¿Qué sucedió con ella?

Desvié los ojos, incapaz de moverme. Nuestra última conversación fue una discusión y me arrepentí cada minuto. No debí crear lazos en primer lugar. Él se encargó de romperlo y me destruyó en el camino. Nunca olvidaré la imagen de ella tan destrozada que apenas podía reconocerla.

—Murió —Parpadeé para alejar el pasado—. Pero la sigo recordando todos los días.

—Lo siento.

—No me gusta tener debilidades—confesé—. Las odio porque tarde o temprano la usarán en mi contra. Desear a Luca como lo hago me llevará por el mismo camino destructivo.

—¿Hablas de mi jefe?

—Correcto.

Se acercó al cajón que se encontraba a su izquierda y sacó dos cajas de cigarros. Me lanzó uno.

—Necesitas uno de estos —asumió, luego me arrojó el encendedor. Lo encendí, dejando que el humo entrara en mi boca—. Sé que eres una fumadora.

—No pensé que tú también.

Apartó el flequillo rojo de su frente.

—Fumo, pero no en exceso. Solo cuando estoy muy estresada.

—¿Te estoy estresando?

—Para nada —respondió de inmediato—. Aún sigo tensa por lo sucedido con mi hermano.

Me arrepentí por haberle perdonado la vida a ese infeliz, pero tuve que contenerme. Eloise me odiaría y me tendría miedo si era la causante de un trauma tan duro como ver morir a su hermano. No quería perder su amistad o lo que sea que había entre nosotras.

—¿Cuál es el asunto que tienes con él?

—No estamos aquí para hablar de mí —murmuró—. Dime en qué te afecta Luca Vitale.

Mi pecho se encogió como la pasa de uva. Sus actitudes me volvían vulnerable y hasta indefensa. La forma en que me abrazó toda la noche ablandó mi corazón. Incluso mientras dormía se aferró a mí como si no quisiera soltarme nunca.

—Querrá más de mí y no puedo ofrecerle nada que no sea solo sexo.

—Tienes serios problemas con los compromisos —sonrió Eloise, dándole una calada al cigarro—. Eres una mujer que disfruta su libertad. Tener una etiqueta con Luca te hará sentir atada.

Me quedé inmóvil en el sofá, el cigarro colgando entre mis dedos.

—Todo esto de la monogamia lo intenté antes y fue una pésima decisión—Hice una mueca de asco cuando el nombre de Ignazio vino a mi mente—. Le entregué mi confianza a alguien, pero él jugó conmigo y me usó. No quiero pasar por eso de nuevo nunca más. Las reinas como yo deben ser veneradas, no desechadas como una basura inservible.

Belleza Oscura [En Librerías]Where stories live. Discover now